Partido de ida octavos de final de la Liga de Campeones de la UEFA, 25 de febrero 2020
Serge Gnabry (51, 54)
Lewandowski (76)
Bayern de Múnich y Chelsea han tejido una gran rivalidad en los últimos años en la Champions League. Con duelos tremendamente igualados, como la final de la Champions League de 2011, con victoria final para los Blues en la tanda de penaltis. Sin embargo, esta vez fue muy diferente. Y es que salvo sorpresa mayúscula en el partido de vuelta en el Allianz Arena, el Bayern será uno de los cuartofinalistas de la presente edición de la Champions League.
Los alemanes apenas necesitaron tres minutos, desde el 51 al 54, para dejar perfilada la eliminatoria con los dos goles de Serge Gnabry. Para entonces, el dominio del equipo alemán sobre el Chelsea ya era incontestable.
Lejos de poder recortar distancias en el marcador, los locales intentaron evitar que el resultado fuera más doloroso. Aun así, Robert Lewandowski tuvo tiempo para hacer el tercer gol, su tanto número 38 de la temporada. Lo hizo con una asistencia de Alphonso Davies, jugador que a pesar de sus solo 19 años ya es una de las grandes sensaciones de este Bayern.
9 / 5
DISPAROS / A PUERTA
16 / 7
35 %
Posesión
65 %
420 / 336
Pases / Completados
721 / 649
7 / 1 / 1
Faltas / Amarilla / Roja
10 / 2 / 0
El Chelsea, jugando en fase ofensivo en 3-4-3, atacó el bloque defensivo del Bayern utilizando las bandas para crear juego, ya que el equipo alemán cerró cualquier acceso por dentro de la pareja de centrocampistas y extremos locales.
Las acciones por banda tenían la intención de encontrar a Olivier Giroud a través de los centros al área. El delantero francés también fue utilizado como referencia en el juego directo, opción que los locales utilizaron para salvar la presión alta del equipo alemán, con Mason Mount y Ross Barkley bien posicionados en los canales interiores para intentar ganar la segunda jugada.
La posición defensiva tan compacta de los tres centrocampistas del Bayern facilitó las opciones en banda para Reece James y Marcos Alonso, encontrados en fase ofensiva través de los cambios de juego (abajo), que tenían como intención después el centro al área. Opciones que el Bayern supo gestionar perfectamente.
El Bayern, en fase de posesión, tuvo como objetivo superar el 5-2-3 defensivo (abajo) del equipo de Frank Lampard, que tuvo problemas en los momentos que Jorginho saltaba a la presión sobre Thiago, situación que dejaba libre el espacio por dentro.
Diferentes opciones de ataque para el Bayern:
En esos momentos, el movimiento de uno de los delanteros a esa zona central o la diagonal por dentro de los extremos ayudaron al Bayern a dominar el juego sobre Kovacic, único pivote en del Chelsea en medio campo.
El Bayern también utilizó el juego directo (abajo) sobre el bloque medio del Chelsea cuando el partido lo demandaba, desplazándose también los delanteros a medio campo para recibir. Esto, sumado a las carreras en profundidad de sus extremos, llevó a los visitantes a tener diferentes perfiles de ataque ante la línea defensiva de 5 del Chelsea.
Sin hacer daño en el juego por bandas, los locales buscaron las opciones de contragolpe, donde, sin embargo, tampoco pudieron generar problemas después de recuperación. La línea defensiva de 3 del Bayern (abajo), con Thiago de pivote y los laterales muy juntos hizo que los visitantes defendieran por momentos con hasta 6 jugadores, cerrando cualquier segunda jugada para Giroud.
3 contra 6 en los contragolpes:
De este modo, el Chelsea siempre se vio en desventaja en las acciones de ataque, condicionado esto especialmente por la situación de sus carrileros, que tuvieron que mantener una posición más retrasada ante la amenaza de los extremos del Bayern. Así, lo que pretendía ser un 5 contra 6 en ataque, terminó siendo un 3 contra 6.
Las opciones del equipo de Lampard pasaron solo por intentar aprovechar los errores del Bayern en la salida de balón, pero sin capacidad suficiente como para encontrar el gol en uno de esos errores.
El segundo tiempo, Jorginho se movió hacia el canal derecho interior, dejando a Kovacic como único pivote y ayudándolo esporádicamente en fase defensiva. En juego directo, Jorginho recibió a la espalda de los tres centrocampistas del Bayern para alejarse de la congestión central, manteniendo a sus tres atacantes en los espacios de la línea defensiva del Bayern.
Por otro lado, el Chelsea también se las arregló para construir juego sobre la presión alta del Bayern cuando los laterales del equipo alemán saltaron a los carrileros locales (abajo). Esto provocó un amplio espacio para hacerle llegar el balón a Mount y Barkley, arrastrando a uno de los centrales del Bayern de su posición para defender en banda. Pero incluso aquí el Chelsea tampoco encontró opciones de gol ante Neuer.
