Análisis táctico: Argentina 1 Ecuador 0

Un gol de Lionel Messi desde el punto de penal en el minuto 13 de partido fue suficiente para que Argentina derrotara a Ecuador en la primera jornada de los clasificatorios para el Mundial de Qatar 2022. El jugador del Barcelona, de paso, suma su tanto número 71, a solo 6 de los 77 de Pelé con Brasil, el máximo goleador de las selecciones sudamericanas.

Fue lo más destacado de un choque donde ambos combinados mostraron la necesidad de ir acumulando partidos para terminar de ensamblar todas las piezas y ganar fluidez en el juego. Ambos lo harán en la segunda jornada, donde Argentina juega en la cancha de la selección de Bolivia, mientras Ecuador recibe a Uruguay.

Alineaciones iniciales

Argentina

Ecuador

La selección de Argentina salió con una formación de 4-2-3-1 (abajo), con Messi en posiciones más retrasadas en ataque, junto con Lucas Ocampos y Lautaro Martínez, encargado el jugador del Inter de garantizar la profundidad y la movilidad en ataque durante la construcción del juego. Buscó el equipo de Scaloni dominar la posesión del balón a través de superioridades numéricas y aprovechar los cambios de ritmo en los carriles laterales para sacar el centro y filtrar pases entre líneas.



Presión del equipo de Scaloni:

En fase defensiva, Argentina se estructuró sobre un 4-4-2 compacto, desarrollado en bloque alto y con la líneas estrechas. Apostó el cuadro local por una presión alta sobre su rival, obligándolo en muchas ocasiones a tener que jugar en largo ante la imposibilidad de progresar desde atrás. En campo propio, Argentina mantuvo esa misma presión sobre su rival, acosando intensamente al poseedor del balón para forzar el pase atrás.

El desarrollo de la Tricolor:

Ecuador jugó en fase ofensiva con un 4-1-4-1 (abajo). Carlos Gruezo, como mediocentro, tenía la tarea de construir el juego y movilizar el ataque. Ángel Mena, Moisés Caicedo y Enner Valencia buscaban asociarse para llegar a portería, de manera más destacada en las transiciones defensa-ataque para aprovechar el desequilibrio y los espacios de Argentina, con Valencia en punta en estas acciones. Por los carriles laterales, la velocidad de Renato Ibarra generaba el cambio de ritmo, mientras Mena llegaba a profundidad para buscar el centro.



Gustavo Alfaro mutó a su equipo a un 4-4-2 en los momentos sin balón, manteniendo el equipo en bloque bajo y con movimientos zonales. Buscó también la Tricolor cerrar los pasillos interiores para que Messi no pudiera recibir con facilidad el balón.

Messi da el golpe:

En los primeros minutos de partido, Ecuador se mantuvo ordenado y compacto, ante un equipo argentino que buscó sorprender rápidamente a su rival y presionarlo en primera línea. Cuando el cuadro visitante empezaba a tomar la iniciativa, y por momentos buscaba adelantar un poco sus líneas, llegaría la acción del penalti de Pervis Estupiñán sobre Ocampos en la línea de fondo. Una acción cobrada con acierto por Messi con un fuerte disparo al lado izquierdo de Alexander Domínguez.

Con ventaja en el marcador, el equipo de Scaloni buscó dominar la posesión e identificar los espacios para el ataque manteniendo el ritmo del juego. El tanto tuvo impacto en Ecuador, que empezó a retroceder líneas, situándose en bloque bajo (abajo), para ordenarse nuevamente.



Desde ahí buscó la igualada en el partido, aunque después de ceder tanto terreno a su rival llegaba con menos hombres al campo de Argentina, que tenía muy clara su estrategia en fase defensiva: cerrar los espacios, mantenerse corto y marcas individuales constantes (abajo). A pesar del orden defensivo del equipo local y la inferioridad numérica, Ecuador sí pudo aprovechar la velocidad y cambio de ritmo de Ibarra y Mena por bandas en algunos momentos del partido.



