Entrevistas Tiempo de lectura: 11 min

Una nueva historia

Una nueva historia
Fotografía: Sergio Cueto
Redacción
Héctor García
Publicado el
7 de marzo 2023

pedro lópez

Seleccionador de México femenino, 2022-Presente

¿Qué se sentirá cuando eres campeón del mundo?

Esa pregunta me la hice muchas veces los días previos a la final con España ante Japón, en el Mundial Sub-20 en Costa Rica de 2022.

Habíamos estado muy cerca de ganar el campeonato cuatro años antes. Sin embargo, Japón, también nuestro rival en la final de 2018, nos arrebató esa oportunidad. Enfrentarnos a ellas de nuevo en el último paso del campeonato, si cabe, lo hacía más especial. No lo tomaba como una revancha, sino como la oportunidad de demostrarme a mí mismo que había evolucionado como entrenador.

Pero antes de contarte qué paso en la final, déjame retroceder diez años atrás. Al comienzo de esta historia.

Pedro López, entrenador de la selección nacional femenina de México. Sergio Cueto

Fue en 2012. Yo estaba en la Federación Española de Fútbol. Ese año, la FIFA se puso en contacto con la Federación Española para que algunos entrenadores participáramos en un proyecto de desarrollo del fútbol femenino en Costa Rica, porque ahí se iba a celebrar en 2014 el Mundial Sub-17.

Una vez en Costa Rica, los entrenadores que viajábamos empezamos a impartir cursos de formación para las exjugadoras y el cuerpo técnico de la selección del país. Después llegó el trabajo más bonito que he hecho en mi vida.

"No lo tomaba como una revancha, sino como la oportunidad de demostrarme a mí mismo que había evolucionado como entrenador"

Fui por todas las regiones del país. También a las zonas fronterizas con Panamá, el Caribe o el Pacífico. Recuerdo que para llegar a algunos lugares no había GPS que te pudiera llevar. Había zonas incluso en las que participaban jugadoras que tardaban horas en llegar al campo de entrenamiento. O algunas de ellas sin medios, ni si siquiera para unas botas de fútbol.

Nuestro trabajo en esos viajes por toda Costa Rica se dividió en tres fases. Primero hicimos un proceso de captación de jugadoras que estuvieran en edad de poder jugar en 2014 el Mundial Sub-17 con festivales de fútbol femenino en prácticamente todos los cantones del país. Después, una vez hecha la selección, ayudamos a los entrenadores nativos a formar un equipo en cada cantón con esas jugadoras que habíamos captado. El último paso fue trabajar con los entrenadores para que, cuando nosotros nos fuéramos del país, ellos siguieran entrenando a las jugadoras.

López estuvo al frente de la selección española que ganó el Mundial Sub20 de 2022 en Costa Rica. FIFA via Getty Images

Con toda esa estructura ya montada, la Federación de Costa Rica organizó en los meses siguientes un campeonato por regiones, de donde finalmente salieron las futbolistas que participaron en el Mundial Sub-17.

Fueron en total cerca de cinco meses de viajes. Una experiencia increíble a todos los niveles. Personal y profesional. Un trabajo de campo en un contexto muy diferente al que yo estaba acostumbrado. Descubrí otra manera de vivir el fútbol. Sin medios en algunos lugares, pero donde la ilusión por jugar era muy grande.

"en costa rica llegó el trabajo más bonito que he hecho en mi vida"

Pues bien, diez años después de vivir todo eso, estaba de vuelta en Costa Rica para intentar ganar el Mundial Sub-20 de 2022 con España. Por eso decía que esta historia empieza ahí.

España llegó al campeonato como una de las favoritas al título. Más aún después de ganar el Europeo Sub 19 solo dos meses antes, en julio. Muchas de esas jugadoras también estuvieron en el Mundial. Jugadoras que tomaron más protagonismo en el campeonato del mundo debido a las bajas por lesión de futbolistas importantes de la Sub-20 como María López Valenzuela, Elene Lete, Jana Fernández o Bruna Villamala.

