La Liga, 18 de junio 2020
Benzema (68, 86)
Hazard (74)
Marco Asensio fue el gran protagonista de la victoria del Real Madrid ante el Valencia. Once meses después de su grave lesión en la rodilla izquierda, marcó en el primer balón que tocó para, de paso, sentenciar el partido. Añadió también minutos después una asistencia para Karim Benzema, quien resolvió en una gran acción individual.
En la primera mitad, el Valencia se mostró dominador del partido, incluso llegó a adelantarse en el marcador con un tanto de Rodrigo que el árbitro anuló después de revisión en el VAR por fuera de juego del uruguayo Maxi Gómez en la acción previa. Una decisión muy discutida por el equipo ché.
Pero el 1-0 de Benzema mediada la segunda mitad desniveló el choque, que quedó resuelto a favor del Madrid con la mencionada intervención de Asensio en los dos siguientes goles. Los de Zinedine Zidane se mantienen así a dos puntos del Barcelona en la pelea por La Liga.
19 / 14
DISPAROS / A PUERTA
3 / 1
61 %
Posesión
39 %
738 / 671
Pases / Completados
436 / 369
12 / 0 /
Faltas / Amarilla / Roja
11 / 2 / 1
El Real Madrid formó en fase ofensiva sobre un 4-3-3 (abajo), dando entrada en el once titular a sus cuatro principales centrocampistas: Casemiro, Toni Kroos, Luka Modric y Fede Valvede. Para posibilitar esto, el futbolista uruguayo ocupó la banda derecha en ataque junto con Karim Benzema y Eden Hazard.
El Valencia, por su parte, se estructuró en un 4-4-2 (abajo) en fase defensiva, formando Geoffrey Kondogbia y Dani Parejo en el doble pivote en medio campo. La idea del equipo de Albert Celades pasó por concederle la posesión al Madrid y formar en un bloque medio compacto con el objetivo de cerrar las posibles penetraciones por dentro.
Intercambios de posiciones:
El Madrid hizo circular la posesión con la intención de abrir algún espacio, una opción que no encontró debido a que la circulación del balón era demasiado lenta y delante tenía un rival bien organizado en defensa. Para intentar solucionarlo, el equipo local recurrió a un intercambio de posiciones de jugadores, especialmente de los volantes en relación con los laterales.
Así, Valverde a menudo se movió por zonas interiores y más retrasadas, generando un espacio para las carreras de Modric en profundidad y facilitando el avance por fuera de Dani Carvajal. En la izquierda, Hazard trazó la diagonal al centro para asociarse en zonas interiores, permitiendo a Ferland Mendy tener toda la banda, mientras Kroos retrasaba su posición en la cobertura sobre el lateral francés. Sin embargo, esto solo sirvió para jugar al pie, con un Valencia bien organizado y resistente a la hora de mantener su dibujo defensivo. De esta forma, las únicas opciones del Madrid en ataque en el primer tiempo se limitaron a disparos desde fuera del área que apenas inquietaron a Jasper Cillesen.
Cerrar los pasillos interiores:
El Valencia, protegiendo la zona central, se encontraba cómodo permitiendo al Madrid pases diagonales por fuera. En estas acciones, los locales intentaron llevar el balance defensivo de su rival al perfil derecho antes de ejecutar un cambio de juego para Mendy en posiciones avanzadas (abajo). Algo que ocurrió en algunas ocasiones, pero siempre terminando siendo gestionadas con eficacia por el Valencia.
Cuando el Madrid tenía el balón en banda, el Valencia defendía con tres jugadores (abajo). Uno sobre la marca, otro cubriendo la posible superioridad por fuera y otro listo para actuar si el portador del balón intentaba acceder por dentro. Esta estrategia obligó al Madrid a retrasar el balón, en la búsqueda de iniciar otro camino para avanzar.
En los momentos en que los de Zidane optaron por construir el juego desde atrás, el Valencia buscó presionar cerca de la portería con una gran responsabilidad defensiva de sus diferentes unidades. Rodrigo sobre Sergio Ramos cuando el central tenía el balón, Ferran Torres cerrando a Mendy, Parejo ocupándose del centrocampista del Madrid que actuaba en cada momento como pivote (Casemiro, Kroos y Modric se intercambiaron esa posición), Kondogbia vigilando cualquier pase por delante (en este caso una posible asociación con Hazard) y Soler cerca de la marca del volante que actuaba por su zona.
En el intento de un cambio de juego, Maxi Gómez salía por fuera para presionar a Raphaël Varane, Soler adelantaba su posición para fijar la marca sobre Carvajal, mientras que Parejo y Kondogbia ejecutaban el balance defensivo hacia ese perfil. Esto requería un alto nivel de concentración y obtuvo diferentes resultados, especialmente en la segunda mitad. A partir de entonces se empezaron a abrir espacios en la estructura defensiva del Valencia y Hazard comenzó a tener más impacto en el juego.
