Arthur Melo
Liverpool, 2022-Presente
El Perfil:
En su momento Barcelona asumió un riesgo significativo con la venta de Arthur Melo a la Juventus, independientemente de los 72 millones de euros recibidos en el traspaso y la llegada al equipo de Miralem Pjanic como recambio del centrocampista brasileño. Son muchos los que se mostraron optimistas de que, junto con Sergio Busquets y Frenkie de Jong, Arthur fuera capaz de tener un papel relevante en un centro del campo que algún día podría haber sido considerado como sucesor digno del eje Xavi-Busquets-Iniesta, que inspiró de manera tan impresionante a los grandes éxitos del Barcelona en los últimos años.
Sin embargo, se esperaba que la pérdida potencial del Barça represente una ganancia para la Juve. Arthur se añadió entonces a un centro del campo poderoso, de los mejores de Europa, con Aaron Ramsey, Sami Khedira, Blaise Matuidi, Adrien Rabiot y Rodrigo Bentacur. Allí estuvo dos temporadas antes de dar un sorpresivo salto al Liverpool.
Análisis táctico:
Arthur ha jugado a lo largo de su carrera como mediocampista defensivo, formando también como interior en ambos perfiles. Es jugador de una alta carga técnica y, por lo tanto, se siente cómodo recibiendo el balón bajo presión. Si lo presionan cerca de su portería, se mantendrá consciente tanto de lo que se está desarrollando como la protección del balón, a menudo porque ha planeado el siguiente pase antes de recibir.
De manera general se lo puede ver operando en los espacios intermedios en el perfil izquierdo o desplazándose hacia el centro del campo. En ambas zonas sobresale al recibir perfilado para luego hacer progresar la jugada a través de un pase diagonal hacia el lateral o el extremo correspondiente (abajo). Cuando no tiene una opción de pase hacia adelante, su excepcional equilibrio y control contribuyen a mantener el balón ante la presión del rival. Ademas, su velocidad para girarse y su rápido movimiento para eludir la marca de los oponentes es otro factor importante en la gestión de la posesión.
A medida que madura en su juego, para alcanzar su indudable potencial Arthur necesitará mejorar la frecuencia y la calidad de las penetraciones verticales que intenta desde posiciones más retrasadas. A menudo se mantiene cauteloso al pasar el balón, mientras que si optara por pases más arriesgados su figura representaría una mayor amenaza en el ataque.
Por otro lado, todavía tiene que demostrar el oficio con el que sobresale Busquets cuando ayuda a construir el juego desde una posición más retrasada. Su habilidad en el pase y mantener la compostura bajo presión también deberían hacerlo un jugador destacado para dictar la salida de balón de su equipo, un factor que aún debe hacerlo de manera consistente.
El hecho de que pueda driblar y alejarse de los marcadores es la razón que le permite superar la presión de los rivales, aunque a menudo sería preferible que pasara el balón y evitara así el riesgo de perderlo en posiciones peligrosas.
Cuando progresa hacia el campo contrario, la capacidad de Arthur para mantener la posesión es del más alto nivel. Prioriza el apoyo alrededor de la pelota, y los pases filtrados a los espacios a la espalda de los defensas rivales para los jugadores avanzados (abajo). Muestra, además, un alto porcentaje de éxito en la entrega de pases.
Es igualmente habilidoso cuando ataca en el uno contra uno. En este desarrollo se detiene con el balón para atraer a los oponentes antes de superarlos con un control certero, a menudo utilizando un buen equilibrio que le permite dar numerosos toques pequeños en diferentes direcciones sin disminuir la velocidad.
Rol en el Barcelona:
Arthur ha sido utilizado de manera regular como interior en un medio del campo en rombo por el que Quique Setién optó entonces en el Barça, alentándolo a adoptar las posiciones más cómodas para él en el medio espacio izquierdo, y desde donde podía complementar sus cualidades a través de diferentes combinaciones. No obstante, tuvo realizar adaptaciones a su juego para encajar en los los sistemas que Maurizio Sarri proponía en la Juve.
De manera similar a Pep Guardiola en el Manchester City, Sarri prefería que sus centrocampistas centrales operen con un marcado carácter ofensivo. En el Barça, Arthur jugó principalmente frente al mediocampo contrario antes que avanzar a medida que progresaba la posesión, aunque también se sentía cómodo cuando desarrollaba esta última función.