La Liga, 5 de diciembre 2020
Bounou (55, propia puerta)
En el Sánchez Pizjuán se citaban dos equipos con dinámicas opuestas en La Liga. Un Sevilla con tres victorias consecutivas, ante un Real Madrid que llevaba los mismos partidos sin ganar. Unos resultados negativos para el equipo de Zinedine Zidane a los que se añadía su última derrota en la Champions League.
Una compleja situación que el Real Madrid alivió ganando al Sevilla, y lo hizo con un gol en propia meta de Yassine Bounou después de que Vinícius tocara antes ligeramente el balón dentro del área pequeña. El equipo local buscó reaccionar al tanto visitante en el segundo tiempo, pero no pudo superar el ordenado entramado defensivo madridista, que recuperó la versión que le llevó a ganar el campeonato de La Liga 2019/20 después del confinamiento.
10 / 3
DISPAROS / A PUERTA
7 / 2
61 %
Posesión
39 %
906 / 754
Pases / Completados
631 / 478
15 / 1 / 0
Faltas / Amarilla / Roja
20 / 3 / 0
El Sevilla formó en 4-3-3 (abajo) en fase ofensiva con Aleix Vidal en el lateral izquierdo a pierna cambiada, siendo Jesús Navas el que ocupaba el derecho y Diego Carlos y Jules Koundé la zona central de la defensa como viene siendo habitual. Fernando jugó por delante de la defensa aportando equilibrio junto a Ivan Rakitic y Joan Jordán como interiores. En la línea de tres arriba, Julen Lopetegui apostó por Luuk De Jong como delantero, apoyado en los costados por Lucas Ocampos, en la derecha, y Munir El Haddadi, en la izquierda, jugando ambos en la banda a pie dominante.
El Real Madrid, a pesar de las bajas de jugadores como Sergio Ramos o Eden Hazard, mantuvo el 4-3-3 (abajo) con el que viene formando regularmente, con Lucas Vázquez y Ferland Mendy en los laterales, compartiendo Nacho nuevamente la zaga central con Raphaël Varane. Por delante de ellos, Zinedine Zidane jugó con su medio del campo habitual: Casemiro, Luka Modric y Toni Kroos. Karim Benzema, mientras tanto, fue acompañado en los extremos por los brasileños Vinícus y Rodrygo.
Presión alta:
El Sevilla trató de llevar la iniciativa combinando desde atrás, intención que fue contrarrestada por el Real Madrid con una presión alta (abajo) donde el objetivo era robar en fase de inicio sevillista. Estuvo cerca el equipo visitante de encontrar el premio del gol con esta presión en los primeros minutos, con varias pérdidas locales, incluyendo un error de Bounou ante la presión de Vinícius que solo pudo salvar Diego Carlos cuando Benzema esperaba en línea de gol.
En las ocasiones en que el Sevilla conseguía llevar el balón a fase de creación, buscaba ser profundo por bandas, sobre todo por el lado derecho (abajo), para finalizar el ataque bajo dos variables: desbordando o bien con un centro al área buscando el poderío de De Jong en los balones aéreos.
Jugar de cara:
En salida de balón se pudo ver una alternativa sevillista en forma de patrón que se repetía una y otra vez con bastante éxito. Cuando Koundé tenía el balón en defensa, Navas se acercaba mucho hacia él para atraer la presión del rival (abajo), mientras De Jong se acercaba ligeramente a zonas intermedias para aprovechar ese espacio y ganar el duelo a Nacho. Una acción en la que el delantero neerlandés dejaba el balón de cara para Ocampos o alguno de los medios centros, armando desde este punto el Sevilla la acción ofensiva.
Si el Real Madrid no conseguía robar en la presión alta, entonces se replegaba a su punto de partida, donde buscaba achicar los espacios entre líneas para impedir que Rakitic, Fernando y Jordán jugaran con tiempo y espacio. En el caso de recuperar en segunda línea, los madridistas lanzaban una transición rápida atacando la espalda de los laterales sevillistas, que se mantenían con altura y sufrían en los contraataques de Rodrygo y Vinícius.
