Lamine Yamal: Informes de la Liga

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En el Barcelona están más que acostumbrados a que jóvenes jugadores de la academia den el salto al primer equipo. Sin embargo, ninguno con la precocidad de Lamine Yamal. Con solo 15 años, disputó su primer partido de en La Liga con la camiseta azulgrana el 29 de abril de 2023. Pero ese primer impacto no quedó solo ahí, ya que se ha consolidado en el primer equipo bajo la confianza de Xavi Hernández.

“Mis expectativas son muy grandes. Es titular no por capricho del entrenador. Su toma de decisión casi siempre es la correcta. Es inteligente. Es extraordinario. Espero que esté muchos años en el Barça”, ha destacado el técnico azulgrana. Yamal ha batido además otro récord de precocidad, ya que con los 16 años y 57 días se convirtió en el jugador más joven en debutar con España, además también de marcar un gol. 

Como también ha señalado Xavi, “Yamal puede marcar una época. Pero con tranquilidad”. Nuestros entrenadores, de momento, analizan sus cualidades y en qué facetas puede evolucionar.

Análisis técnico

Extremo zurdo, Yamal es un jugador que destaca por su capacidad técnica, control del balón, talento futbolístico y atrevimiento en todas sus acciones. Virtudes que le hacen manejar gran variedad de situaciones ofensivas, potenciando a su vez el ataque de sus equipos.

Con balón, se muestra siempre como una amenaza constante para los defensores rivales que se enfrentan a él, partiendo desde el extremo derecho a pierna cambiada. Un espacio, el carril derecho, donde muestra su mejor versión para generar continuos desequilibrios sobre los dispositivos defensivos del equipo contrario. Eso le ha convertido en protagonista en las acciones de ataque del Barcelona, siempre como receptor escorado en la banda.

A nivel general, la filosofía de juego que propone Xavi Henández, acumulando centrocampistas por dentro para asegurar la posesión y, a la vez, generar situaciones de uno contra uno por fuera, potencia las mejores virtudes de Yamal (abajo). Es decir, facilidades para generar desequilibrio, pero también para la toma de decisiones, ya sea un pase filtrado o la finalización.

Principales detalles como extremo derecho

Yamal cuenta con un amplio repertorio de recursos técnico-tácticos que le hacen ser diferencial en el último tercio de juego en la posición de extremo derecho. Desde ahí, puede mostrarse como facilitador de asistencias, marcar goles o también generar segundas acciones que puedan resolverse dentro del área rival.

Su ambición y descaro no lo convierte en un jugador individualista. Al contrario, Yamal muestra una gran madurez para interpretar qué demanda la acción en cada momento. Así, puede optar igualmente por una conducción temporizada desde la banda para atraer a varios defensores, lo que genera desequilibrios en la zona de remate para los compañeros que llegan desde segunda línea. 

Otra característica de Yamal es su habilidad para adquirir responsabilidades dentro de su equipo. A pesar de ser un jugador con un desequilibrio exponencial, también destaca por su capacidad para realizar y ofrecer combinaciones con compañeros cercanos u optar por pases o centros en profundidad al área rival (abajo).

Contragolpes o espacios reducidos
El extremo del Barça es un jugador relevante en los contragolpes a través de sus movimientos sin balón, ya sea atacando el espacio en profundidad o atrayendo a los defensores rivales para liberar a los compañeros que se suman a las acciones de contragolpe. Si el esférico llega a sus pies, Yamal puede ejercer de asistente o finalizador de la jugada.

Si hablamos de su juego en los últimos metros, y por lo tanto en zonas más congestionadas, es un jugador que aprovecha el más mínimo espacio para armar el tiro a gol. Antes de golpear, atrae a su rival tras una liguera conducción con el empeine de su pierna izquierda, acción que le hace ganar amplitud de opciones en su posterior tiro.

Conducción de balón

Yamal generalmente lleva el balón pegado a su pie izquierdo. Lo hace con pequeños toques para buscar el desequilibrio principalmente en zona interior. Una gran calidad técnica también presente en su posición corporal a la hora de tener el balón en su poder.

Es un jugador que conduce siempre con la cabeza levantada en todo momento, con el objetivo de valorar todas las opciones posibles y tener la mayor información posible de todo lo que pasa a su alrededor. Esto le permite tomar la mejor decisión a su disposición. Esta virtud de reconocer qué ocurre a su alrededor en las acciones con balón, le convierten también en un jugador de alto valor colectivo, ya que facilita las acciones de sus compañeros.

En resumen, podemos decir que Yamal es un gran solista con balón, pero también un buen director de orquesta. Faceta, esta última, nada habitual para un chico tan joven.

Apartado táctico

Le gusta intervenir en fase de ataque después de que lo hayan hecho antes los centrocampistas. Sin embargo, esto no quiere decir que tenga menor participación en el juego. Al contrario, es toda una virtud, ya que sabe elegir el contexto de juego que le es más favorable para que sus intervenciones tengan un efecto mayor.

Por otro lado, y aunque es un muy joven y, por ende, todavía con un amplio margen de mejora en la lectura táctica de sus acciones, Yamal tiene la capacidad de adaptarse a cualquiera de los sistemas o variantes tácticas en las que el juego exterior sea relevante en campo rival. Una flexibilidad también posicional, ya que puede ser utilizado como extremo izquierdo —jugando a favor de pie dominante—, o incluso como delantero, como así hizo en ocasiones en la cantera del Barça.

Una posición, la de '9', en la que sus regates vertiginosos en zona de finalización le hicieron marcar diferencias. Sin embargo, las demandas físicas que exige la alta competición para jugar como referencia arriba, hacen que Yamal necesite crecer físicamente pueda tener un papel relevante en esta posición.

Por ahora, su juego tiene más peso y verticalidad en la banda derecha, donde no tiene que pelear cuerpo a cuerpo con los defensores rivales.

¿En qué puede evolucionar?

Todo lo señalado nos hace ver que estamos ante un gran talento en ataque. El siguiente paso para Yamal será reconocer en qué y cómo puede seguir creciendo.

Una de las acciones en las que puede crecer —y que le harían un jugador más decisivo—, son las conducciones diagonales interiores desde su posición extremo derecho. Esto le permitiría aprovechar mejor los desmarques de ruptura de sus compañeros en ataque, para buscar después asociaciones interiores verticales que le faciliten disparar desde la frontal.

No obstante, donde Yamal tiene mayor margen de mejora es en la parte defensiva. En ocasiones, cuando su equipo ejecuta la primera presión sobre el rival, deja un espacio libre al no interpretar correctamente si debe ubicarse sobre ese espacio, y así cerrar el camino al rival, o fijar al receptor más cercano. Esta duda facilita al equipo contrario ganarle la espalda mediante cambios de orientación. Esas, posteriormente. se convierten en situaciones de superioridad numérica del rival sobre el lateral (abajo).

No obstante, estas carencias defensivas son más propias de su juventud que de su solidaridad defensiva, porque Yamal no rehúye el trabajo sin balón.

En definitiva, no cabe duda de que estamos ante un talento de dimensiones desconocidas. Algunos lo comparan con Lionel Messi en sus inicios. Mientras, otros tienen temores de que sea encumbrado demasiado pronto y que, al final, su carrera no sea tan prometedora como todo apunta.

Por ahora, y como han señalado nuestros expertos, estamos ante un exuberante talento capaz de ser decisivo en el Barcelona con solo 16 años. Algo que, sin duda, es muy difícil de conseguir.

Puedes conocer a más jugadores y su juego en The Coaches' Voice Análisis/Jugadores.

Redacción: The Coaches' Voice en español