La Liga, 14 de junio 2020
Kroos (4)
Sergio Ramos (30)
Marcelo (37)
Bigas (60)
La Liga se puso en marcha para Real Madrid y Eibar en un escenario desconocido para ambos, el Alfredo Di Stéfano. El Madrid ha decidido finalizar la temporada 2019/20 en el estadio del segundo equipo para acelerar las obras del Santiago Bernabéu, en pleno proceso de reconstrucción desde el inicio del parón liguero por la pandemia.
Otro punto destacado fue la vuelta de Eden Hazard al once titular del Madrid después de la intervención en su tobillo derecho el pasado mes de marzo. El internacional belga recuperó sensaciones y la asociación con Karim Benzema, produciendo entre ambos dos de los tres goles del Madrid. El Eibar, a pesar de la distancia en el marcador, no le perdió nunca la cara al partido, agobiando a su rival en la segunda parte. Un esfuerzo que, sin embargo, no impidió la victoria del conjunto local.
Los de Zinedine Zidane entran en las diez últimas jornadas de La Liga a dos puntos del Barcelona (los azulgranas ganaron 0-4 al Mallorca), en lo que promete ser una emocionante disputa por el título.
6 / 6
DISPAROS / A PUERTA
10 / 6
53 %
Posesión
47 %
601 / 515
Pases / Completados
511 / 410
10 / 1 / 0
Faltas / Amarilla / Roja
12 / 1 / 0
El Real Madrid comenzó con un 4-3-3 (abajo) alineando Hazard de inicio junto a Karim Benzema y Rodrygo Goes en la línea de ataque, con un centro del campo reconocible y veterano formado por Casemiro, Toni Kroos y Luka Modric. En la defensa tampoco hubo cambios sobre lo que acostumbra Zidane, repartiéndose Marcelo, Dani Carvajal, Sergio Ramos y Raphael Varane las plazas de la retaguardia.
El Eibar, por su parte, jugó con un 4-1-4-1 (abajo) dejando en el banquillo a jugadores como Sergi Enrich, el japonés Takashi Inui o Pedro León, que quedarían como posibles armas para agitar el partido en la segunda mitad. Marko Dimitrovic formó en portería con la pareja de centrales Anaitz Arbilla y Paulo Oliveira, acompañados por Roberto Correa en la derecha y Rafael Soares en el lateral izquierdo. Por delante de la defensa, Sergio Álvarez acompañando a una línea de cuatro con Pablo De Blasis, Edu Expósito, Sebastián Cristóforo y Fabián Orellana. Mientras, Kike García jugó arriba como único punta.
Al margen del planteamiento inicial, lo más importante de cara al comportamiento táctico de los equipos era ver cómo se conducían los entrenadores de ambos equipos en la gestión de cambiar a 5 jugadores, en un total de 3 interrupciones por equipo para las sustituciones.
Condicionado por el primer gol:
El Madrid quiso comenzar con una posesión larga, haciéndose el dueño del balón, asegurando pases e intentando no perder el control de la pelota. El objetivo era ganar en confianza después del tiempo sin jugar, mermando así la del rival y mandando un mensaje de dominio.
En el minuto 3 de partido, y después de varios intentos frustrados por parte del Eibar para recuperar el balón, el Madrid se adelantó en el marcador. Fue a través de Toni Kroos, quien con un golpeo suave con el pie derecho llevó el balón a un ángulo imposible para el portero visitante.
Después de ese inicio, el Eibar quiso estirarse y tuvo sus minutos de claro dominio con balón, con los laterales dando amplitud (abajo) y tratando de progresar por dentro con la incorporación entre líneas de Orellana.
El jugador chileno era capaz de recibir sin marca para amenazar las inmediaciones del área rival, abriendo el balón a banda, donde los laterales y De Blasis trataron de ser muy incisivos. El Eibar intentó finalizar mediante centros o pases filtrados dentro del área, pero carecieron de contundencia en las cercanías de Thibaut Courtois por lo que su dominio no se tradujo en goles ni ocasiones.
En esos minutos de dominio visitante, el Madrid fue paciente para defender y esperar una contra, situación que fue negada una y otra vez por los jugadores del Eibar, que no permitieron la continuidad suficiente mediante faltas tácticas y una buena presión tras pérdida.