De la mano de Pedro López, la Sub 20 española logró el campeonato mundial en Costa Rica, un lugar donde el entrenador había vivido intensas experiencias en su carrera. FIFA via Getty Images
España ganó el Mundial Sub 20 en Costa Rica 2022, después de ganar a Japón en la final (3-1). FIFA via Getty Images

En el Europeo todo fue fantástico. Siempre tuve la sensación de que todo iba bien. La preparación, los partidos, las jugadoras, las sensaciones... Cualquier pequeño detalle que en otras ocasiones te puede preocupar o incomodar, en esa ocasión estaba perfecto. Desde el principio hasta el final.

Sin embargo, el Mundial Sub-20 fue totalmente diferente. La preparación había sido buena. Pero los resultados no fueron iguales en los partidos. Sí que ganamos a México 1-0, pero después perdimos con Corea del Sur 2-0 y Estados Unidos 3-0. Además, el primer partido del Mundial contra Brasil lo empatamos 0-0.

"se trató solo de una cosa: avanzar y avanzar. y así lo hicimos"

Ahí pasó algo que no nos había ocurrido antes. Ni a las jugadoras, ni a mí como entrenador: en tres partidos consecutivos no fuimos capaces de marcar un gol.

Una situación complicada de gestionar en la competición más importante para las jugadoras de esa edad. Al margen de que las concentraciones se hacen largas a veces —sobre todo para aquellas que ya habían estado en el Europeo—, si las futbolistas pierden la esperanza o sienten que no han ganado en tres partidos y no han sido capaces de hacer un gol, todo se puede derrumbar.

Pedro López explica cómo fue el trayecto de Costa Rica a España, antes de llegar a México. Sergio Cueto.
López, en la entrevista con The Coaches' Voice. Sergio Cueto.

Entonces nos tocó hacer mucho trabajo para ir identificando por qué nos estaba pasando eso. Y mientras buscábamos una conclusión, teníamos que seguir compitiendo. Sin posibilidad de fallo. Porque en un Mundial, si no has sido capaz de ganar el primer partido, no hay lugar al error.

Así que la consigna a las jugadoras y a nosotros mismos, el cuerpo técnico, fue clara. Pasara lo que pasara, cuando salíamos al campo, debíamos tener las sensaciones de que a un partido podíamos ganar a cualquiera.

"el peligro de japón no está donde centran tu atención, sino en lo que no te fijas. Es un poco un juego de ilusionismo"

Por supuesto, siendo conscientes de nuestras debilidades, que sabíamos cuáles eran, pero se trataba solo de una cosa: avanzar y avanzar. Y así lo hicimos.

Después de superar la fase de grupos con las victorias ante Costa Rica (5-0) y Australia (3-0), las jugadoras recuperaron las sensaciones para a afrontar cada partido de las eliminatorias con el punto adecuado de confianza, seguridad y motivación. Siempre con un reto por delante; creyendo que éramos capaces de superarlo.

La selección Sub 20 española de Pedro López fue de menos a más en el Mundial de Costa Rica. FIFA via Getty Images
La selección Sub 20 española de López fue de menos a más en el Mundial de Costa Rica. FIFA via Getty Images

Ganar estaba en nuestra mano, como demostramos en los cuartos ante México (1-0) y las semifinales contra Países Bajos (2-1). Pero también podíamos hacerlo en la final, aunque el rival fuera Japón. Un equipo al que nuestras jugadoras veían casi inalcanzable para ellas.

Y más aún, como dije, con el antecedente de la final de 2018 en la que nos ganaron 3-1, con un equipo de España donde estaban jugadoras de tan alto nivel como Patricia Guijarro, Aitana Bonmatí, Laia Aleixandri, Damaris Egurrola… Todas ellas ahora referentes en el fútbol femenino en España y jugando en los mejores equipos del mundo.

"soy una persona que no expresa muchos sus sentimientos, pero fue muy especial por todo el significado que tenía para mí ganar en Costa Rica"

El fútbol de Japón es de una técnica exquisita; acompañado por un ritmo altísimo de juego. A todo el mundo le llama la atención. Y además son super educadas. Eso hace que sea un equipo que se gane el cariño de todo el mundo. En la final, yo sentía que el público quería a Japón.

