Análisis táctico: Valencia 2 Barcelona 0

El Valencia certificó la primera derrota de Quique Setién como entrenador del Barcelona. Los locales mostraron una de sus mejores versiones de la temporada, con un gran trabajo defensivo para frenar el juego combinativo de su rival y siendo letales en el contragolpe.

Un importante triunfo para los de Albert Celades después de la dolorosa derrota 3-1 ante el Real Madrid en las semifinales de la Supercopa de España y el 4-1 en contra ante el Mallorca en la última jornada.

Y fue el jugador uruguayo Maxi Gómez quien capitalizó las acciones más destacadas de su equipo. Erró una pena máxima en el arranque del partido, adivinando Marc André-Ter Stegen la dirección del golpeo. Sin embargo, ese traspié no tuvo impacto en su rendimiento. En el segundo tiempo fue el autor del disparo que Jordi Alba desvió a la red y marcó el 2-0 en un perfecto contragolpe para certificar la victoria "che".

El Barcelona, por su parte, sigue sin encontrar una versión regular fuera del Camp Nou esta temporada. Suma solo 4 partidos ganados de 11 como visitante y 15 puntos de 33 posibles. La derrota también deja consecuencias en la clasificación, perdiendo los azulgrana (43 puntos) el liderato a manos del Real Madrid, que ganó en su visita al Valladolid (0-1) y suma 46 puntos.

 

El Valencia se presentó con bajas importantes en su once inicial ante el Barcelona. Con Dani Parejo sancionado por doble amonestación en el último partido de LaLiga ante el Mallorca y Rodrigo en el banquillo, Geoffrey Kondogbia entró en el centro del campo junto a Francis Coquelin, mientras Kevin Gameiro y Maxi Gómez formaron la pareja atacante.

El conjunto entrenado por Celades no varió su habitual 4-4-2 (abajo) con Carlos Soler y Ferran Torres en los costados acompañando a Coquelin y Kondogbia, siendo Daniel Wass ubicado en la posición de lateral derecho.

El Barcelona, por su parte, cambió sus dos interiores respecto a los que actuaron en la victoria ante el Granada: Arthur Melo y Frankie De Jong en lugar de Arturo Vidal e Ivan Rakitic. 

Continuó con el 3-5-2 (abajo) que lleva practicando Quique Setién desde su reciente llegada, con Ansu Fati y Jordi Alba como carrileros. De este modo, Sergi Roberto, Piqué y Umtiti fueron los elegidos para circular el balón en fase de inicio para superar la primera línea de presión rival.

Debilidad defensiva en el perfil derecho:

Un sistema donde, sin embargo, el Barcelona encontró dificultades para el balance defensivo en el perfil derecho, sin las ayudas necesarias por parte de Ansu Fati a Sergi Roberto ante los contragolpes del Valencia, que incidió especialmente en ese perfil durante todo el partido -por ahí llegaron la jugada del penalti en el prime tiempo y el 2-0 de Maxi-.

En fase ofensiva, el Barcelona trató de llevar la iniciativa desde el principio con circulación rápida de balón en fase de inicio. En frente tuvo a un Valencia que trató de presionar alto en salida en los primeros compases del partido, para luego replegar si el Barcelona superaba esa primera presión.

Sumar posesión:

A diferencia de los partidos anteriores de Setién, el Barcelona le dio amplitud a la salida del balón con los 3 centrales para tener más recorrido del balón y guardando unas distancias de relación entre ellos más proporcionadas. Eso le otorgaba tiempo y espacio para circular y evitar la presión del rival.

Con el objetivo de atraer rivales para generar espacios, el Barcelona alcanzó grandes picos de posesión en campo propio y rival, mientras el Valencia esperaba replegado su oportunidad de robar y salir al contraataque. Un escenario donde saben que son poderosos, aprovechando los espacios que pudieran aparecer a las espaldas de unos centrales del Barcelona totalmente desplegados. Por su parte, el equipo azulgrana trató de realizar una presión tras pérdida que no fue efectiva prácticamente en ninguna fase del partido.

Sin referencia arriba:

En el primer contraataque del Valencia, tras robo en el centro del campo ,el balón acabó en el lado opuesto en los pies de José Luis Gayà, quien ya dentro del área y tras recorte a varios defensores, acabó recibiendo falta de Gerard Piqué. Marc-André Ter Stegen se encargó de parar ese penalti  a Maxi Gómez, quedando solo como aviso de lo que el Valencia les tenía preparado.

