Champions League 2019/2020 Grupo A, 18 de septiembre
Di María (14, 33)
Meunier (90+1)
Costaba reconocer el once titular del Paris Saint-Germain, sin ninguna de sus grandes figuras. Neymar, sancionado, Cavani y Mbappé, estos dos lesionados, vieron desde la grada como sus compañeros pasaron por encima del Real Madrid de Zidane. Ángel Di María, ex del equipo blanco, se bastó él solo para poner delante a su equipo con dos latigazos. El primero dentro del área después de una internada por banda izquierda de Juan Bernat. El segundo, a la media hora, con un suave disparo con la izquierda para colocarla lejos de las manos de Courtois.
A pesar de ir dos goles abajo en el marcador, el Real Madrid no tuvo respuesta alguna en el partido. Ni siquiera a través de Eden Hazard, titular por primera vez en el equipo de Zidane. El partido estuvo siempre bajo dominio de los locales, o más bien bajo el dominio de Gueye, figura omnipresente en el medio del campo.
El último gol llegó en un contragolpe lanzado por los laterales del PSG. Menuier, después de combinar con Bernat, hizo más grande la herida de un Real Madrid que dejó muchas dudas en su estreno en la Champions League. Todo lo contrario que el equipo de Thomas Tuchel, que demostró que su nivel también es muy alto a pesar de no tener a sus estrellas.



9 / 5
DISPAROS / A PUERTA
9 / 0
52 %
Posesión
48 %
646 / 586
Pases / Completados
599 / 526
15 / 2 / 0
Faltas / Amarilla / Roja
14 / 5 / 0
El PSG salió con una formación de un 4-3-3 (abajo), que en su estructura defensiva se convertía en un 4-5-1. Para la estrategia de este encuentro, Thomas Tuchel tenía muy claro utilizar los carriles laterales para causar daño al Real Madrid. Mostrándose además muy ofensivos desde los primeros minutos, controlando también el ritmo y la intensidad del juego. Lo hizo a través de reforzar el medio del campo con Gueye, de muy buena recuperación de balón y salidas. El jugador de Senegal fue el encargado de garantizar el equilibrio defensivo y ofensivo.
Sin salida ante la presión del PSG:
El Real Madrid, mientras, tuvo la ausencia de Sergio Ramos por suspensión, una baja sensible para la zaga blanca -5 derrotas en 5 partidos sin él en Champions League-. En defensa, Zidane jugó con una estructura 4-4-2 que en ataque pasaba a un 4-3-3 (abajo). La novedad del entrenador francés fue contar con James dentro del once inicial, una jugador con muy buenas características de dominio del balón que podría suplir la baja del lesionado Modric.
La presión e intensidad con la que el PSG salió para este encuentro fue determinante, dificultando siempre la progresión del Madrid. El equipo francés tuvo a sus líneas bien adelantadas y con una presión alta desde el arranque. Eso provocó a los 12 minutos el primer gol del encuentro, en asociación con Icardi y Bernat y definición de Di María.
Dentro de su orden táctico el PSG tuvo muy claro no permitir al Madrid ingresar por carril central, evitando la construcción de juego pese a la amplitud y profundidad que mantenía el Madrid con Carvajal y Mendy en las bandas y adelante Benzema (abajo). También trabajó muy bien sus funciones para identificar marcas, distribuyéndose entre acoso intensivo, marca mixta y defender la espalda de los centrales. Todo esto dificultando el acceso de James y Bale.
El PSG golpea dos veces:
Con un Di María muy claro en su toma de decisiones, al minuto 33 llegó el segundo tanto del encuentro. Nuevamente el ex jugador del Real Madrid mediante un disparo a portería, priorizando la potencia a la ubicación definió de forma que fue imposible para Courtois detener el disparo.
El cambio de ritmo y el juego asociativo en velocidad -mediante desdoblamientos- permitía al PSG aprovechar los espacios en carriles laterales. Para el Madrid las transiciones ataque defensa debían ser muy rápidas, ya que el equipo francés aprovechaba muy bien los espacios favorables para el ataque.
La intensidad del encuentro se hizo más evidente en los últimos minutos de la primera mitad, dejando pocos espacios para la ofensiva del Madrid. Otro de los problemas de Zidane era tratar de equilibrar su línea defensiva en el carril lateral derecho principalmente y buscar la estrategia para neutralizar la llegada del PSG a zona de definición.
Sí salió el Madrid con mejor intención de mantener el balón en la segunda mitad, también con una propuesta más ofensiva. Hazard y Kroos, que no estuvieron muy activos durante el primer tiempo, salieron con más intensidad y decisión. Por su parte el PSG mantuvo la misma propuesta, con un bloque medio. No fue tan ofensivo en el primer tramo del segundo tiempo, pero sí se mostró muy equilibrado a nivel defensivo, siempre buscando la igualdad numérica y manteniendo vigilancias defensivas, sin perder la presión agresiva para recuperar el balón rápidamente tras pérdida.
El PSG no se conformó con la ventaja de dos goles, y empezó a buscar ampliar el marcador, generando ataques aprovechando los espacios y desequilibrios defensivos en la defensa del Madrid. La mecánica era buscar la segunda línea, y después un control dirigido y pase al espacio vacío; eludiendo así la marca de los laterales y ganando la espalda de los centrales para buscar el remate dentro del área . Los movimientos de Sarabia, generando apoyos y desmarques, fueron fundamentales para consolidar el ataque del PSG (abajo).
Al mismo tiempo, el equipo galo tenía un claro dominio de la posesión, lo que le permitía a su línea de medio centros tener mayor flexibilidad en la toma de decisiones a la hora de dar los pases. La ubicación de Di maría marcaba un punto muy importante, ya que al momento de recibir los pases recortaba en conducción hacia el centro del área, creando mayores oportunidades para definir.
No encontró reacción:
Zidane intentó encontrar la reacción a través de los cambios: James y Hazard por Jovic y Vázquez. Sin embargo, el equipo se mantuvo en el mismo perfil plano. Con muy pocos espacios no encontró la fórmula para marcar su primer tanto del encuentro. Ya en el tiempo de descuento, Meunier márco el tercer gol en un partido donde fue claro y evidente el análisis que realizó el entrenador del PSG, Tuchel, para sumar los tres puntos.
"Si alguien me dice que ganamos la Champions League, me voy". Así se presentó Thomas Tuchel en rueda de prensa después de la contundente victoria del PSG. El entrenador del PSG destacó el nivel del equipo, tal vez más "liberado" ante la baja de sus estrellas, y de dos de los jugadores principales. "Gueye es una máquina que nunca para de correr y recuperar balones y Di María asumió la responsabilidad ofensiva".
"El PSG ha sido mejor en el juego, en la media, pero sobre todo en intensidad y es lo que me preocupa. Sin ritmo, ni intensidad no puedes hacer nada en esta competencia", señaló Zidane. El entrenador del Madrid también habló sobre una estadística llamativa del partido: ningún disparo a puerta del equipo blanco. "No es algo que me preocupa, pero con los jugadores que tenemos debemos crear ocasiones".