Análisis Táctico: RB Leipzig 2 Atlético de Madrid 1

Apenas 11 años después de su fundación, el RB Leipzig  ha conseguido meterse en semifinales de la Champions League. Lo hizo a expensas de un Atletico de Madrid que, en principio, lucía como favorito para seguir adelante en una competición que nunca ha podido ganar.

Después de una primera mitad en la que el conjunto alemán exhibió un buen juego combinativo - sin poder concretar - los de Julian Nagelsmann se pusieron al frente con un cabezazo del atacante español Dani Olmo, tras una buena acción colectiva y asistencia de Marcel Sabitzer,

Posteriormente, el ingreso de João Félix  revivió las esperanzas del conjunto de Simeone. El talentoso jugador portugués de 20 años protagonizó una escapada que terminó con Lukas Klostermann derribándolo en el área. El propio Félix se encargó de cobrar impecablemente la pena máxima para igualar el encuentro.

El equipo de Diego Pablo Simeone, que buscaba su tercera final en la competición en los últimos seis años, no aprovechó el impulso y su característico planteamiento defensivo terminó siendo castigado cuando, a dos minutos del final del tiempo reglamentario, el disparo de Tyler Adams fue desviado, sin dejar ninguna oportunidad a Jan Oblak para reaccionar.

Ahora el equipo de Nagelsmann se las verá con el PSG en semifinales.

 



Julian Naglesmann estructuró al Leipzig en un 3-3-3-1 en posesión, pasando a una línea de cuatro en defensa (abajo). Marcel Sabitzer, Dani Olmo y Christopher Nkunku conformaron el trío atacante, mientras que Konrad Laimer y Angeliño proporcionaron amplitud a la ofensiva. El Leipzig chocó contra un Atlético que salió a defender en un 4-4-2, principalmente usando una estrategia de bloque medio.



Con frecuencia el Leipzig tenía una superioridad de 3 contra 2 en la primera línea de su salida, con su único pivote, Kevin Kampl, colocándose más atrás que Laimer y Angeliño para crear un rombo alrededor de la pareja de centrodelanteros del Atlético. Esto permitió al Leipzig controlar la primera fase de construcción de juego, antes de que el equipo español empujara a sus medio centros para hacer frente a Kampl. La idea era impedir que el esloveno se diera vuelta y siguiera proyectándose en la ofensiva, pero fue algo que en la práctica tuvo poco éxito.

Desestructurar al Atlético:

Por lo tanto, el Leipizig optó por enviar más balones largos desde la línea defensiva hacia Laimer o Angeliño en los costados, jugando por encima del estrecho mediocampo del Atlético y con la intención de evadir la presión sobre Kampl. Los laterales del Atlético solo avanzaban cuando había una alta probabilidad de llegar lejos y no salían a marcar a Laimer o Angeliño después de esos pases directos, manteniendo un bloque compacto de cuatro atrás.

Un método usado por el Leipzig para atravesar el campo rival fue desplazar a Sabitzer o Nkunku (abajo) más hacia los lados para recibir el balón. Cuando lograban hacerlo rápidamente, después de que uno de los mediocentros  del Atlético salía a presionar a Kampl, podían mover el balón hacia una posición por detrás del centro del campo rival. Sin embargo, constantemente les faltó precisión en el pase final, creando muy pocas ocasiones claras.



El Leipizg continuó insistiendo con su trío de atacantes centrales constantemente moviéndose y ofreciendo opciones de pase entre las líneas de ataque del Atlético, a través de las tres brechas en la línea del mediocampo del equipo español. Su paciencia finalmente obtuvo recompensa cuando Poulsen se retrasó, sacando a la línea defensiva del Atlético de su posición, antes de que el balón pasara hacia afuera para ser centrado.

Aunque frecuentemente se quedaba muy tirado hacia la banda durante la construcción de juego, en esta ocasión Sabitzer se colocó más hacia dentro para explotar el espacio alrededor del estrecho bloque del Atlético y cruzar el balón para que Olmo rematara de cabeza para el primer gol.

Proteger la salida de balón:

Al quedar en desventaja, el Atlético aumentó la presión sobre el Leipzig, con un marcaje más intenso sobre la línea defensiva del conjunto alemán. Sabitzer entonces se retrasó del trío atacante para colocarse al lado de Kampl (abajo), manteniendo una superioridad contra la línea de delanteros del Atlético.



Sin embargo, aunque esto ayudó a hacer progresar el balón en terreno contrario, la pérdida de un jugador ente líneas para recibir la posesión, hizo reducir considerablemente la amenaza ofensiva del Leipizig. Así, buscaron jugar más alrededor del rival, pero debido a la falta de suficientes efectivos en apoyo al jugador en banda que recibía el balón, les costaba crear oportunidades.

