Antonio Conte
Inter de Milán, 2019-2020
Antonio Conte ha tenido un impacto significativo desde su llegada al Inter de Milán el pasado verano, remodelando a su nuevo equipo con varios nuevos fichajes y un cambio de sistema que ha traído resultados inmediatos. El ex entrenador del Chelsea (2016-2018) ha firmado a cinco jugadores de la Premier League, incluyendo, más recientemente, a Christian Eriksen (ex Tottenham) y Ashley Young (ex Manchester United) en enero, aunque el más exitoso de sus fichajes ha sido el ex delantero del United, Romelu Lukaku.
Es así que el Inter llega al tramo decisivo de la temporada con todas las opciones abiertas en las tres competencias: Serie A, Europa League y Coppa de Italia. De este modo, y al igual que en su primera temporada con el Chelsea donde ganó la Premier League, Conte está en disposición de conquistar al menos un título en su primer año como técnico interista.
Análisis táctico:
A diferencia de lo que ocurrió en el Chelsea, donde Conte tardó seis partidos en adoptar un sistema defensivo con 3 centrales, en el Inter reorganizó la zaga desde el inicio a partir de la línea de 4 de su predecesor Luciano Spalletti. De este modo, el técnico italiano ha apostado por un sistema similar al 3-5-2 que desarolló durante sus tres temporadas en la Juventus.
Si en su paso por la Premier League Conte utilizó un 3-4-3, con dos mediocampistas centrales, un delantero centro y dos extremos; en el Inter ha optado por jugar con dos delanteros centros y tres mediocampistas centrales versátiles (abajo).
En la Juve, los dos volantes ofrecían carreras ofensivas en profundidad, apoyando los ataques por los pasillos interiores y proporcionando una fuente consistente y crucial de goles. Claudio Marchisio y Arturo Vidal estuvieron a menudo entre los máximos goleadores del Juventus de Conte, un papel que pueden interpretar Marcelo Brozovic y Stefano Sensi con el Inter.
Los patrones de juego del Inter en mediocampo recuerdan a los que utilizó Conte en la Juve, a través de Brozovic intentando pases por los pasillos interiores (abajo) como hacía Andrea Pirlo en Turín; un delantero deslizándose al medio del campo para buscar la asociación en corto con Brozovic, y el otro delantero atacando la espalda de la defensa rival. Asimismo, uno de los volantes también ofrece apoyos como tercer hombre junto al atacante más avanzado.
Los mediocampistas centrales han experimentado la llegada en profundidad, en un intento de igualar en unidades a los rivales que permanecen en un bloque bajo. Así, se crean espacios para realizar pases más directos a sus carrileros, antes de que los delanteros y los laterales ataquen el área.
En fase ofensiva, y de manera general, el Inter se desarrolla con estructura de 3-3-4 a través de sus dos volantes apoyando a sus delanteros una vez que el balón llega a campo contrario. Esta ha sido a menudo su estrategia cuando el equipo rival opta por una presión sobre sus defensas, utilizando en estas circunstancias el juego directo con Lukaku, aprovechando la habilidad de su delantero para retener el balón en zonas de ataque.
Sin balón, el Inter de Conte no ha conseguido ejercer una presión eficaz en la salida de balón del rival, pero sí se ha mostrado mucho más efectivo cuando se desarrolla en bloque medio. Sobre un 5-3-2, con poco espacios entre sus unidades, los jugadores del Inter han sido capaces de aplicar la presión sobre el balón que demanda Conte. Este bloque medio, combinado con la capacidad de Lukaku para aguantar el balón, da al Inter los cimientos ideales para construir contragolpes, invitando a los laterales y volantes a llegar al último tercio de campo.
Cuando el Inter se enfrenta a una transición defensiva, su línea con 3 centrales ha mostrado una gran seguridad para anular los ataque rivales. Con ambos carrileros en posiciones avanzadas, las bandas permanecen desprotegidas, pero los tres centrales de los Nerazzuris son lo suficientemente rápidos para realizar la cobertura y retrasar los ataques rivales hasta que los compañeros recuperen sus posiciones defensivas. Sólo la Lazio, con 23 tantos, ha recibido menos goles esta temporada que el Inter (24); siendo una defensa fuerte un rasgo constante de los equipos de Conte.
El nuevo aspecto del Inter:
Conte ha firmado jugadores que pueden adaptarse a diferentes sistemas de juego, muchos de ellos también capaces de poder jugar en múltiples posiciones. Puede que no tenga a los mejores especialistas en determinadas posiciones, pero cuenta con jugadores bien formados y confiables en el desarrollo de su trabajo.
Sensi, recientemente convocado por la selección de Italia, llegó cedido por Sassuolo para reforzar las opciones de ataque del Inter en las posiciones centrales, entre otras cosas por su habilidad con el balón y su eficiente capacidad de asociación en el último tercio de campo. Su compañero de préstamo, Nicolo Barella, ofrece una amenaza ofensiva desde el centro del campo, desde donde su habilidad para superar a un oponente y romper las líneas representa una opción diferente en ataque. Las carreras de Barella atraen a los defensores; también ambicioso con sus pases, a menudo jugando en vertical hacia los compañeros en zonas adelantadas.
Una de los grandes nombres que llegó el pasado verano fue Alexis Sánchez (arriba). Sin embargo, al igual que en su etapa en el United, el internacional chileno ha tenido poco impacto en San Siro. Ha estado más participativo desde el parón de invierno, pero su compañero de ataque Lukaku se ha mostrado mucho más eficaz desde que también llegó de Old Trafford, lo que sugiere que el Inter no hará efectiva la opción de compra sobre Sánchez.
Con Conte animando a sus mediocampistas a llegar al último tercio de campo, Lukaku y Lautaro Martínez reciben un apoyo constante. Han formado una formidable pareja de ataque (abajo), que ha contribuido a sumar 28 goles entre ambos hasta la fecha en la Serie A, encajando eficazmente y ofreciendo desmarques en direcciones opuestas que estiran las defensas rivales y generan espacios. Es Lukaku quien se desplaza con más regularidad a medio campo para recibir la posesión a los pies, mientras que su compañero de ataque favorece las carreras a la espalda de la defensa rival.
Christian Eriksen fue fichado durante la ventana de transferencia de enero desde el Tottenham para añadir una opción más en el juego de ataque. Ashley Young llegó al mismo tiempo, también desde el United, instalándose rápidamente en el perfil izquierdo del medio campo de 5 jugadores. Conte le ha dado la libertad de avanzar regularmente, sabiendo que 3 defensores centrales y al menos un centrocampista central le harán la cobertura. La presencia en el lado opuesto de Antonio Candreva hace que el Inter puede ofrecer centros de calidad desde ambas bandas a sus delanteros.
Diego Godín es otro de los nuevos jugadores de este Inter (en un traspaso gratuito desde el Atlético de Madrid), añadiendo mayor seguridad defensiva en el centro de la zaga. Ofrece experiencia y una impresionante capacidad de lectura del juego, que puede resultar particularmente influyente en un equipo con carrileros tan ofensivos.