Rol defensivo de Kimmich:
Un cambio del Bayern a la hora de presionar detuvo esos balones directos de Jorginho en posiciones avanzadas. Pasó a defender en un 4-1-4-1, con Joshua Kimmich por pivote para equilibrar el medio del campo con la defensa. Cuando iban a la presión alta, Robert Lewandowski, Serge Gnabry y Kingsley Coman buscaron presionar a los tres centrales, situación que impulsó a Thiago a saltar su línea y unirse a Thomas Müller en la presión sobre los dos centrocampistas centrales del Chelsea, permaneciendo Kimmich más retrasado.
Cuando defendía en bloque medio, las distancias entre los tres centrocampistas se estrechaban, bloqueando cualquier acceso por dentro para jugar al pie con Barkley, Mount y Giroud.
En fase de inicio de juego, Kimmich buscó construir juego entre los centrales (abajo), con Thiago moviéndose entre líneas o a la espalda de los tres atacantes del Chelsea, intercambiando ambos jugadores sus roles ocasionalmente. Además, los laterales proporcionaron opciones de pase, habitualmente cuando la primera línea de presión del Chelsea se estrechaba por dentro.
Asociaciones con Müller y Lewandowski:
El bloque bajo del Chelsea benefició los movimientos de Müller, especialmente cuando los carrileros del equipo inglés se iban arriba. Entonces Müller se desplazaba en corto, habitualmente sin marca, para conectar con los centrocampistas centrales, y Lewandowski adelantaba su posición. Las penetraciones de los extremos entre los laterales y los centrales del Chelsea mantuvieron retrasada la defensa de cinco de los locales.
En las transiciones ofensivas, el Bayern optó por el juego directo con sus extremos, buscando explotar los espacios en los canales interiores cuando los carrileros del Chelsea iban arriba en las fases de ataque.
En esas situaciones, Lewandowski se movió alrededor del bloque medio en defensa del Chelsea, con Müller ofreciéndose para combinar y los extremos atacando la espalda de los carrileros locales. Cuando ganaba el balón en posiciones adelantadas, Müller se asociaba con Lewandowski o los extremos, libres de marca, para generar opciones de gol.
Más pegada y más protección:
La finalización del Bayern mejoró en el segundo acto, con dos goles de Serge Gnabry en un corto espacio de tiempo. Las combinaciones por dentro nuevamente demostraron la fortaleza del Bayern, capaz de mover rápidamente el balón a la espalda de los dos centrocampistas del Chelsea.
A pesar de la ventaja, el Bayern concedió algunas opciones de ataque a su rival en el segundo período, con un juego más amplio del Chelsea, especialmente cuando los laterales Davies y Pavard presionaron mucho más a los carrileros locales.
Ahí, el equipo local llevó a sus atacantes a jugar más por fuera, lo que forzó al Bayern a abrirse, creando así más espacio para los centros al área. Respondió el Bayern cambiando su presión alta a una nueva estructura. Müller y Lewandowski formando un dúo (abajo), apoyado por 3 jugadores en medio campo y un pivote, pasando a una formación 4-1-3-2 para detener el juego central del Chelsea.
Imparable:
En el transcurso del segundo tiempo, el Bayern encontró opciones ofensivas a través de sus laterales. Pavard y Davies, tomand Kimmich y Thiago posiciones en medio campo para jugar con un doble pivote defensivo protegiendo así a su zaga en cualquier transición defensiva (abajo).
Los extremos combinaron una vez con Lewandowski para vincularse después los laterales que corrían hacia adelante. Davies, imparable en su arrancadas, avanzó a los metros finales para buscar a Lewandowski, quien finalizó con el definitivo 0-3.
"Queremos jugar bien aquí, lo hemos demostrado toda la temporada, pero en este partido nos alejamos de eso. Fue una dura lección y una realidad para los jugadores de los niveles a los que queremos llegar", señaló Frank Lampard. "La certera puntería con la que lo finalizaron ellos sus acciones de ataque mostró que un equipo de su calidad marcará goles si les da oportunidades", añadió el entrenador del Chelsea.
"Queremos llegar a los cuartos de final. Luego veremos qué sucede, vamos paso a paso", señaló Dieter Flick. El entrenador del Bayern también se refirió al papel que desarrolló Müller: "El fútbol es un deporte de equipo. Hizo lo que necesitábamos. Utilizó bien el espacio e hizo las cosas difíciles para nuestros oponentes". Asimismo, destacó "la capacidad goleadora que tiene Lewandowski en los partidos de eliminatorias. No hay duda de eso".