Balones largos a Costa:

El Atlético de Madrid dispuso un 4-4-2 en fase ofensiva, aunque los interiores Yannick Carrasco y Koke se movieron por dentro habitualmente (abajo), buscando apoyar la zona central del equipo rojiblanco. El equipo de Simeone buscó a Diego Costa con balones largos, cuando el delantero se situaba en el perfil izquierdo, y Carrasco iba en su apoyo.



Los mediocentros Saúl Ñíguez y Héctor Herrera se alternaban a la hora de incorporarse al ataque (abajo). Mientras que uno retrasaba su posición para cubrir a Dani Olmo, el otro se adelantaba para unirse con Koke y Carrasco y con ello crear una superioridad ante el doble pivote del Leipzig.



Los balones largos del Atlético buscaron dos objetivos. En primer lugar, avanzar metros en el ataque rojiblanco, pero también forzar faltas cerca del área y con ello jugadas a balón parado, una de las especialidades del equipo colchonero. El equipo rojiblanco también lanzó a sus laterales en ataque para situarse alrededor del 4-2-3-1 del Leipzig en defensa, especialmente cuando Herrera y Saúl retrasaban su posición.

Cuando el equipo de Simeone defendía atrás durante largos períodos, buscó a Costa con balones largos, con la intención de generar segundas jugadas, especialmente a través del carril central. Una vez que  habían asegurado el balón, para evitar la contrapresión del Leipzig sobre el mediocampo rojiblanco utilizaron a los laterales para asegurar la posesión. Con esto, además, evitaban permitir los contraataques del equipo de Nagelsmann.

João Félix cambia el ataque:

Con la salida al campo de João Félix, tras el primer gol del Leipzig, el Atlético modificó ligeramente su estructura ofensiva. La reacción de los de Simeone se basó en aumentar la presión por el carril central, con Koke y Saúl como mediocentros. Marcos Llorente se desplazó a interior derecho, con Félix algo más escorado a banda izquierda.

Con  Costa como jugador más adelantado, ahora el Atlético tenía un trío en ataque por detrás del doble pivote alemán (abajo). Por su parte, el doble pivote rojiblanco retrasó algo su posición, para permitir la incorporación de los laterales Trippier y Lodi. La habilidad de Félix para recibir y girarse fue un arma ofensiva para los rojiblancos, no solo por la capacidad del portugués para conducir el balón, sino también para atraer oponentes y permitir los desmarques de ruptura de Carrasco y Llorente.



Félix logró empatar el partido tras convertir el penalti, cometido tras una buena jugada del jugador luso por banda izquierda, con la colaboración de Costa. Llorente y Carrasco buscaron fijar a los laterales del equipo alemán, lo que dio más libertad a Félix para moverse entre líneas y llegar al área.

Los movimientos del delantero portugués también facilitaron las transiciones defensa-ataque del equipo rojiblanco. Mientras que Félix y Carrasco controlaron el costado izquierdo del ataque, Llorente apoyó a Morata desde la derecha. El ‘9’ del Atlético entró por Costa al final del encuentro.

El equipo de Simeone buscó continuamente atacar por el costado izquierdo para salir en transición desde el bloque defensivo bajo, ya que Morata no era tan capaz de aguantar los balones largos como lo había hecho Costa durante el partido.

Sin embargo, fue el Lepizig el que consiguió marcar hacia el final del partido, explotando una rara oportunidad de transición hacia adelante, ayudada principalmente por un excelente pase con el exterior del pie de Sabitzer. El Leipzig salió con muchos hombres haciendo retroceder al Atlético, con Angeliño con un pase atrás para habilitar a Tyler Adams, quien sentenció el partido con un disparo desviado que dejó a Oblak sin oportunidad de reaccionar.



“Mis futbolistas han tenido muy buenas decisiones en la mayoría de las acciones y fue un gran gol. Hemos sabido atacar a pesar de haber cambiado un poquito nuestra táctica. Y hemos logrado tener éxito con nuestra idea", explicó Julian Nagelsmann tras el encuentro. El técnico del RB Leipzig aseguró que se merecieron la victoria, al haber "sido mejores".



Diego Simeone afirmó que sienten "amargura y tristeza". "Buscábamos más. Queríamos más. Pero tengo claro que dimos todo lo que teníamos. Evidentemente cuando se pierde, cuando no se encuentra un resultado que te hace pasar la eliminatoria, buscaremos situaciones donde podíamos haber hecho otra cosa", explicó el entrenador del Atlético de Madrid que, sin embargo, admitió la superioridad del rival. "Fueron mejores. Tuvieron más intensidad y más velocidad".