Dos perfiles diferentes:

Argentina, a través del dominio de balón mencionado anteriormente, controlaba el partido, con Messi entre líneas recibiendo de espaldas para buscar después el uno contra uno o pases filtrados para Lautaro y Ocampos, jugadores que buscaban la diagonal.

Ecuador se preocupó mucho más por cerrar las líneas de pase, evitar los desmarques a la espalda y mantener las vigilancias defensivas. No con un acoso intensivo sobre el rival, pero sí basculando para reducir el espacio delante del posible receptor del pase en desmarque de apoyo por parte de los jugadores del combinado albiceleste.

En la salida de Argentina, pese a que la presión de Ecuador no era alta, le costaba jugar por los pasillos interiores, ya que Leandro Paredes no se posicionaba en el medio garantizando el inicio del juego (abajo). Esto provocaba por momentos que el equipo de Scaloni no encontrara espacios para llegar a zona de finalización con claridad.



Opta por contragolpear:

En los primeros minutos del segundo tiempo, Argentina mantenía su mismo esquema y lectura de juego. Presión alta sobre la salida de Ecuador para provocar el error o el despeje por parte del portero o la defensa (abajo). Sí cambió la selección local el modelo ofensivo, con mayor énfasis en las transiciones tras recuperación del balón, teniendo a Ocampos y Rodrigo De Paul como jugadores para lanzar esas acciones. Ambos buscarían después en profundidad a Lautaro, quien en varias ocasiones apostó por el remate de media distancia buscando sorprender al portero Domínguez.



Gran parte de esas transiciones derivaron de la apuesta de ataque de Ecuador en el segundo acto, con las líneas más adelantadas y buscando la presión alta sobre la salida de Argentina (abajo). Esto dejaba menos espacios para la construcción del ataque a su rival, estrategia que con el paso de los minutos empezó a funcionar, teniendo el equipo de Scaloni menos impacto en los contragolpes.



Controlar a Messi y atacar:

A pesar de tener menos peso ofensivo, Messi seguía buscando situarse entre líneas, fabricándose espacios para atacar, ya que Lautaro se encargaba de fijar las marcas de los centrales para permitir los remates de Ocampos. Una acción sobre la que Ecuador tuvo que tener una especial vigilancia, no permitiendo el ingreso del jugador del Barcelona a zona de finalización, ya fuera para cerrar cualquier pase filtrado o acción individual (abajo). Ese fue un desarrollo que hizo ver a la defensa visitante bastante equilibrada y compacta.



En los últimos minutos del partido, Alfaro redobló su apuesta para conseguir el empate, adelantando aún más las líneas. Ecuador empezó a triangular en los carriles laterales, a buscar el tercer hombre y el pase sobre Valencia que, en el segundo tiempo, garantizó la profundidad manteniéndose entre los centrales. Pese a todo, el equipo visitante no pudo neutralizar la ventaja de Argentina, que sumó los tres primeros puntos.



"Las condiciones no eran fáciles, sumado a las dificultades de no haber estado juntos por tanto tiempo. Había muchos jugadores que hoy debutaban en Eliminatorias, y también teníamos claro que eso podía pasar por ser el primer partido", señaló Scaloni. "Nosotros rescatamos siempre lo bueno e intentamos mejorar lo que se pudo hacer mejor. El equipo fue sólido. Para buscar otras cosas tendremos tiempo”, añadió el entrenador de Argentina.



"Honestamente, más allá de ser de VAR, a mi entender deja muchas dudas. Para mí, no fue penal", destacó Alfaro sobre la acción que marcó el partido. En relación al encuentro, el seleccionador de Ecuador señaló: "Me gustaron partes del primer tiempo y del segundo. Tuvimos orden y fuimos agresivos. Quizás, en el arranque respetamos a Argentina porque es una muy buena selección. Nos faltó esa soltura de animarnos para atacarlos".

Redacción: Héctor García