Marc cucurella
Chelsea, 2022-Presente
El Perfil:
Marc Cucurella, un jugador que pasó seis de sus años de formación aprendiendo su oficio en las categorías inferiores del Barcelona, ha tenido hasta ahora una carrera que le augura grandes cosas en el futuro.
Por eso no fue una sorpresa que durante gran parte del verano de 2022 —tras su única temporada en el Brighton— algunos de los principales clubes de la Premier League estuvieron tras el fichaje del defensa español. Al final, el Chelsea ganó la carrera, después de que el Manchester City no alcanzara un acuerdo con el club de la costa sur de Inglaterra.
Hizo falta una suma de 68 millones de euros para que el Brighton vendiera a un futbolista que había jugado en varias posiciones y que se había convertido en uno de los favoritos de la afición. Cucurella gozó de la plena confianza de su entrenador, Graham Potter, acumulando más tiempo de juego en la Premier League que cualquier otro jugador de campo del Brighton en 2021/22, siendo titular en 35 de sus 38 partidos.
Thomas Tuchel también ha confiado en él para llevarlo a Stamford Bridge, con el objetivo de añadir opciones en el lado izquierdo de su Chelsea, tanto en su zaga de tres como en el puesto de carrilero.
Análisis técnico:
Cucurella es un defensa zurdo con experiencia en varias posiciones. Ha pasado la mayor parte de su carrera como lateral izquierdo y carrilero. Pero también —quizá un aspecto crucial para Tuchel en su decisión de fichar al defensa— tiene experiencia como central izquierdo en una zaga de tres. Esta versatilidad es una parte importante de lo que le hace ser tan útil.
Cuando defiende en banda en situaciones de uno contra uno, Cucurella puede desacelerar rápidamente después de esprintar hacia su oponente (abajo), limitando así la frecuencia con la que es superado por un atacante con sus primeros toques. Eso también significa que no comete tantas faltas como podrían hacerlo otros, ya que mantiene el control y la compostura a medida que se acerca al balón.
Cucurella tiene un centro de gravedad bajo, por lo que puede girar hacia ambos lados y correr hacia su propia portería con rapidez cuando el balón llega al espacio a su espalda. Además, utiliza bien los dos pies para bloquear los centros con uno de ellos adelantado en función del lado en el que el adversario mueva el balón. Esta es una habilidad que no siempre poseen los laterales y carrileros del más alto nivel.
Esto significa que el jugador español puede hacer frente a los rivales que quieren cortar hacia dentro y enviar centros con efecto hacia adentro, así como a los que van por el exterior para proporcionar envíos con efecto hacia afuera.
Es fuerte en los duelos y suele calcular bien sus entradas, pero cuando se equivoca en un intento de entrada o intercepción, puede ser superado por un rival rápido que toque el balón por delante de él. Sin embargo, Cucurella muestra buena recuperación si se mantiene cerca de su oponente y es capaz de bloquearlo cerca de la línea de banda. Cuando se enfrenta en carrera contra un extremo rápido, que tiene un espacio importante para atacar, es posible que quede rezagado.
Cuando se coloca en una posición de presión alta, Cucurella es agresivo en su planteamiento, pero rara vez comete una falta. Se conforma con seguir el balón hasta el fondo del campo contrario si es necesario (abajo), y es inteligente en la toma de decisiones, en los movimientos y en el posicionamiento a la hora de forzar el juego hacia la línea de presión de sus compañeros. Es incansable en su trabajo defensivo, siendo su capacidad para mantenerse con su marca y presionar durante mucho tiempo algo extremadamente útil.
Con el balón, Cucurella tiene la capacidad de proporcionar centros de alta calidad que apuntan a las carreras de compañeros en el centro del campo. Es capaz de enviar el balón hacia el área penal desde lejos, y también de enviar balones precisos, bajos y cruzados a la portería. Su visión de juego es una gran baza, ya que sabe encontrar el espacio que queda disponible en las cercanías o al borde del área.
Una cualidad clave en sus entregas desde la banda es su capacidad para pegarle al balón con efecto en torno a su oponente directo. Esto significa que no tiene que enfrentarse a un defensor antes de poner un centro al medio (abajo). También envía el balón con rosca para ayudar a que sus centros eludan a los centrales, y a menudo hace que sus centros caigan delante de un defensa para que ese jugador también tenga que lidiar con el rebote del balón.
