Gonzalo Higuaín
Cedido en préstamo de la Juventus al Chelsea
Recién llegado al Chelsea, Gonzalo Higuaín ha sido 75 veces internacional con Argentina, pero su lugar de nacimiento está en la costa oeste de Francia, donde su padre jugaba con el Brest. Al regresar a su país de origen, el joven Gonzalo siguió los pasos de su padre y, después de progresar en las categorías inferiores de River Plate, se convirtió en futbolista profesional.
Después de una etapa de 18 meses con el primer equipo de River Plate, Higuaín se fue al Real Madrid por lo que ahora se ve como la modesta cifra de 12 millones de euros. Durante sus siete temporadas con el equipo blanco, el joven argentino se enfrentó a una dura competencia por la titularidad. Basta con nombrar a Raúl, Ruud van Nistelrooy, Cristiano Ronaldo y Karim Benzema. Aun así, consiguió más de 100 goles en la Liga, promediando casi un gol cada dos partidos.
Cuando se concretó su salida al Napoli en el verano de 2013, ya habían pasado tres años desde su mejor momento en España, cuando marcó 27 goles en 32 partidos. Sin embargo, con la titularidad asegurada en Italia mostró toda su capacidad goleadora, marcando 71 goles en la Liga en tres temporadas, destacando los 36 de la 2014-15. Un récord que comparte, en una sola campaña bajo la batuta del actual entrenador del Chelsea, Maurizio Sarri (abajo).
Esa productividad de cara a puerta le valió al entonces delantero de 28 años una transferencia de 90 millones de euros a la Juventus, donde sumó 40 tantos y dos títulos de campeón de Liga para agregar a los tres que consiguió con el Real Madrid. Más recientemente, después de la llegada a Turín de Cristiano Ronaldo, Higuaín ha pasado la mitad de la temporada cedido a préstamo en el AC Milan.
A nivel internacional, el ariete de 31 años ha marcado 31 goles en 75 internacionalidades con la selección albiceleste, jugando también tres Mundiales. Sin embargo, es especialmente recordado por desperdiciar una gran ocasión para darle ventaja a Argentina en la final del Mundial de 2014, un partido que terminó ganando Alemania (1-0). Además, Higuaín no ha marcado para su Selección desde octubre de 2016, cuando anotó frente a Perú en las eliminatorias para el Mundial 2018.
Análisis táctico
La descripción más precisa de Higuaín sea quizás la de un clásico numero 9 cuya única intención es hacer goles. Es un jugador que le gusta atacar desde cualquier ángulo e irradia agresividad, especialmente frente a fuertes defensas centrales. De espaldas a la portería y cuando es presionado, Higuaín es más que capaz de escaparse de su marca (abajo). Aunque no es el jugador más rápido en distancias largas, sí es muy veloz cuando se escapa de la presión o de múltiples defensas en un espacio reducido.
Su juego combinatorio lejos de la portería es otra herramienta útil, aunque a veces mantiene el balón demasiado tiempo y pierde la oportunidad de combinar con jugadores que corren por el centro ofreciendo apoyo desde atrás. Sus combinaciones con jugadores por las bandas (tanto laterales como extremos) es más efectiva, ya que esta posibilidad le da la opción de lanzarse hacia el área rival. Para este fin, sus carreras de apoyo hacia adelante después de descargar el balón son excepcionales. Su cambio, tanto de velocidad como dirección, puede generar pesadillas a los defensas contrarios.
Su primer toque con el balón es óptimo, pero la habilidad para recuperar balones o marcar goles en rechaces o de media volea es verdaderamente impresionante. Higuaín claramente prefiere disparar con potencia, con el balón apenas por encima del suelo. Un mecanismo que maneja muy bien, como pudo comprobar el Tottenham en la Champions la temporada pasada (abajo). El atacante tiene también la facilidad de disparar a puerta en la misma dirección que viene la pelota, incluso si eso significa darse vuelta y girar su cuerpo en formas visualmente extrañas. Muchas veces eso sorprende a defensas y porteros, quienes esperan que él toque primero el balón antes de disparar.
Finalmente, Higuaín también hace uso de movimientos inteligentes para colocarse en el lado ciego de sus marcadores. Son estos movimientos y talento para disparar el balón, las habilidades que lo han ayudado a marcar tantos goles en varios de los más grande clubes europeos. Sarri espera ahora que pueda repetir esos logros en el Chelsea.
Rol en su nuevo club
Con Higuaín llegando a Stamford Bridge para ser el foco central de la línea de ataque Blue, esperamos ver a Eden Hazard volviendo a su rol preferido en el lado izquierdo del ataque. La conexión Hazard e Higuaín podría ser crucial para las oportunidades del Chelsea esta temporada de llegar a la Champions League. Y es que el argentino muchas veces se luce cuando con los centros son conectados por jugadores que se desplazan al contrario de su buen pie, algo que mostró en su paso por el Milan, donde hizo una gran pareja con Suso (abajo).
Hazard y otros jugadores que van por los espacios anchos y que desde la próxima temporada incluirán a Christian Pulisic, sin duda se beneficiarán de la capacidad de Higuaín de aguantar el balón y combinarse con sus compañeros de equipo. A Álvaro Morata especialmente le ha costado ocupar ese rol, que ha sido enormemente desperdiciado en un equipo que cuenta con la precisión milimétrica de David Luiz atrás.
Ciertamente tiene la agresión para lidiar con los defensas centrales de la Premier League, pero el argentino tiene un temperamento fuerte. Si el Chelsea quiere sacar lo mejor de él – y viceversa – entonces hacer que se integre tan rápido como sea posible puede contribuir. Tanto Sarri como su creador en el mediocampo Jorginho trabajaron con él en el Napoli. Reavivar esa relación puede funcionar para sacar lo mejor del delantero que, a los 31 años edad, casi con seguridad ya pasó el mejor momento de su carrera.
Redacción: Héctor Riazuelo