Análisis estadístico: Timo Werner

El Perfil:

Máximo goleador y uno de los grandes referentes del brillante y ascendente RB Leipzig de Julian Nagelsmann, Timo Werner ha sido asociado a equipos de la talla del Bayern de Múnich, Liverpool, Manchester United o Real Madrid. No obstante, su salida, de producirse, sería solo con un alto traspaso, ya que su valor de mercado se sitúa actualmente en 64 millones de euros (datos de Transfermarkt).

Werner está en su cuarta temporada en el Leipzig, siendo la 2019/20 la más productiva hasta la fecha. En las cinco principales ligas europeas, sólo Ciro Immobile (Lazio) y Robert Lewandowski (Bayern de Múnich), ambos con 27 goles, han marcado más que el delantero alemán (24).

Más allá de su producción de cara a puerta, también ha mejorado en diferentes facetas de su juego, especialmente la capacidad de asociación, la cual incluye también un cambio de rol. "Lo hemos situado un poco más atrás", ha señalado el entrenador del Leipzig, Nagelsmann. “No lo queremos en la última línea, porque necesita un poco de ventaja, un poco de tiempo para mostrar realmente su velocidad en el campo. Está participando más en el juego que en años anteriores, y esta nueva posición ha hecho que su desarrollo sea bueno, jugando entre líneas contra equipos que se sitúan en bloque bajo. Pero aún necesita desarrollar más eso, si quiere ser uno de los mejores del mundo".

Análisis táctico:

La principal amenaza de Werner está en su capacidad goleadora: ha marcado 85 goles en 141 partidos entre Bundesliga y competiciones europeas desde que se mudó al RB Leipzig desde el Stuttgart en el verano de 2016 en un traspaso de 10 millones de euros. Al margen de Cristiano Ronaldo y Leo Messi, son pocos los jugadores que alcanzan la regularidad de Werner de cara a puerta: un gol cada 1,6 partidos durante cuatro temporadas en el máximo nivel.

Werner es uno de los jugadores más rápidos de la Bundesliga, atacando principalmente el lado débil de su defensor. Llegó a alcanzar una velocidad de 35 km/h en la temporada 2018/19, por lo que quizás era inevitable que los defensas rivales prefirieran ir atrás y reducir los espacios a su espalda ante la amenaza del delantero alemán. En esa campaña, sin embargo, su enfoque era demasiado unidimensional, buscando principalmente atacar la espalda de los defensas rivales con los espacios muy limitados, lo que obligaba a los compañeros a realizar pases apresurados o demasiado ambiciosos que rara vez alcanzaban su objetivo.

Como Nagelsmann señaló, Werner tuvo que desarrollar otras habilidades para participar más en el juego de asociación. Ahora se siente mucho más cómodo retrasando su posición para recoger el balón entre las líneas y crear para los demás, con los laterales en la formación 3-4-3 en la que Nagelsmann ha establecido al equipo, generalmente con Angeliño, ex jugador del Manchester City, y Nordi Mukiele o Christopher Nkunku moviéndose más hacia arriba para unirse al ataque (abajo). Esta es una progresión natural para Werner, un delantero que ya se siente cómodo cuando recibe a los pies y es capaz de retener el balón con eficacia. Sin embargo, casi nunca gana -y rara vez incluso lo intenta- los duelos aéreos, con solo el 24% de acierto por partido en estas acciones.

En cambio, Werner conoce sus puntos fuertes y los potencia. Su principal objetivo es situarse en posiciones de peligro frente a la portería, algo que hace con gran eficacia, como lo demuestra que sólo siete jugadores de las cinco principales ligas europeas han realizado más disparos en la temporada 2019/20. La combinación de su velocidad y sus movimientos inteligentes puede ser devastadora, y además es un finalizador eficiente. Sus "expectativas de gol” para esta temporada en la Bundesliga, según la web Understat, era de 20,5 goles, una cifra que ya supera en 3,5 con 24 tantos hasta la fecha. A modo de comparación, Lewandowski ha superado a sus expectativas por sólo 1,5.

Volviendo a su nuevo rol, ahora es más difícil seguir su marca, ya que los defensores son puestos a prueba constantemente para saber si deben seguirlo a posiciones más retrasadas o saltar a un mediocampista. Werner siempre está en movimiento, lo que es útil tanto para crear espacio para los demás como para liberarse de sus marcadores. Le gusta moverse por el perfil derecho y ha desarrollado la capacidad para trazar carreras desde la segunda línea hacia el área rival y llegar al segundo palo, pasando a menudo desapercibido hasta que es demasiado tarde para que un defensa reaccione.

Rol en el RB Leipzig:

Con las defensas contrarias jugando en un bloque bajo, Werner tiene menos oportunidades de atacar a la espalda, pero Nagelsmann tiene ahora a su principal goleador actuando con más libertad, con claras instrucciones de ir a buscar el balón. Su movimiento también crea espacios para que jugadores de banda como Marcel Sabitzer, Angeliño y Nkunku puedan situarse por detrás.

Werner ahora se encuentra más cómodo a la hora de recibir el balón entre las líneas bajo presión, antes de mirar, girar o dar un pase a la vuelta para un jugador de banda. En el partido contra el Mainz (arriba), se desplazó en corto para recibir un pase y jugar de primeras en banda derecha con Yussuf Poulsen, quien llegó hasta el área para asistir a Marcel Halstenberg.

Esa es una característica común del juego del Leipzig bajo la dirección de Nagelsmann, con los atacantes haciendo carreras en direcciones opuestas para dividir a los defensores y creando un agujero en la parte trasera. A menudo Werner no es seguido en posiciones más retrasadas entre las líneas y, por lo tanto, tiene la oportunidad de girar y encarar de cara a la portería rival, con los mediocampistas o los laterales que se unen al ataque para garantizar la presencia de suficientes unidades ofensivas en el último tercio de campo.

También ha jugado en la banda izquierda algunos partidos esta temporada, con Nagelsmann buscando otras fórmulas de llevar a su referente a atacar los espacios. Donde antes Werner se sentía atraído hacia el balón y con demasiada frecuencia hacía la misma carrera que su compañero de ataque, ahora es más inteligente para mantener su posición y esperar a que el balón le llegue (abajo), una ventaja que le ayuda a jugar por banda.

Una vez que tiene el balón, Werner ataca el perfil débil del lateral derecho rival para buscar el disparo con pierna derecha, su pie dominante. Así suma 25 tantos de su 31 goles en Bundesliga y Champions League.

Pero cuando los oponentes empujan hacia adelante y dejan espacio atrás, Werner sigue siendo letal. Ningún jugador de las cinco mejores ligas de Europa ha marcado más de los 4 goles de Werner al contragolpe en la 2019/20. Así, e independientemente de las mejoras en otras partes de su juego, sigue siendo temible con espacios para protagonizar carreras donde el delantero del Leipzig muestra su mayor potencial ofensivo.

Redacción: Héctor García