Sin embargo, y aunque rozan la perfección, después de ver varios de sus partidos en el campo, yo intuía cosas en el juego de Japón que nos encajaban. Ellas son una selección que toca muy bien la pelota en el mediocampo. Sin embargo, su peligro no está ahí, donde centran tu atención, sino en lo que no te fijas.

Es un poco un juego de ilusionismo.

Sergio Cueto

España controló muy bien eso en la final. Las jugadoras focalizaron la atención en cómo realmente Japón te marcaba los goles, con movimientos de sus delanteras a la espalda de la defensa, y no en su juego tan atractivo y rápido en el mediocampo.

Nuestra primera mitad fue fantástica, con tres goles de ventaja al descanso. En el segundo tiempo, conseguimos resistir a pesar de que ellas nos hicieran un gol. En definitiva, fue un partido espectacular de nuestras jugadoras para ganar la final ante un gran equipo.

"Siempre con un reto por delante; creyendo que éramos capaces de superarlo"

¿Y cómo te sientes cuando eres campeón del mundo?

Creo que soy una persona que no expresa muchos sus sentimientos, pero fue muy especial por todo el significado que tenía para mí ganar en Costa Rica. Un país muy señalado para mí desde ese viaje que hice en 2012.

Finalizado el Mundial, no tuve tiempo para unas vacaciones ni para disfrutar del triunfo. Rápidamente, llegó el siguiente objetivo: la selección absoluta de México.

La selección femenina de México fue el siguiente desafío de López. Hector Vivas/Getty Images
La selección femenina de México es el siguiente desafío de López. Hector Vivas/Getty Images

La contratación se confirmó después del Mundial, pero yo sabía que podía pasar. Durante el campeonato en Costa Rica, contactó conmigo Andrea Rodebaugh, directora deportiva de la selección femenina de México. Curiosamente, yo había conocido a Andrea también en ese viaje por Costa Rica en 2012. Ella fue la instructora de FIFA para los cursos de formación que hicimos.

“¿Cuál es tu situación?,” me preguntó Andrea, quien me señaló que estaba interesada en que fuese yo la persona que liderara el nuevo proyecto de México, después de que la selección no se clasificara para el Mundial femenino de 2023. Para mí era un halago que una persona de la experiencia de Andrea mostrara ese interés tan fuerte por mí.

"Cuando yo empecé en la Federación española, veíamos a los rivales como ‘monstruos’"

Yo tenía contrato con España. Así que tenía que decidir qué hacer; valorando muy bien cada opción.

En la selección española, yo estaba contento. Además, la mayoría de las jugadoras que estuvieron en el Mundial Sub-20 iban a seguir conmigo. Es decir, tenía un equipo para disfrutar. Pero, al mismo tiempo, me preguntaba: ¿Volveré a tener la oportunidad de entrenar a una selección como México?

López afronta con México una nueva etapa en su carrera profesional después de triunfar en el fútbol base femenino de España. Sergio Rico

México es un país de fútbol. Tiene una federación fuerte, con buenas instalaciones, una liga de fútbol femenina profesional, jugadoras con talento y hablan el mismo idioma que yo. Siento que para transmitir en detalle y hacerle llegar el mensaje a la jugadora de la manera más concreta, debes hablar el mismo idioma.

Por si fuera poco, con un proyecto a largo plazo: el Mundial 2027. Algo que no es habitual en el fútbol. Es difícil que a un entrenador se le dé tanto tiempo para trabajar.

Todo eso fue lo que hizo decidirme por iniciar una nueva etapa como seleccionador absoluto de México femenino. Una etapa en la que encuentro muchos paralelismos al recorrido que hice con España.

Cuando yo empecé en la Federación española, veíamos a los rivales como ‘monstruos’. En algunos casos la diferencia parecía insalvable. Pero después nos fuimos ganando el respeto. Y, al fin, acabamos siendo referentes.

Eso mismo es lo que quiero conseguir con México, en una nueva historia que arranca para mí.