Champions League 2020/2021 Grupo B, 27 de octubre 2020
Thuram (35,58)
Benzema (87)
Casemiro (90+3)
Emocionante partido de Champions League el que protagonizaron Borussia Mönchengladbach y Real Madrid en el Borussia-Park. Un choque que comenzó dominando el equipo de Zinedine Zidane, reactivado después de su victoria en el Clásico ante el Barcelona. Sin embargo, los primeros goles cayeron del lado alemán. Marcus Thuram, en dos rápidas acciones ofensivas, puso los dos tantos a favor del Mönchengladbach.
Un resultado que dejaba al Real Madrid al borde del abismo en la fase de grupos de Champions League cuando apenas se estaba disputando la segunda jornada. Ante este peligroso escenario, Zidane afrontó la recta final con la entrada al campo de Luka Modric y Eden Hazard, quien volvía a jugar después de 80 días de baja por lesión. Ambos futbolistas, más la posición de Sergio Ramos como delantero, dieron vida al equipo, logrando el empate el Real Madrid en los últimos minutos con un gol de Karim Benzema y el tanto final de Casemiro.
9 / 6
DISPAROS / A PUERTA
18 / 8
35 %
Posesión
65 %
435 / 362
Pases / Completados
812 / 731
19 / 3 / 0
Faltas / Amarilla / Roja
7 / 1 / 0
El Borussia Mönchengladbach optó por una estructura 4-2-3-1 (abajo), diferente a las variantes del 4-3-3 o 3-5-2 que en ocasiones utiliza en la Bundesliga. La línea defensiva de cuatro jugadores la formaron Stefan Lainer y Ramy Bansebaini en los laterales -derecha e izquierda, respectivamente-, y los centrales Matthias Ginter y Nico Elvedi. En el centro del campo jugaron Christoph Kramer y Florian Neuhaus en el doble pivote, con una línea de tres por detrás del delantero compuesta por Lars Stindl, Marcus Thuram y Jonas Hofmann. Alassane Pléa jugó en una posición más avanzada como referencia ofensiva.
El Real Madrid planteó el partido organizado en su habitual 4-3-3 (abajo), formando una línea defensiva con Lucas Vázquez de lateral derecho. Un jugador no específico para esa posición, pero con experiencia previa para sustituir las bajas del equipo blanco en esa posición. Acompañaron a Vázquez en la zaga Sergio Ramos y Raphaël Varane como centrales y en el lateral izquierdo Ferland Mendy. En el centro del campo Casemiro jugó de pivote defensivo, como vértice del triángulo del centro del campo junto a Toni Kroos, primera referencia de pase de los centrales, y Fede Valverde, quien se encargaba de conectar la fase ofensiva y la defensiva. Karim Benzema, por su parte, jugó como unidad más adelantada.
Ritmo de juego del Real Madrid:
Al inicio del partido, el equipo de Zidane impuso un ritmo de juego alto en las circulaciones de balón, tratando de movilizar al equipo rival desde los primeros pases del portero, Thibaut Courtois. La presión del Mönchengladbach fue lanzada inicialmente por los tres jugadores avanzados, con el delantero Pléa, más los extremos Thuram y Hofmann. Una situación que dificultaba la salida de balón del Real Madrid, que intentó desde el inicio del choque superar esa presión alta que se presumía iba a plantear el equipo alemán.
En esa fase de juego inicial del equipo de Zidane, adquiere vital importancia el papel de Kroos, quien se convierte en referencia a buscar por los centrales y laterales para encontrarle mediante el pase y poder avanzar desde él. Así, el mecanismo que utilizaba el Real Madrid ante el Mönchengladbach se basaba en el movimiento del jugador alemán desplazándose desde posiciones intermedias en el centro del campo a la posición lateralizada entre central y lateral (abajo).
Esa conducta de Kroos permitía activar dos circunstancias en el juego del Real Madrid. La primera, y más importante, alejarse de la zona del campo con mayor densidad de jugadores, consiguiendo así tiempo y espacio para recibir el balón. La segunda acción consistía en habilitar la intervención del lateral Mendy en zonas intermedias -libre de marca- después de realizar un movimiento de fuera-dentro.
El Mönchengladbach, para neutralizar el alto ritmo de juego de su rival y poder recuperar el balón, tenía la intención de orientar la presión hacia los laterales rivales en bandas. El objetivo de esto era llevar el juego hacia fuera, y ahí reducir el espacio y poder disponer del balón.
Cuando Ramos y Varane tenían el balón, Pléa saltaba a la presión sobre el poseedor del balón. No con la intención directa de recuperar, porque existía una inferioridad numérica de uno contra dos, sino indirectamente generando un contexto más favorable para su equipo, orientando el juego hacia zonas con menos espacios. En este momento Thuram y Hofmann saltaban sobre los laterales del Real Madrid, acciones donde sí que existía la posibilidad real de ganar el duelo individual lateral contra extremo (abajo).
Si uno de los extremos o jugadores avanzados recuperaba el balón, el Mönchengladbach intentaba progresar en el juego de manera vertical, acciones donde buscaba la portería contraria amenazando los espacios a la espalda de los laterales y centrales del Real Madrid con carreras de los extremos y delanteros. Pléa más cerca del balón, mientras Thuram y Hofmann (abajo) por el sector del juego.
