Clasificatorios Mundial 2022, 13 de noviembre 2020
N. González (41)
Ángel Romero (12, pen)
Argentina, que venía de dos triunfos en las dos primeras jornadas del clasificatorio para el Mundial de 2022, y Paraguay firmaron tablas en La Bombonera. Un partido donde la selección de Eduardo Berizzo se adelantó en el marcador cobrando Ángel Romero con acierto un penalti. Paraguay bloqueó de manera general las acciones ofensivas de Argentina, que precisamente hizo el gol del empate en saque de esquina con un testarazo de Nicolás González a la red.
En el segundo tiempo, el cuadro de Lionel Scaloni volvió a tener muchas dificultades para encontrar el camino al gol ante la defensa paraguaya. Lo encontró Lionel Messi, pero la acción fue anulada en la revisión del VAR, señalando el árbitro una falta en el origen de la acción. Así, Argentina se queda con 7 puntos en la clasificación por los 5 de Paraguay, que se mostró como una sólida selección en uno de los grandes escenarios del fútbol mundial.
15 / 5
DISPAROS / A PUERTA
6 / 2
69 %
Posesión
31 %
625 / 538
Pases / Completados
292 / 216
11 / 2 / 0
Faltas / Amarilla / Roja
16 / 4 / 0
Argentina se situó en 4-3-3 (abajo) con Gonzalo Montiel en el lateral derecho y Nicolás González en el izquierdo, con Martínez Quarta y Nicolás Otamendi en el centro de la zaga. Por delante de la defensa, Leandro Paredes jugó como pivote defensivo en el medio del campo, con Rodrigo de Paul y Exequiel Palacios como volantes. Mientras, Lucas Ocampos se situó de extremo izquierdo y Lautaro Martínez en punta, dejando a Lionel Messi con libertad para moverse cerca de ellos y habilitar la banda derecha libre para los avances en ataque de Montiel.
Paraguay formó con un 4-2-3-1 (abajo) con Gastón Giménez en la media punta, mutando a 4-4-1-1 en repliegue defensivo cuando los dos volantes se incrustaban en la línea de medios para defender más juntos. Fabián Balbuena y Gustavo Gómez formaron como centrales con Robert Rojas y Junior Alonso en los carriles exteriores. En el doble pivote jugaron Ángel Cardozo y Mathías Villasanti, y las bandas las ocuparon Miguel Almirón en izquierda y Ángel Romero en derecha, aunque éste último estuvo muy activo durante todo el partido y gozó de gran libertad para moverse por todo el frente de ataque.
Atacar el flanco izquierdo:
Comenzó Paraguay llevando la iniciativa, controlando los primeros minutos con balón y provocando los primeros acercamientos buscando a Almirón en banda izquierda del ataque paraguayo (abajo). Después de un primer cuarto de hora de alternancias y cierta incisión de los visitantes por las bandas, Almirón pisó área y fue derribado por Martínez Quarta. Una acción designada como penalti por el árbitro, que acabó cobrando Romero con un tiro raso a la izquierda de Armani.
Durante ese primer cuarto de hora hubo dominio del equipo paraguayo y, ante la presión alta del equipo local, los de Berizzo consiguieron salir con el balón en situaciones combinativas desde atrás, contactando con los mediocentros para buscar, posteriormente, los carriles exteriores. Paraguay, por otro lado, decidió también en fase defensiva realizar una presión alta (abajo) para obligar a Argentina a golpear en largo, acciones donde se sabía superior y recuperaba rápidamente el balón.
Sin rematador dentro del área:
Después del gol, Argentina se fue estirando y logró hacer contacto en más ocasiones con los hombres de arriba, sobre todo con Messi. Así fue encontrando centros laterales desde ambas bandas, aunque carecían de rematador por no conseguir ocupar el área con suficientes efectivos. Hasta que en un córner cobrado por Giovani Lo Celso (que había entrado en el campo por la lesión de Palacios) remató González para poner el 1-1, a falta de 5 minutos para el descanso (abajo).
