Mundial Femenino Grupo "D", 19 de junio de 2019
Little (19)
Beattie (49)
Cuthbert (69)
Menéndez (74)
Alexander (79 pp)
Bonsengundo (90+4 pen.)
Los milagros existen. Al menos para Argentina. A falta de pocos minutos para el final, la supervivencia de la "Albiceleste" en el Mundial de Francia 2019 lucía imposible. La desventaja ante Escocia, más acertada de cara a puerta, era de tres goles. Pero todo cambió en un final de partido que pasará a la historia del fútbol argentino femenino.
Menéndez abrió el camino de la remontada en el minuto 74 de partido, seguido de un gol en propia meta de Escocia cinco minutos después. El último minuto fue de locura, con el gol de penalti de Bonsegundo. La argentina falló en el primer intento, pero la rectificación del VAR le dio la oportunidad de marcar en segunda ocasión.
El empate mantiene con un hilo de vida a Argentina en la competencia para pasar como una de las mejores terceras. Le queda esperar a lo que ocurra en la última jornada de hoy, dependiendo del partido Camerún-Nueva Zelanda del Grupo "E" y el Tailandia-Chile del Grupo "F". Escocia, mientras, se despide ya del Mundial en un final muy amargo.
11 / 7
DISPAROS / A PUERTA
9 / 5
47 %
Posesión
53 %
408 / 323
Pases / Completados
390 / 295
15 / 3 / 0
Faltas / Amarilla / Roja
14 / 1 / 0
La selección de Escocia salió con un 4-2-3-1 como formación inicial. En su estructura ofensiva se desarrolló en 4-3-3 y en defensa en un 4-1-2-3. Crichton se posicionó como líbero por delante de la línea defensiva con la misión de no dar ventaja a los posibles contragolpes que podía generar la selección argentina.
Argentina, por su parte, se estructuró en 4-2-3-1 en su formación inicial. En ataque, el dibujo se convertía en un 4-4-1-1, con un juego combinado, buscando mantener el equilibrio defensivo y no regalar espacios a la selección de Escocia. Una vez que recuperaban el balón buscaban progresar rápidamente aprovechando la ubicación en profundidad de Jaimes en ataque, siempre colocada entre las dos centrales de la selección escocesa.
Los primeros minutos del encuentro se desarrollaron a una alta intensidad por parte de los dos equipos. La selección argentina, después de haber tenido dos partidos muy defensivos contra Japón e Inglaterra, esta vez apostó por un juego más ofensivo y mucho más directo, en el cual las jugadoras Bonsegundo, Banini y Larroquette triangulaban en las transiciones ofensivas para llegar a portería rival.
Para Escocia era importante mantener la vigilancia defensiva de Banini y Bonsegundo, función que cumplieron las defensas Beattie y Smith, siempre con una marca muy fuerte a la poseedora del balón por parte de la línea de medios, cuidando los cambios de orientación y que Jaimes y Larroquette les pudieran ganar la espalda.
El encuentro se desarrolló de manera muy pareja en el primer tiempo: 51% de posesión para Escocia y 49% para Argentina en tan solo 35 minutos. Para entonces, Escocia ya se había adelantado en el marcador, con la anotación de Little en el minuto 19 tras aprovechar un rebote de la arquera argentina.
A pesar de la ventaja de la selección británica, el partido era de ida y vuelta. Escocia logró encontrar los movimientos tácticos que le permitieron llegar a portería rival con más eficacia. Para eso, en la línea de medios, en zona de construcción, siempre se encontraba una jugadora situada en intervalo y en apoyos diagonales que permitieran superar las líneas enemigas, con cambios de ritmo y pases en profundidad buscando carril lateral.
Argentina también tuvo varias ocasiones de gol antes del descanso, aunque no encontró el gol en ninguna de ellas. El plan para conseguirlo en la segunda mitad pasaba por adelantar más sus líneas en la búsqueda de más profundidad y llegar con superioridad numérica en ataque para aprovechar el desequilibrio defensivo de Escocia.
Escocia ataca en amplitud:
Las dos selecciones no realizaron ningún cambio para el inicio del segundo tiempo, donde, en el transcurso de los primeros minutos, se observó un ataque mucho más contundente por parte de la selección de Escocia, abriendo el juego por bandas para ganar la amplitud que le permitiera crear espacios en la defensa del combinado argentino. Las llegadas de Escocia se repetían una y otra vez por carril lateral buscando el centro al segundo palo, provocando uno de esos avances el 2-0.
Con esa desventaja, la selección argentina realizó su primer cambio con la entrada de Menéndez en lugar de Banini, refrescando así su línea de ataque. Sin embargo, faltando 20 minutos para terminar el encuentro, la selección de Escocia marcó su tercer tanto del partido partiendo de una recuperación de balón en una transición defensa- ataque, en un 3 contra 2 en ataque. En un saque de esquina, Escocia firmó el 3-0, un resultado que parecía imposible de levantar.
Pero la “Albiceleste” no bajó los brazos y empezó a generar más acciones de ataque, aprovechando el desequilibrio defensivo y los espacios en la defensa de la selección de Escocia. Menéndez, muy desequilibrante en los duelos 1 contra 1, logró el primer tanto para la selección sudamericana.
Argentina, todo o nada:
Aún con el marcador en contra, Argentina siguió generando opciones de gol y tuvo que lidiar con estar en inferioridad numérica en los contragolpes de Escocia. Pero Bonsegundo supo identificar en zona de finalización si debía rematar, conducir o pasar, lo cual le dio la oportunidad de anotar el segundo gol que las acercaba mucho más al empate del encuentro.
En la recta final, Escocia llegó en varias ocasiones a portería rival sin lograr definir y sentenciar el encuentro. Con un espíritu muy luchador demostrado en cancha, la colegiada, en una última acción revisada en el VAR, concedió a Argentina un tiro penal faltando 4 minutos para acabar el encuentro. Lo cobró Bonsegundo sin contar con suerte, pero nuevamente el VAR determinó que la arquera de Escocia se había adelantado, repitiéndose nuevamente la pena máxima. Esta vez, con un remate fuerte al centro del arco, marcó Bonsegundo para poner el 3 a 3, en un momento histórico para el combinado "Albiceleste".
"Necesito estar un poco más de tiempo con las jugadoras. Todas estamos destrozadas. Hicimos mucho en este partido, pero lamentablemente concedimos tres goles", señaló Shelley Kerr. La seleccionadora de Escocia analizó lo ocurrido en la recta final: "Obviamente estábamos muy cómodas con el 3-0, pero su primer gol cambió todo el contexto. No supimos manejar el final del partido".
"Tomemos conciencia de lo que es Escocia. Sabíamos que no iba a ser fácil más allá de ser un equipo debutante. A veces las cosas salen y otras no", señaló Carlos Borrello, quien dijo estar "conforme con la reacción del equipo. Cometimos dos errores que se transformaron en goles, y con los cambios pudimos darle otra dinámica y llegada. No nos alcanzó el tiempo. Queríamos ganarlo".
Redacción: Héctor García