Entrevistas Tiempo de lectura: 4 min

Cultura británica

Cultura británica
Carlos Rodrigues/Getty Images para The Coaches Voice.
Redacción
Héctor García
Publicado el
9 de octubre 2025

Roberto Martínez

Portugal, 2023-Presente

“La realidad de los resultados, la naturaleza misma de nuestro trabajo, no te da estabilidad, pero considero fundamental para un entrenador actuar con la mentalidad de permanencia”

Roberto Martínez se ha consolidado como un entrenador especializado en la dirección de selecciones nacionales. Primero al frente de Bélgica (2016-2022) y, desde 2023, de Portugal, con la que en junio de 2025 conquistó la UEFA Nations League. Antes de eso, Martínez se formó y creció como técnico de clubes en el fútbol británico, iniciando su camino en los banquillos de manera inesperada, tras la llamada de Huw Jenkins, presidente del Swansea City, pocas horas antes de un partido. “Mirando hacia atrás, en mi primer encuentro como entrenador todavía estaba asimilando cuáles eran mis funciones, porque recuerdo que el viernes anterior entrené con el equipo como jugador y el sábado no dirigí el partido, solo conocí a los futbolistas”, explica sobre ese momento en su entrevista con Coaches’ Voice.

Tras una breve etapa como entrenador-jugador, Roberto Martínez decidió centrarse plenamente en su faceta de técnico, estrechamente vinculada al entorno que lo rodeaba: “Quería construir una filosofía de juego, asumir todas aquellas funciones propias de un mánager del fútbol británico: planificar la visión de los próximos tres o cuatro mercados, apostar por jugadores jóvenes con gran potencial y trabajar con ellos. Creo que siempre he mantenido esa forma de trabajar, tanto en los clubes como en las federaciones donde he estado. Es como tomar decisiones pensando que vas a ocupar el cargo durante los próximos 50 años. Y creo que es la única manera. La realidad de los resultados, la naturaleza misma de nuestro trabajo, no te da esa estabilidad, pero considero fundamental para un entrenador actuar con esa mentalidad de permanencia. Siempre lo he asociado con la cultura británica del mánager inglés, que me cautivó desde el primer día”.

En esta entrevista con Coaches’ Voice, Roberto Martínez también recuerda su etapa en el Wigan Athletic (2009-2013), club con el que hizo historia al conquistar la FA Cup en 2013, apenas 72 horas antes de que el equipo descendiera de la Premier League.

Una situación paradójica de la que el técnico extrae una valiosa reflexión: “Lo más significativo, creo, fue que un club como el Wigan Athletic alcanzara por primera vez una final de la FA Cup. Solo llegar ya representaba una memoria increíble para los aficionados y para todos los que estaban cerca del club. Pero fue algo más que eso: la primera final, un motivo de orgullo y satisfacción histórica. Sin embargo, tres días después descendimos de la Premier League. Ese contraste refleja muy bien el recorrido no solo del entrenador, sino también del futbolista y de los equipos de fútbol: pasar de lo más alto a lo más bajo en cuestión de días. Hay muchas historias entrelazadas que, de algún modo, describen la resiliencia que se necesita en el fútbol y todo lo que este deporte conlleva”.

Su última experiencia como entrenador de clubes fue en el Everton, de 2013 a 2016. “Un periodo de enorme satisfacción. Primero porque es un club de gran exigencia, y tuvimos tres temporadas muy fructíferas. En la primera logramos algo muy difícil: 72 puntos, la cifra más alta en la historia del Everton en la Premier League, fruto de un trabajo diario de enorme consistencia. A partir de ahí, las expectativas crecieron y continuamos compitiendo. No logramos acceder a la Champions League, pero sí clasificarnos para la Europa League, con momentos realmente especiales”, recuerda Roberto Martínez sobre su etapa en Goodison Park.

Roberto Martínez