Atalanta 2 Manchester United 2: Análisis táctico

Como ya ocurriera en el partido de Old Trafford de la tercera jornada, Cristiano Ronaldo volvió a emerger en los últimos minutos ante el Atalanta. Su segundo gol del encuentro selló un empate que favorece los intereses del Manchester United, que se mantiene como líder del igualado grupo F con 7 puntos, los mismos que el Villarreal -después de la victoria del equipo de Unai Emery ante el Young Boys- y dos por delante del cuadro bergamasco.

Josip Ilicic y Duván Zapata adelantaron por dos veces al equipo italiano, ambas ocasiones contrarrestadas por los mencionados goles de  Ronaldo, quien, al margen de ser nuevamente decisivo para su equipo, se convierte en el primer jugador del United que logra anotar cuatro partidos consecutivos de la Champions League desde la edición 2002/2003, cuando entonces lo logró Ruud van Nistelrooy.

Fase de posesión: Atalanta

Los locales se centraron en construir su juego con amplitud sobre la presión inicial de los tres atacantes del United. Los movimientos por fuera de los delanteros centrales, Josip Ilicic y Duván Zapata, eran apoyados por los carrileros, los centrales exteriores y los centrocampistas centrales (abajo) para formar una sociedad por bandas.

Una vez que los centrales exteriores del United eran arrastrados fuera de su posición, se abría el espacio para las carreras en profundidad, normalmente realizadas por Mario Pasalic como mediapunta, quien podía empezar más atrás debido a la altura proporcionada por los centrocampistas centrales, Teun Koopmeiners o Remo Freuler. El cuarteto atacante del Atalanta en amplitud generó su primer gol, en una acción donde Zapata se abrió por fuera, Freuler se adelantó con el central exterior Palomino presionando y el carrilero, Maehle, se estiró por delante. Aunque un desvío en el pase liberó a Zapata, y un error individual de De Gea costó el gol, el Atalanta se mostró amenazador en sus repetidas carreras al espacio por los pasillos interiores.

Buscar la amplitud con cambios de juego:

Una vez que Rashford y Fernandes retrasaron su posición en fase defensiva, el United consiguió neutralizar el juego por las bandas y los pasillos interiores de su rival. Ante eso, la pareja de centrocampistas compuesta por Freuler y Koopmeiners también retrasó su posición, habilitando que los carrileros locales jugaran adelantados. Un desarrollo donde el centro del campo del Atalanta buscó constantemente cambios de juego para encontrar la amplitud proporcionada por los jugadores de banda (abajo), acción a la que se sumaba el apoyo eventual del delantero más cercano a la jugada. De igual modo, Pasalic pasó a jugar más arriba, con la pareja de centrocampistas más retrasados. Bajo este enfoque ofensivo el equipo de Gasperini continuó presionando para apoyar el juego por bandas, todavía apuntando a los espacios a la espalda de los defensas locales a través de sus movimientos de penetración.

Variación de posiciones, pero no de dibujo:

De Roon pasó a ocupar posiciones en mediocampo en el segundo periodo, al igual que en el partido anterior contra el United. Sin embargo, en esta ocasión el Atalanta no varió la misma estructura de 3-4-1-2. De este modo, los dos centrocampistas centrales mantuvieron su posición más retrasada, mientras que de Roon se adelantó para jugar junto a uno de los centrales del United (abajo).

Asimismo, los delanteros locales continuaron ofreciéndose por fuera, antes de atacar la espalda de la defensa rival, intentando así explotar los mayores espacios que existían en el intervalo entre los laterales y los centrales en la defensa de cuatro jugadores que el United formó a raíz de la lesión de Raphaël Varane. Una estructura defensiva del United con menos cobertura en comparación con el quinteto utilizado inicialmente.

Bajo esta premisa, cada vez que los carrileros visitantes salían a la presión de sus homólogos del Atalanta, esos espacios aumentaban aún más. Un desarrollo que dio origen al segundo gol, donde Zapata se encontró con un pase del central Palomino para poner a los locales por delante.

Un nuevo enfoque ofensivo:

Los locales terminaron el partido con dos delanteros menos móviles, ocupando posiciones interiores en lugar de desplazarse por fuera (abajo). Como resultado de esto, el doble pivote del United tuvo menos problema para controlar la primera línea rival, y la acumulación de juego por fuera del Atalanta fue mejor presionada por los carrileros visitantes.

Una situación que llevó a que los de Gasperini tuvieron menos control de la posesión, tratando también de hacer frente a las amenazas del ataque central del Manchester United, situación en la que trío de centrocampistas locales permaneció más unido. Aunque esto ayudó a habilitar un acceso hacia el interior desde sus laterales. Sin embargo, el Atalanta tuvo dificultades para generar los ataques en profundidad desarrollados en la primera mitad.

