La Liga, 1 de febrero 2019
Benzema (56)
Segundo derbi entre Real Madrid y Atlético en lo que llevamos de 2020. Y una vez más el partido fue muy igualado, con dos equipos que se conocen demasiado bien como para sorprender a su rival. Zinedine Zidane, como ya hiciera en la final de la Supercopa de España, volvió a apostar por juntar hasta cinco centrocampistas para intentar dominar el partido ante el Atlético de Madrid. Una apuesta que no cumplió su objetivo, teniendo los de Diego Pablo Simeone las mejores ocasiones en el primer tiempo, entre ellas un disparo al palo de Ángel Correa.
Varió el sistema el entrenador del Real Madrid en la segunda parte con la entrada de Vinícius y Lucas Vázquez en bandas. Precisamente una maniobra del brasileño por la izquierda dio origen al gol local, seguida por una asistencia de Ferland Mendy y el golpeo a la red de Karim Benzema
Seis años después, el Madrid volvió a ganar al Atlético en el Santiago Bernabéu en LaLiga (acumulaban los rojiblancos 3 derrotas y 3 empates desde 2012) para mantenerse en lo más alto de la clasificación con 3 puntos de distancia sobre el Barcelona (ganó 2-1 al Levante en casa) y ya 13 sobre el Atlético de Madrid, sexto en la tabla.
14 / 5
DISPAROS / A PUERTA
4 / 1
61 %
Posesión
39 %
692 / 609
Pases / Completados
388 / 307
18 / 2 / 0
Faltas / Amarilla / Roja
11 / 2 / 0
El Real Madrid se presentó en el césped del Santiago Bernabéu con 5 jugadores interiores como son Casemiro, Toni Kroos, Fede Valverde, Luka Modric e Isco y la ausencia de jugadores periféricos más allá de los laterales Ferland Mendy y Dani Carvajal.
Por su parte, el Atlético de Madrid no varió su esquema habitual de 4-4-2, pero con la notable ausencia de Joao Félix por lesión y la presencia de Vitolo en su lugar. Así, el debut del recién regresado Yannick Carrasco tuvo que esperar al segundo tiempo. En defensa, mientras, entró Sime Vrsaljko en el lateral derecho por las ausencias de Kieran Trippier y Santiago Arias.
Desestructurar al Atlético:
El conjunto de Zidane se estructuró con balón con el esperado 4-5-1 con Casemiro y Kroos algo más cerca de la defensa para iniciar la creación, Valverde ligeramente volcado en banda derecha e Isco con mayor libertad por toda la mitad izquierda del campo.
Intentó mover el balón con velocidad jugando con pocos contactos al balón y con gran movilidad por dentro de todos sus medios centros. A ellos se sumaban Benzema descolgándose desde el ataque y Carvajal entrando en zona interior cuando Valverde salía por fuera en el perfil derecho.
Mucho ritmo y mucho movimiento para desestructurar el entramado defensivo del Atlético de Madrid. Tanto es así que en alguna jugada del primer tiempo se pudo ver a Casemiro entrando por banda para poner centro y a Sergio Ramos ocupando la posición del "9" dentro del área.
En el 4-4-2 (arriba) el Atlético de Madrid fue Vitolo quien acompañó a Morata como delantero y Correa se metió en la línea de 4 en perfil derecho en el medio del campo. El internacional argentino estuvo cerca de Marcos Llorente y algo más alejado Thomas, al que escoltaba Saúl más escorado en la derecha.
Juego directo:
Los de Simeone trataron de intimidar iniciando en juego directo buscando un duelo ganador en la cabeza de un Morata (abajo) que estuvo muy activo desde el principio. Sin embargo, no encontró un escalonamiento correcto de sus medios centros que, estando muy largos, no llegaban a posiciones para disputar la segunda jugada. Situación que hizo que el Madrid recuperara de nuevo el balón e iniciara de nuevo el ataque posicional, lo que obligaba al equipo rojiblanco a recular en defensa de nuevo.
También tuvo argumentos combinativos el Atlético de Madrid que, encontrando espacios relativamente fácil en el bloque defensivo rival, a los 18 minutos gozó de una primera oportunidad. Fue en una apertura a banda de Morata hacia Versaljko, quien tras poner en área por abajo encontró un potente remate de Vitolo salvado por Thibaut Courtois bajo los palos.
Según avanzaba la primera mitad, las excesivas distancias de relación entre los medios centros del Madrid (abajo) fueron otorgando al Atlético de Madrid cierta comodidad en fase defensiva. En esas situaciones los rojiblancos establecían una gran defensiva en zona central, obligando al Madrid a jugar por fuera de su bloque, dificultando así la circulación y bajando el ritmo del partido.