La posición de Leo Messi y Antoine Griezmann como delanteros -el primero ofreciéndose por dentro, y el segundo cayendo a banda- liberaban de trabajo a la defensa valencianista (arriba). Los de Setién notaron la ausencia de un delantero centro capaz de intimidar como lo hace Luis Suárez, quien está siendo una ausencia muy difícil de suplir en el Barcelona.

Otro de los cambios que se pudo ver respecto a partidos anteriores en el equipo de Setién fue la estructura del bloque defensivo, que se situó en un 4-1-4-1 (abajo) dejando a Jordi Alba y Sergi Roberto de laterales. Más arriba una línea de 4 con Ansu Fati, los dos interiores y Griezmann por delante de Sergio Busquets, con Messi solo en punta liberado de trabajo, sin una función relevante a la hora de ejercer la presión.

Se observó en el Barcelona la importancia de estar orientado corporalmente (abajo) para jugar siempre de cara, con la norma de evitar giros con balón para jugar de una manera rápida y eficaz.

Insistir en el juego directo:

El Valencia, en fase ofensiva, tenía varios patrones recurrentes y claros. En especial juego directo (abajo) en fase de inicio buscando los duelos ganadores en disputas aéreas para ganar segunda jugadas y llegar rápido a portería contraria por el lado opuesto al del inicio.

De este modo, los de Celades se encontraban ante un rival descolocado en fase defensiva. Así generaron los locales las principales jugadas de ataque, como la que Ter Stegen paró de nuevo a Maxi Gómez, desviando el balón al larguero para evitar el gol.

Con el paso de los minutos en la primera parte el Valencia se estiró más y decidió asumir ciertos riesgos, viendo que el Barcelona se encontraba dubitativo en fase defensiva. Los locales dieron dieron un paso al frente y adelantaron la presión. Eso llevó también a ver un equipo algo más largo, pero sin perder el orden defensivo y aunque sí permitiendo más espacios a la espalda.

Fue entonces cuando Soler (abajo) empezó a tomar protagonismo y a hacer daño con balón, encontrando el espacio donde aparecer y recibir sin oposición rival, obligando a repliegues rápidos del equipo de Setién.

La segunda parte comenzó con el sello del Valencia en forma de gol, percutiendo en el estilo que había mantenido. Juego directo de Wass sobre Maxi, quien prolongó hacia Gameiro para acabar la jugada en banda contraria con Gayà poniendo un centro. Ahí apareció Maxi para realizar un disparo que Jordi Aba desvió dentro de la portería del Barcelona.

De nuevo debilidad en el perfil derecho:

El Barcelona trató de empatar entrando casi siempre por el centro, donde el Valencia se encontró defendiendo bastante cómodo dada la acumulación de jugadores y el buen trabajo defensivo colectivo.

Con el Barcelona, volcado y muy pendiente de la fase ofensiva, el Valencia hizo el 2-0 en juego directo atacando de nuevo el perfil derecho del Barcelona, otra vez sin balance defensivo necesario a la espalda de Sergi Roberto en esa zona. Rodrigo sacó rápido de banda y después de un buen movimiento de arrastre de Soler (arriba) por dentro apareció Maxi para hacer el gol definitivo.

"Salimos reforzados como grupo y como equipo de este partido. Hemos hecho un partido muy bueno, hay que poner en valor el rival que teníamos delante, pudimos irnos al descanso con ventaja. Ese sometimiento al que a veces te lleva el Barça es complicado", analizó Celades respecto al partido. El entrenador del Valencia también valoró la actuación de su goleador: "Maxi Gómez es un jugador con mucha calidad, como otros uruguayos tiene mucho carácter, hoy se reveló tras fallar el penalti y estamos muy contentos con su rendimiento".



"La primera parte hemos estado francamente mal. No nos hemos colocado bien y no hemos tenido la pausa necesaria. Hemos facilitado la labor del rival. Hay cosas que no hemos entendido. Quizá no las hemos explicado bien", señaló Quique Setién. El técnico del Barcelona incidió en la falta de comprensión de sus jugadores: “Una cosa es entenderlo en la pizarra y otra en el campo. El Valencia ha estado muy bien defensivamente, pero también les hemos ayudado con nuestra posición. Posicionalmente hay cosas a corregir".