Disparos desde media distancia:
El Real Madrid, en fase ofensiva, también trató de iniciar de manera combinativa con Kroos y Modric acercándose a los defensas para asumir la responsabilidad del inicio de la jugada. Mientras tanto, la presión del Sevilla fue algo más posicional y menos intensa en los primeros metros que la de su rival. El equipo de Zidane encontró muchos espacios en la frontal del área trazando la diagonal desde las bandas, una opción que facilitó disparos de media distancia de Kroos, Casemiro o Benzema.
El Sevilla también trató de transitar de manera rápida tras la recuperación buscando la portería rival y si, en esa primera instancia no veía opciones claras, optaba entonces por un pase de seguridad para iniciar el ataque mediante el orden con balón. La lesión muscular de Munir obligó al Sevilla a introducir cambios, dando entrada a Óliver Torres, jugador que le daba mayor control en fase de creación, aunque le restaba profundidad por banda izquierda. Una banda ya mermada por tener a un jugador como Vidal a quien, siendo diestro, le costaba más aprovechar los espacios a banda cambiada.
Dos modelos de ataque:
Crecieron las posesiones más largas del Sevilla, que movía a su rival de un lado al otro buscando los espacios que permitiesen penetrar sobre el sólido bloque rival. Y lo hizo a través de cambios de orientación medios y largos para obligar al Real Madrid a bascular más rápidamente, forzando situaciones de superioridad en banda desde donde poder buscar después el centro al área (abajo). En una de estas acciones, apareció De Jong para realizar un remate de chilena que detuvo Courtois.
Pero fue el Real Madrid el que se adelantó en el marcador en una rápida combinación de dentro a fuera transitando desde la defensa hasta los metros finales (abajo), zona donde apareció Mendy en banda izquierda para ejecutar un centro al área que llevó al ligero toque de Vinícius en el área pequeña y el gol de Bounou en propia meta.
Variaciones de jugadores y sistemas:
En el transcurso del segundo tiempo y con ventaja del Real Madrid, Lopetegui varió el once dando entrada de una tacada a Youssef En-Nesyri, Nemanja Gudelj y Suso; cambios con los que el Sevilla mutó a 4-2-3-1 en fase ofensiva desplegando a Ocampos como extremo izquierdo, Suso en la derecha y Torres en la media punta por delante del doble pivote formado por Fernando y Gudelj. En Nesyri pasó a ser el '9', ganando con él el equipo profundidad en la banda izquierda para tener opciones por ambos costados.
El Real Madrid, por su parte, varió su dibujo en fase defensiva, pasando a un 4-1-4-1 (arriba) para defender juntos y evitar las ocasiones sevillistas, al mismo tiempo que intentaba ganar minutos de posesión para controlar el partido. Una estrategia con la que consiguió el Real Madrid cerrar el partido sin sufrir en los últimos minutos, mas allá de otra chilena, esta vez de Ocampos que Courtois consiguió enviar a córner.
"La valoración, después de derrota, siempre es negativa y más cuando creo que hemos tenido merecimientos para lograr algo más. Hemos sometido al Real Madrid durante la segunda parte pero no encontramos el camino al gol", explicó Lopetegui. El técnico del Sevilla también señaló que el gol del rival llegó "cuando mejor estábamos y no tuvimos paciencia".
"Son tres puntos importantísimos, pero más importante es el partido que hicimos. Los últimos días no han sido fáciles. Nuestra primera parte fue muy buena y los tres puntos son merecidos, ante un rival muy bueno", afirmó el técnico del Real Madrid. "Sabemos que cuando no lo haces bien te van a criticar. Hay que pensar en positivo y nada más. Seguir intentando tener regularidad y es lo que vamos a intentar buscar", añadió Zidane.