Riesgos controlados del Mönchengladbach:
En inicio del juego, el equipo de Marco Rose, por concepto, asumió ciertos riesgos de manera más o menos controlada en su objetivo de construir ventajas en el espacio. Para ello, disponía a sus jugadores en los saques de portería de tal forma que siempre un jugador con balón tenía varias líneas de pase abiertas, pudiendo elegir en función de los movimientos de la presión del Real Madrid.
El portero Yann Sommer tenía a los centrales como primeras opciones de pase, más los medios centros, Kramer y Neuhaus, ofreciéndose como alternativas por dentro. De este modo, si Vinícius saltaba a la presión sobre el guardameta, el central quedaba libre. Asimismo, y en el caso de que el jugador brasileño saltara a la presión sobre el central, el portero podía conducir para provocar el siguiente movimiento de presión de Benzema, liberando así a uno de los dos medios centros.
Como alternativa ante la imposibilidad de conectar el portero con los centrales o medios centros, los laterales del Mönchengladbach se posicionaban a mayor altura, pero relativamente bajos para poder jugar directamente con ellos (abajo). Unas situaciones en las que no se exponía demasiado ante una posible pérdida de balón, permitiendo al equipo estar protegido y tener cerca a sus unidades para recuperar y no ser superados.
Del sentimiento colectivo al desarrollo individual:
Con el transcurso del partido, la dinámica del partido cambiaba, virando a un juego más imprevisible. Eso se tradujo en menos control por parte del Real Madrid, donde pasó de tener menos comportamientos colectivos y más propuesta individual. Así, ante la necesidad de incrementar la capacidad competitiva con un resultado en contra, el juego comenzó a ser más directo y con una estructura de juego menos reconocible.
La alternativa más repetida fue la amenaza de los espacios de los jugadores más avanzados, Vínicius, Asensio y Benzema, donde uno de los tres realizaba desmarques de aproximación y los otros dos desmarques de ruptura al espacio. Un comportamiento que buscaba hacer circular el balón de lado a lado para movilizar a su rival y provocar basculaciones muy pronunciadas, ya que tras los desajustes generados por la circulación de balón se pierden referencias en las marcas y aparecen las ventajas.
Una de esas ventajas la aprovechaba Benzema tras pase de Lucas Vázquez (abajo). Asimismo, para que ese espacio en profundidad se produzca, se debe generar amplitud, facilitado en este caso por el posicionamiento de Asensio, quien fijaba por fuera en la banda derecha, y Valverde, actuando por dentro. Ambos evitaban así que los medios rivales saltaran a la presión del poseedor, favoreciendo el timing adecuado para el pase desde zonas intermedias.
Mayor posesión local y atacar los espacios:
Ante la falta de control del juego del Real Madrid en el segundo tiempo, el Mönchengladbach percibía la posibilidad de adquirir mayor volumen de tiempo de posesión de balón y poder crecer desde ese parámetro. No obstante, y a pesar de manejar más tiempo el balón que en la primera parte, las oportunidades locales más destacadas siguieron llegando a través del contragolpe.
Unas acciones donde el equipo alemán atacaba los espacios tras un despliegue ofensivo rápido y más activo que el repliegue del Real Madrid. Así llegó el 2-0. Después de un saque de banda a favor del equipo alemán, y tras circular el balón de un lado a otro mediante conducciones verticales, Thuram se plantó en inferioridad numérica con balón en último tercio de campo, contra una defensa de 1+3 del Real Madrid -Varane de primera oposición y Ramos, Vázquez y Mendy por detrás-.
Pero con líneas de pase por fuera (Lainer por la derecha, por la izquierda Pléa y por el centro Hofmann fijando los centrales), el Mönchengladbach pudo seguir progresando. De este modo, lo que inicialmente era una situación de inferioridad de uno contra tres, acabó en una superioridad cuatro contra tres a favor del equipo local (abajo).
En ambos equipos las variantes defensivas fueron menos flexibles, mientras que las situaciones de ataque, con la entrada al campo de jugadores más ofensivos, pasaron a ser más perceptibles.
"Felicitaciones a mi equipo. Hicimos un partido increíble. Podríamos haber dejado el triunfo atado mucho antes, pero no fue así. No marcamos el tercer gol como sí hizo el Shakhtar (ante el Real Madrid en la primera jornada). Sin embargo, estoy orgulloso de lo que hicimos y enseñamos", explicó Rose. "En ambos partidos nosotros hemos demostrado de lo que somos capaces. No estamos aquí solo para participar. Estamos aquí para competir por resultados", añadió el entrenador del Mönchengladbach.
"Con 2-0 en la Champions es muy difícil dar la vuelta al partido y lo hemos hecho, por eso estoy tranquilo. Sobre todo lo que hay que sacar es nuestra disciplina y jugando así seguro que vamos a conseguir cosas importantes", sentenció Zidane. Sobre la vuelta de Hazard, el entrenador del Real Madrid señaló: "lo que tenemos que hacer con Eden es darle minutos poco a poco. No sé cómo exactamente porque jugamos cada tres días, y veremos cómo lo vamos a hacer".