GUIDO RODRÍGUEZ
Real Betis, 2020-Presente
El Perfil:
Manuel Pellegrini, en el Real Betis, y Lionel Scaloni, en la selección de Argentina confiaron en Guido Rodríguez como principal jugador para dar el equilibrio necesario a sus respectivos equipos.
Un futbolista que ha confirmado todo lo bueno que apuntaba cuando surgió de la cantera de River Plate. Sin embargo, no sería en los ‘Millonarios’ donde brillara. Su préstamo a Defensa y Justicia en 2016 le dio los minutos necesarios para crecer y su evolución continuó en México. Primero en Tijuana y de 2017 a 2020 en el América, equipo donde, entre otros logros, fue elegido mejor jugador del Apertura 2018.
Su estancia en el Real Betis ha consolidado su juego. Se conformó como uno de los mejores centrocampistas de la Liga española y pieza indiscutible de Argentina. “Estamos muy contentos con Guido, no sólo porque cuando juega, juega bien. Entiende muy bien el juego, es un chico positivo para el grupo”, ha destacado Scaloni.
Análisis técnico:
Guido Rodríguez es un mediocentro diestro que puede ocupar todo el ancho del campo. Posicionalmente se desenvuelve tanto acompañado de otro mediocentro o actuando solo como pivote con dos interiores por delante (abajo). Independientemente de su posición, el internacional argentino destaca por dar el equilibrio necesario a su equipo en ambas facetas del juego, con o sin balón.
Se trata también de un futbolista que destaca por tener una gran calidad técnica, siendo quizás el entendimiento del juego su mejor baza. Siempre se muestra en disposición de recibir el balón como también en continua línea de pase para recibir el balón y dar continuidad al juego.
Cuando su equipo no tiene el balón, Guido Rodríguez se erige como uno de los futbolistas fundamentales para recuperar cuanto antes el balón. Puede ser saltando a la presión con una gran efectividad a la hora de realizar entradas o interceptaciones. También ocupando posiciones que han quedado descubiertas en el orden defensivo de su equipo.
Conector entre la defensa y el ataque
La gran capacidad táctica que tiene Guido Rodríguez es clave para entender su posicionamiento en el campo. En pocas ocasiones abandona el centro del campo, siempre situándose como una alternativa al pase de los centrales o de los laterales en primera línea. La capacidad para estar bien perfilado y el buen manejo de las dos piernas le hacen tener siempre un pase de seguridad como primera opción.
Su principal característica es dar continuidad al juego a través del pase, ya sea a través de combinaciones en corto o en desplazamientos a media distancia.
Identificado como un jugador que no arriesga mucho en el pase, en varias ocasiones, dadas sus condiciones técnicas, también es capaz de realizar cambios de orientación efectivos cuando el equipo rival ha basculado en defensa de manera excesiva.
Uno de sus movimientos automatizados en el Real Betis de Pellegrini es lateralizarse en cualquiera de los costados para recibir el balón liberado de presión. Debido a la amplitud y profundidad de los laterales —tanto de Héctor Bellerín por derecha como de Álex Moreno por izquierda—, el argentino ocupa la posición de falso lateral para, a partir de ahí, iniciar el ataque.
Una vez fijado al extremo contrario, suele tener varias alternativas de asociación. Por ejemplo: Hacía fuera con un envío al lateral que ha ganado altura; o un pase por dentro buscando la calidad y la capacidad de giro de Fékir, Juanmi o Sergio Canales (arriba). Esta capacidad de asociación en el pase es una de sus mejores virtudes.
Agresividad o temporización
En el aspecto defensivo hay que destacar su trabajo sin balón. Con un tren inferior fuerte, es ganador en muchos de los duelos que realiza recuperando el balón. Esto para posteriormente darle continuidad al juego con un pase de seguridad, aspecto este que le permite jugar como único mediocentro.
Realizar un tackling para reconquistar la posesión es una de sus acciones favoritas de Rodríguez (arriba). Pese a que tirarse al suelo para recuperar el balón no suele ser una práctica muy aconsejable, el mediocentro del Real Betis y la selección argentina domina a la perfección esta técnica, interpretando muy bien el momento justo para entrar en acción.
Guido Rodríguez se afana por recuperar el balón con agresividad, pero también —en relación a su capacidad táctica y del juego—, ejerce a la perfección temporizaciones defensivas cuando su equipo está en inferioridad numérica (abajo). Esta labor difícilmente vista en los mediocentros de hoy en día, lo convierten en un futbolista muy valorado tanto para Pellegrini como para Scaloni.
En los duelos aéreos, sin ser una faceta en la que destaque demasiado, se erige como el primer jugador en disputar los saques en largo del portero rival o cualquier despeje que llega al centro del campo.
Rol como mediocentro:
En el Real Betis suele ocupar el centro del campo junto a otro mediocentro de diferentes características. Ya sea Andrés Guardado o William Carvalho, el que futbolista que juega al lado de Guido Rodríguez tiende a liberarse mucho más en ataque y llegar a la frontal rival ocupando posiciones rematadoras. Mientras que el centrocampista argentino rara vez llega con posibilidades de finalizar jugadas.
Sin balón, la idea del Real Betis es ordenarse con un 4+2 en defensa, alineándose los dos mediocentros casi en paralelo para llegar a ocupar más zonas del centro del campo. En estas situaciones, Rodríguez ejecuta principalmente el perfil más defensivo de los dos mediocentros.
Pese a que es un jugador que le gusta estar en continuo contacto con el balón su manera de defender y de ayudar al equipo a recuperar el balón, no es impedimento para que Rodríguez disfrute en esta otra faceta.
Rol como pivote:
Es con la selección argentina donde Rodríguez desarrolla el puesto de pivote por delante de la defensa y escoltado por dos interiores ofensivos. Es una posición en la que tiene muchas más obligaciones defensivas y en donde es clave las ayudas que hace a los centrales en todos los centros laterales o ante situaciones de inferioridad numérica.
En fase de posesión del combinado albiceleste, Rodríguez es el canalizador del juego en la primera fase de juego (abajo). Una vez el balón está en campo contrario, su capacidad táctica sale a relucir constantemente cuando su primera intención siempre es la de hacer vigilancias ofensivas o coberturas a los futbolistas que han perdido su posición.
Su labor por delante de línea defensiva es clave para entender la gran capacidad de movilidad que tienen los dos interiores que juegan por delante de él. Scaloni ha ido variando el 4-3-3 con el 4-4-2, pero para utilizar la primera formación es Rodríguez el futbolista más utilizado porque maneja a la perfección varios de los recursos que le hacen destacar a un mediocentro de contención.
A su excelente capacidad de temporizar y realizar entradas en tareas defensivas, se le une una fuerza física que le permite realizar grandes esfuerzos a la hora de replegar.