Estos envíos incómodos permiten a los compañeros de equipo tratar de penetrar la defensa y llegar al espacio en el primer palo para rematar temprano tiempo o hacer avanzar el balón. También ayudan a crear momentos más imprevisibles en el último tercio para que los atacantes en desventaja numérica puedan aprovecharlos. Al añadir un rebote a un centro, Cucurella puede provocar errores de los defensores, que deben centrarse en la trayectoria del balón. Al hacer esto, es más probable que un atacante deje atrás su marca y pueda llegar al centro.
Aunque no es tan peligroso en el juego combinativo como con sus centros, Cucurella también puede crear ocasiones a través de rápidos intercambios por banda. Además, tiene la capacidad de regatear directamente a los defensores a gran velocidad, lo que le permite atraer a los rivales hacia el balón. A partir de ese momento, muestra una buena sincronización y habilidad, tanto en el momento de soltar el balón como en la forma de hacerlo, antes de ofrecer carreras directas poder detrás del rival. Incluso si no recibe un pase de vuelta, Cucurella muestra constantemente su empeño de arrastrar a los defensores fuera de la jugada. Así crea espacio en el centro y por detrás de su nueva posición
Rol como lateral:
Siempre que Cucurella jugó en una zaga de cuatro en su única temporada en el Brighton en 2021/22, actuó con Dan Burn o Lewis Dunk como compañeros más cercanos en el rol de central izquierdo. Estos centrales de gran envergadura se encargaban de los desafíos aéreos en su zona del campo, mientras que Cucurella proporcionaba cobertura por detrás, y a veces se encontraba ocupando una posición de central izquierdo como resultado.
A Cucurella se le animaba a subir, ya que el Brighton casi siempre atacaba con una línea delantera estrecha, independientemente de la estructura o la formación de inicio. Por lo tanto, el defensa español presionaba bien arriba en el último tercio del campo si era necesario. Ahí era apoyado por dentro a sus espaldas por Yves Bissouma. Era este quien proporcionaba una brillante cobertura de transición en el espacio que Cucurella dejaba por detrás.
Cuando defendía más profundo en una retaguardia de cuatro, Cucurella siempre se movía con rapidez para cerrar el paso a los rivales. Así retrasaba el balón para que un compañero -normalmente Bissouma- se uniera a él y creara un 2 contra 2 más difícil de penetrar para el rival.
En ataque, la presencia de jugadores del Brighton por el centro brindaba muchos objetivos para los centros de Marc Cucurella al primer palo. Los tres delanteros estrechos del Brighton mantenían ocupados a los centrales rivales, y los jugadores de banda se movían hacia dentro muy pronto, dando a Cucurella mucho espacio para avanzar (arriba). El bloque del centro del campo también se estrechaba en ataque, en un intento de generar superioridades por el pasillo central y crear oportunidades para lanzar balones en profundidad. Esto proporcionaba aún más opciones para que los atacantes y talentosos laterales del Brighton, Cucurella y Tariq Lamptey, lograran apuntar hacia sus objetivos.
En una defensa de tres:
Cuando defendía como lateral, Cucurella estaba también apoyado por Dunk o Burn en calidad de central izquierdo. Su posición de salida más alta le permitía presionar aún más arriba, sobre todo porque no había ningún compañero por delante de él debido a la estrecha línea de ataque de Potter en la estructura 3-5-2 o 3-4-3. Cucurella era inteligente presionando hacia dentro, con Burn listo para saltar hacia afuera al mismo tiempo que anticipaba cualquier movimiento hacia los espacios exteriores (abajo). Cucurella se recuperaba entonces por el centro, uniéndose a los tres centrales para defender la siguiente fase, actuando temporalmente como tercer central.
Cuando Burn avanzaba por el exterior, Cucurella también podía rodar hacia el interior y recibir pases de ruptura de líneas antes de buscar un centro desde posiciones más profundas y centrales.
Pero cuando Burn fue transferido al Newcastle, Cucurella fue utilizado como tercer central. Allí proporcionó carreras de desdoblamiento alrededor del lateral izquierdo -generalmente Solly March o Leandro Trossard- para asegurarse de que seguía estando en posición de enviar centros y mantener su amenaza ofensiva.
Cucurella es un jugador versátil y técnico, con mucha habilidad tanto con el balón como sin él. Tiene todas las herramientas necesarias para triunfar en un nivel superior al que ha jugado hasta ahora. En su primer año en la Premier demostró que se siente cómodo. El paso al fútbol de Liga de Campeones no luce imposible. Si es capaz de mantener la titularidad en el Chelsea, no hay razón para que no pueda estar a la altura del desafío.
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Redacción: The Coaches' Voice