Robar y correr:
Tras robo, el Atlético de Madrid buscaba el contragolpe que contrastaba con los lentos repliegues del Real Madrid, que permitían finalizar a los visitantes las transiciones rápidas sin darle excesiva velocidad a su juego. Perdonó el Atlético de Madrid en esas contras de la primera parte, donde pudo finalizar con tiros francos desde cerca de la portería rival. Lo que restaba de primera parte correspondió al Real Madrid, atascado por dentro y sin capacidad para sorprender con la amplitud de los laterales.
Y es que en estos últimos minutos de la primera mitad, el Atlético de Madrid, conocedor del objetivo del equipo blanco de hacer daño con centros laterales, se protegió bien para defenderse estableciendo las dos líneas de 4 dentro de su propia área (abajo). Los de Simeone mostraron orientaciones corporales trabajadas, aunque con algunos defectos normales, sobre todo, en jugadores de carácter más ofensivo.
Dos cambios en el segundo tiempo:
Zidane le dio la vuelta al sistema en el descanso quitando a Kroos e Isco, dos jugadores interiores, para meter a dos extremos como Vinícius por izquierda y Lucas Vázquez por derecha. El objetivo era aportar amplitud y generar espacios por dentro y por fuera, y desatascar un partido que se les estaba atragantando desde el primer cuarto de hora. Asimismo, Valverde y Modric se establecieron ya en una posición más centralizada como interiores y las distancias de relación entre los centrocampistas se redujeron (abajo).
Al ampliar la anchura del bloque ofensivo, y corregir las distancias de relación interiores, el Madrid consiguió hacer más largo al Atlético de Madrid en su faceta defensiva. De este modo, empezaron a aparecer las superioridades por dentro y los espacios, ya que había que preocuparse de dos jugadores periféricos en cada banda.
Crecer el papel de Valverde:
Ahí fue donde la figura de Valverde se erigió como protagonista en el centro del campo, realizando una segunda parte muy completa tanto en defensa como en ataque. Mientras tanto, el Atlético de Madrid siguió lanzando a sus laterales, sobre todo a Lodi (abajo) por banda izquierda, que habitualmente llegó a la altura de la defensa del Madrid para intentar coger algún balón al espacio que llegara de un cambio de orientación.
Pareció funcionarle el plan B al equipo blanco que, tras una recepción de Vinicius pegado a la banda, vio el desmarque de ruptura de Mendy poniéndole un balón en ventaja para poder centrar. Situación que aprovechó Benzema para entrar en carrera y abrir el marcador (abajo).
Con ventaja en el marcador, para el Real Madrid era el momento de cerrar la portería y tratar de ampliar la ventaja con algún contraataque o pausa el partido con posesiones largas. Esta temporada los de Zidane está demostrando saber hacer ambas cosas y cuando el Atlético se fue hacia arriba para intentar empatar, el Madrid supo replegar y ser solidario colocando su habitual 4-1-4-1 (abajo) cerca de su área para mitigar los ataques rivales.
Aun así, lo intentó Simeone en la recta final aportando chispa desde el banquillo con Carrasco y el canterano Camello, pero no fue suficiente para conseguir el empate en el Santiago Bernabéu.
"No estaba contento con la estaba viendo en el campo. Pero no por los jugadores, sino por mí. Fue mi responsabilidad. Cambié a Isco y a Kroos, pero podía haber cambiado a cualquier otro jugador. Buscaba más juego de banda y más presión arriba. Pero no fue culpa de los jugadores, sino mía", explicó Zidane sobre los cambios en el descanso. El entrenador del Real Madrid, por otro lado, destacó el trabajo defensivo de su equipo, con solo 13 goles en contra en LaLiga: " Lo que estamos haciendo es muy bueno. Cuando perdemos el balón cada uno está pensando en recuperarlo rápidamente".
"Hicimos un buen partido. El primer tiempo fue muy bueno, tuvimos ocasiones y no lo aprovechamos. En el segundo tiempo ellos arrancaron bien, hicieron una bonita jugada en el gol y al final empujamos pero no pudimos empatar. Ahora a seguir trabajando y pensar en el partido siguiente", señaló Diego Pablo Simeone. El entrenador del Atlético, de cara al futuro, añadió que se queda "con la sensación de que pudimos encontrar el empate. El camino es el de la primera mitad". Simeone, por otro lado, no quiso valorar el posible penalti de Casemiro sobre Morata en el primer tiempo: "No vi la ocasión del penalti, para eso está el VAR".