Paraguay se fue replegando a la vez que Argentina ganaba metros y minutos con el balón. El cuadro visitante protegía la zona central, haciendo que el equipo de Scaloni se estrellara una y otra vez contra su defensa, recurriendo la Albiceleste a los disparos de larga distancia.
Cerrar los espacios:
La densidad defensiva del equipo de Berizzo para reducir los espacios interiores fue eficaz durante gran parte del partido (abajo), pero generó un gran desgaste en los defensores que tuvieron que multiplicarse para mantener el cerrojo en la zona central.
Los atacantes argentinos tuvieron que buscar soluciones saliendo a recibir fuera del bloque paraguayo, siempre lateralizados para tomar las riendas en la salida de balón, mientras Messi intenta recibir demasiado alejado de zona de peligro (abajo), lo que era un alivio para la defensa guaraní. Argentina encontró sus mejores minutos de juego después del gol, e incluso estuvo cerca de ponerse por delante en el marcador con un disparo lejano de De Paul que Silva rechazó a córner con una buena parada.
Asegurar la posesión:
Defensivamente, el equipo de Scaloni realizaba una variante en su sistema, incorporando a Ocampos en la línea de medios. Un movimiento que dejaba un dibujo en 4-4-2 (abajo) con Messi y Martínez liberados de tareas defensivas. Después de recuperación, y ante la dificultad de encontrar un contraataque rápido por el buen hacer de la defensa guaraní, Argentina primaba asegurar la posesión del balón para ordenarse en torno a ella y poder así atacar la poblada área rival.
La segunda parte comenzó con el equipo local dominante en busca del gol, y lo hizo a través de combinaciones con Lo Celso y Messi para penetrar la férrea defensa paraguaya. Sin embargo, eso no llevaba a situaciones claras de gol debido a la solidaridad defensiva de los visitantes, que dejaron de combinar el balón para limitarse a defender e intentar aprovechar un contraataque o una acción a balón parado aislada, que les permitiera conseguir el gol de la victoria.
Menor ritmo:
Los laterales argentinos fueron ganando metros y estableciéndose en campo contrario buscando generar superioridades por fuera, actuando Messi en posiciones interiores para recibir y desbordar con un cambio de velocidad.
Sin embargo, el partido fue decayendo hasta establecerse con un ritmo más lento que beneficiaba a una Paraguay que empezó a conformarse con el empate. Al margen del un gol anulado a Messi por una falta en el inicio de la jugada y un par de intentos del jugador del Barcelona de tiros libre directos, el partido en su segunda mitad no tuvo muchas ocasiones. En los últimos minutos, el combinado albiceleste, consciente de que no es un equipo poderoso en los centros laterales, siguió optando por abrir un espacio por el centro. Algo que no llegó a ocurrir en ningún momento, terminando el partido con empate.
"Nos vamos con un sabor agridulce porque Argentina hizo todo para ganar. En el segundo tiempo metimos al rival atrás. Aunque no se ganó, hay que valorar varias veces que se hicieron bien", señaló Scaloni sobre la actuación de sus jugadores. El entrenador de la Albiceleste también se refirió al VAR: "Hay un montón de jugadas en las cuales podía haber actuado y hoy no actuó. No hablo de buena o mala fe, hay que unificar el criterio. Nos quedamos con un jugador por varios días o meses afuera (Palacios), el golpe existe y el VAR no revisa".
"Aplaudo la actuación por el gran esfuerzo y por el convencimiento de que debíamos llevarnos algo", destacó Berizzo. "En el primer tiempo empezamos a presionar al hombre y después en zona. Mermó porque nos hacían correr de lado a lado. Cualquier uno contra uno que perdiéramos daba lugar a un desequilibrio", añadió el entrenador de Paraguay.