Kroos para la salida de balón:
En el inicio de juego del Madrid, los visitantes mantuvieron durante todo el partido una presión alta, con la defensa muy adelantada que obligó en ocasiones al equipo de Zidane a arriesgar, provocando varias pérdidas de balón en el centro del campo. Kroos era el jugador que se se situaba cerca de los centrales (abajo) para iniciar el juego, lo que restaba efectivo por dentro. En otras ocasiones, el conjunto blanco se vio obligado a golpear en largo buscando a Benzema, pero en estas situaciones los perfiles ganadores los tenía el Eibar, con Arbilla, Oliveira y Álvarez.
En último tercio de campo, Hazard se movía con libertad, apareciendo por derecha o izquierda, así como por el centro entre líneas para poder recibir y encarar (abajo). El jugador belga mostró buen nivel, aunque todavía le falta ritmo para su endiablado 1 contra 1.
En el inicio del equipo visitante, al contrario que su rival, Dimitrovic sí que pudo buscar el juego directo con éxito sobre su referencia ofensiva, Kike García (abajo). El delantero del Eibar era capaz de ganar la disputa dando continuidad con la segunda jugada, donde su equipo, por mediación de sus medios centros, podía iniciar el ataque combinativo.
El equipo visitante mostró un planteamiento valiente, que, sin embargo, le costó otro disgusto a la media hora, esta vez sí en un contragolpe bien ejecutado por el Madrid. En los últimos metros Benzema aceleró la jugada para asociarse con Hazard, cediendo este último a Sergio Ramos para el gol del central blanco.
Goles ante la presión:
Una de las novedades tácticas del Madrid fue la de Carvajal entrando por dentro (abajo) para dar apoyo en salida de balón, dando así una opción interior más y dejando el carril exterior para la posible aparición de Modric o Rodrygo.
La gran capacidad del Eibar para presionar (abajo) y robar en campo contrario contrastó a su vez con las facilidades que dio en los metros finales. De nuevo Hazard se volvió a plantar delante de Dimitrovic, negándole el gol al belga con una buena parada pero, tras un despeje fallido, le quedó el balón a Marcelo, quien acertó a marcar el tercer tanto con un disparo cruzado.
A pesar de la desventaja en el marcador, el Eibar siguió con su planteamiento atrevido en la segunda mitad, aun más pronunciado desde el minuto 56 con la entrada -en un triple cambio- de Enrich, Pedro León y Bigas al campo. Precisamente este último dio esperanzas a su equipo para seguir intentándolo con su gol a falta de media hora para el final. Pedro León tuvo la opción de apretar aún más el marcador en un remate de derecha bloqueado por Courtois.
No bastó para el Eibar:
En ese segundo acto, con apenas opciones ofensivas para el Madrid, Zidane utilizó los cinco cambios para dar descanso y sin novedades tácticas, excepto la entrada al descanso de Ferland Mendy por Carvajal (con molestias físicas), jugando el internacional francés en la banda derecha.
Mendilibar también agotó los cambios y aparte del triple cambio que le dio un empujón al partido en la salida del segundo tiempo, entraron Esteban Burgos e Inui sustituyendo a Arbilla y De Blasis. Así, con un Eibar que apretó y no se dio por vencido hasta el final, finalizó el partido con 3-1 para el equipo local.
"Nos ha costado en la segunda parte. No sé si a nivel físico, pero no estuvimos acertados. A lo mejor puede ser el 3-0, porque la primera parte fue buena en todo y a lo mejor nos relajamos", explicó Zidane sobre las diferentes versiones del equipo. Zidane también habló sobre la vuelta de Hazard: "Se sabía que le faltaría un poco de ritmo si jugaba todo el partido, pero jugó una hora a un buen nivel".
"Los equipos con jugadores de talento como el Madrid notan menos la falta de capacidad física. Han aprovechado los momentos en los que han estado bien porque tienen mucha calidad; de la nada nos han hecho goles", afirmó Mendilibar. "Creo que hemos competido bien la segunda parte, donde ellos no ha tenido ya tantas ocasiones", añadió el técnico del Eibar en una lectura positiva de cara al futuro.