Fase de posesión: Manchester United

Los de Solksjaer tuvieron que hacer frente a la presión alta del Atalanta, que se centró en cerrar los pasillos interiores en su marca sobre los centrales del United. La pareja de centrocampistas locales también presionaba agresivamente a Paul Pogba y Scott McTominay, limitando así la construcción de juego en la zona central por parte de los visitantes. Ante estos problemas, el United optó por jugar con pases directos, utilizando los espacios más arriba dentro de los pasillos interiores. Primero con Bruno Fernandes o Marcus Rashford como objetivos, pero finalmente encontrando a Ronaldo, más acertado en el juego aéreo (abajo).

Así, el United logró llegar a campo rival. Sin embargo, una vez que el Atalanta se reagrupó, los visitantes tuvieron dificultades para generar juego a través del bloque compacto de los locales.

Cambio de estructura:

Señalada anteriormente, la lesión de Raphaël Varane hizo que el United modificara su dibujo a un 4-2-3-1, lo que hizo que Fernandes tuviera un mayor impacto en el juego de ataque de los visitantes.

La pareja de centrocampistas del Atalanta se centraba a menudo en el doble pivote del United, por lo que Fernandes podía descolgarse y combinar con menos presión. Un escenario que resultó clave para asociarse con Ronaldo en los espacios centrales (abajo). Los movimientos y el posicionamiento de Rashford y Greenwood en los pasillos interiores también atrajeron a los centrales exteriores de los anfitriones. La sociedad Ronaldo-Fernandes en esos espacios interiores llevó al gol del empate con combinaciones rápidas e incisivas. De igual modo, Luke Shaw y Aaron Wan-Bissaka aportaron entonces la amplitud ofensiva, ocupando la vigilancia defensiva de los carrileros del Atalanta.

Mayor fluidez en ataque:

El mencionado 4-2-3-1 permitió al United atacar con mayor fluidez en el segundo tiempo. La mayor parte del tiempo, Shaw mantuvo su posición abierta en la izquierda, con el doble pivote apoyando la jugada, listo también en la cobertura sobre los dos centrales. Mientras, en la banda derecha, Wan-Bissaka también atacaba hacia posiciones interiores -además de solaparse-, especialmente si la amplitud en este lado ya estaba establecida (abajo), donde Fernandes y Greenwood intercambiaban posiciones. mientras Ronaldo y Rashford, por su parte, se mantenían en posiciones estrechas para continuar asociándose en zonas centrales a la espalda de la pareja de centrocampistas del Atalanta.

Cristiano Ronaldo y Cavani:

El United terminó el partido con Cavani y Ronaldo como pareja de delanteros, apoyados en segunda líneas por Fernandes y Greenwood, quienes predominantemente se mostraron amenazantes en los pasillos interiores. Estos cuatro jugadores dieron forma a un agresivo ataque, donde la amplitud la aportaron los dos laterales (abajo).

Bajo ese desarrollo en fase de posesión, se produjeron más intercambios de posiciones en la banda izquierda del United, sobre todo por el canal interior, ya que Cavani o Ronaldo retrasaban su posición, lo que habilitaba a Fernandes a moverse por dentro y comunicarse con el centro delantero restante. Asimismo, Fernandes también se movía hacia el perfil derecho, habilitando a Greenwood atacar más como delantero centro; movimiento acompañado por el del otro delantero hacia el pasillo interior izquierdo.

Todo eso hizo que el United tuviera mucho más el balón durante el segundo periodo, obligando al Atalanta a defenderse en bloque durante mucho más tiempo. Una dinámica de partido que llevó al gol del empate en los instantes finales del partido con un fantástico disparo raso de Ronaldo.

Entrenadores:

"Lástima por ese gol de Cristiano Ronaldo, porque la victoria nos hubiera dado un empujón. No obstante, aún tenemos la oportunidad de pasar", señaló el entrenador del Atalanta. "Últimamente también hemos encajado goles en defensa, pero eso nos hace entender cuánto margen de mejora tenemos todavía", reflexionó Gasperini sobre esa última acción decisiva.

"Fue un partido apretado, que fluyó en ambas direcciones. Los dos goles del Atalanta fueron muy ajustados. Por supuesto yo estaba esperando que levantaran la bandera por fuera de juego en el segundo gol y en el primero también, porque creo que estaba en posición adelantada", analizó el entrenador del United. Solklsjaer, como no podía ser de otro modo, elogió la actuación de Cristiano: "Si hay alguien que quieres que tenga la pelota en el último minuto, ese él. Y fue una ocasión difícil. No perdió de vista al balón y su técnica en la volea fue increíble".