Acierto en las transiciones:
A pesar de eso, el Valencia buscó forzar al jugador belga a jugar por dentro, donde el equipo ché contaba con más unidades para plantarle defensa, intentando evitar así que pudiera avanzar. Esto se hizo más evidente con el paso de los minutos, obteniendo el Madrid sus mejores ocasiones de gol en las transiciones, acciones en la que llegaron dos de sus tres goles.
La intención del Valencia a la hora defender las transiciones era recuperar su estructura, sin ninguna presión sobre las posibles ideas del Madrid en primera instancia. Sin embargo, si el equipo blanco recuperaba el balón en los primeros momentos que tenía el Valencia con posesión, en defensa o en mediocampo, los de Celades tenían menos opciones de recuperar su estructura defensiva permitiendo al Madrid obtener ventaja de esta situación.
Los de Zidane circularon con velocidad y fluidez el balón en las transiciones, con varios jugadores por delante de la línea de pase para ofrecer siempre una siguiente opción (abajo).
Diferentes alturas en fase ofensiva:
En ataque, el Valencia formó en un 4-4-2 (abajo), destacando la vuelta al equipo de Ferran Torres en banda derecha, mientras Rodrigo y el uruguayo Maxi Gómez formaron la pareja en ataque.
Utilizó el mismo dibujo el Madrid para defender, con un 4-4-2 donde Valverde retrasaba su posición para formar una línea de 4 en medio campo (abajo).
El posicionamiento del Valencia con el balón era un tanto ortodoxo, interviniendo Kondogbia en zonas retrasadas como único pivote, mientras Parejo se situaba cerca de él en la zona izquierda del mediocampo. En bandas, los de Celades también colocaron a sus jugadores en diferentes alturas. Soler se movió por dentro como mediocampista atacante, permitiendo que Gayà jugara más como un extremo y, en el otro perfil, Ferran se mantuvo arriba como extremo derecho.
Buscó atacar el Valencia la espalda de la defensa rival. Para ello, Rodrigo y Gómez caían en zonas intermedias arrastrando la marca de los centros del Madrid para intentar después correr a los espacios a la espalda (abajo). Sin embargo, tanto Varane como Ramos se mostraron muy acertados en estas acciones, también ayudados por las intervenciones de Courtois.
Sí logró con esa estructura asimétrica el Valencia que el Madrid no pudiera coordinarse en la presión. No obstante, el equipo blanco se aseguró de que los jugadores rivales no pudieran recibir, girarse y avanzar. Esto condujo a muy pocas ocasiones en las que el Valencia logró romper la línea rival, provocando un balance ofensivo de solo tres disparos a puerta.
Fase defensiva del Madrid:
El Madrid también presionó en algunas fases del partido arriba; Benzema para cerrar uno de los dos centrales con Modric, Kroos y Hazard en las vigilancias sobre el otro central, Kondogbia y Wass. Mendy, por su parte, tendió a no moverse de su posición para evitar un posible 3 contra 2 del Valencia, con Torres, Rodrigo y Gómez ante Ramos y Varane.
El Madrid también presionó en ocasiones sobre Cillessen, forzando al envió en largo del portero, una situación que fue controlada por los centrales del equipo blanco. El Valencia además trató de utilizar a sus extremos para penetrar en el espacio entre el central y el lateral del Madrid después de un pase a banda. Una opción impedida por la cobertura defensiva de Casemiro en las ayudas a Varane y Ramos.
En la segunda mitad, el Madrid comenzó más retrasado en defensa y conservando la energía, consciente de llevar a su rival más hacia adelante para explotar después los espacios en la transición defensa-ataque. Una opción, como reflejó el resultado, acertada por parte de Zidane.
"Hay que disfrutar, felicitar a los jugadores porque ha sido un partido muy completo y luego pensar en el siguiente partido ante la Real Sociedad", afirmó Zidane. El técnico del Madrid también celebró la vuelta de Asensio: "Después de tantos meses ausente para él sólo el hecho de entrar en el campo era motivo de estar contento y marcar en el primer balón que toca demuestra su calidad y que estaba muy metido".
"He visto la jugada anulada y no lo entiendo. Es una situación en la que Maxi no interviene. Llevamos todo el año con situaciones en las que no estamos teniendo suerte en las decisiones del VAR. Una más", se lamentó Celades después del partido. En relación al desarrollo del partido, el técnico del Valencia afirmó que "todo cambió con el 1-0. Se nos ha hecho larga esa última media hora".