La Liga, 9 de mayo 2021
Asensio (67)
Hazard (90+4)
Fernando (22)
Rakitic (78, pen)
La pelea por conquistar la Liga se mantiene igual después del empate entre Real Madrid y Sevilla, que no pudieron aprovechar el también resultado igualado entre Barcelona y Atlético de Madrid. El Sevilla se adelantó en el marcador en la primera mitad por medio de Fernando en una acción de estrategia del equipo de Julen Lopetegui. Un tanto que reflejaba el dominio del conjunto andaluz en el primer acto, donde el Real Madrid solo se mostró en ataque con peligro en un gol anulado a Karim Benzema.
Muy distinto a lo que ocurrió en los restantes 45 minutos, con un Real Madrid obligado a buscar la remontada y el liderato de la Liga. Marco Asensio logró el gol del empate, para entrar el partido entonces en fase de continuas incidencias, con un gol de penalti del Sevilla de Ivan Rakitic –una acción revisada por el VAR previa a un aparente penalti sobre Karim Benzema- y el tanto de Eden Hazard en los últimos instantes.
17 / 7
DISPAROS / A PUERTA
7 / 3
59 %
Posesión
41 %
619 / 557
Pases / Completados
446 / 379
8 / 2 / 0
Faltas / Amarilla / Roja
8 / 1 / 0
Zinedine Zidane apostó por un 4-3-3 en fase ofensiva con Casemiro ejerciendo de pivote defensivo en mediocampo y Karim Benzema como principal referencia ofensiva. Desde los primeros minutos de partido el Real Madrid buscó desarrollar ataques rápidos, donde Vinícius Júnior trató de aislar al lateral derecho del Sevilla, Jesús Navas, para utilizar su velocidad y manejo de balón con espacios. Desde ahí, buscaría después penetrar por espacios interiores para optar por opción de disparo a puerta.
Salida de balón:
Mientras tanto, los centrocampistas Luka Modric y Toni Kroos se incrustaban entre los centrales y laterales del Sevilla para facilitar la salida de balón (abajo). Cuando el esférico lo tenía uno de los centrales, Éder Militão o Nacho, los interiores caían atrás en posiciones abiertas, habilitando la oportunidad para que los laterales del Real Madrid, Marcelo en la izquierda y Álvaro Odriozola en la derecha, pudieran avanzar. Este desarrollo llevó a la asistencia de Odriozola a Benzema en un gol que terminó anulado por fuera de juego del jugador francés.
El trabajo de Ocampos:
El Sevilla se protegió en fase defensiva sobre un 4-5-1 (abajo), en un desarrollo similar al del Real Madrid, con los extremos Lucas Ocampos y Suso descolgándose a posiciones más retrasadas para apoyar al mediocampo. Ocampos, en particular, destacó en tareas defensivas, intentando cortar el acceso del Real Madrid de zonas interiores a banda, como también buscando cortar el pase entre líneas de central a lateral o lateral y extremo. Si el equipo de Lopetegui defendía en bloque bajo, ocasionalmente variaba a un 5-4-1 para proteger más la zona central y obligar al Real Madrid a buscar otra vía de acceso.
Combinar por fuera fue una importante estrategia del Real Madrid en los momentos de ataque, especialmente en el perfil izquierdo con la sociedad entre Marcelo y Vinícius, operando ambos jugadores en diferentes líneas. Cuando Marcelo avanzaba con balón por el pasillo interior, Vinícus se desplazaba por fuera, habilitando al Real Madrid a ocupar más espacio en amplitud y generar ventajas numéricas ante la línea defensiva del Sevilla. Esta no fue la única estrategia del equipo de Zidane, que también buscó conectar con Benzema desde la línea defensiva de manera directa, manteniendo el francés el balón en los espacios intermedios (abajo).
Movilidad:
El equipo de Zidane demostró fluidez y flexibilidad en su juego posicional. Así, los jugadores no estaban limitados a sus posiciones tradicionales, con Benzema desplazándose por fuera y Nacho ocupando los pasillos interiores en fase de posesión. Esta flexibilidad brindó al Real Madrid la oportunidad de desarrollar un estilo de juego combinativo, en lugar de estar limitado por las capacidades individuales de sus jugadores.
En relación a ese juego combinativo ante el bloque defensivo del Sevilla, el conjunto blanco mantuvo a los laterales Marcelo y Odriozola en posiciones altas y abiertas. Los centrocampistas Kroos, Casemiro y Modric, mientras tanto, trataron de progresar en los pasillos exteriores, pero también se ofrecían como línea de pase en caso de que la acción ofensiva fuera cortada por el Sevilla. Durante la segunda mitad, el Real Madrid buscó explotar los espacios entre los centrales y laterales del equipo visitante, deslizando el balón a través de los espacios antes de que el equipo de Lopetegui pudiera replegarse (abajo). Esta estrategia dio lugar al primer gol de los locales, marcado por el suplente Asensio.
Kroos toma el mando:
En los últimos minutos y con desventaja en el marcador, los de Zidane buscaron llegar a la portería rival con más urgencia. Kroos pidió el balón a los centrales para desarrollar el ataque y trató de jugar hacia adelante directamente en conducción o con pases de mediocampo a banda. De este modo, el internacional alemán se convirtió en el principal generador de juego de ataque del Real Madrid ante un Sevilla que retrasó aún más a sus jugadores, formando en ocasiones en un 6-3-1 en bloque bajo que, sin embargo, no impidió el gol del empate del equipo anfitrión.
En fase ofensiva, el Sevilla, sobre un 4-3-3 (arriba), buscó priorizar sus ataques por el lado izquierdo del campo durante los primeros compases del partido, con el lateral izquierdo Marcos Acuña jugando en una posición avanzada y combinando con Ocampos para intentar generar ventajas numéricas por fuera (abajo). Paciente en la gestión del balón, el Sevilla buscaba mantener una posesión de calidad si no podía avanzar, utilizando a Fernando como eje, siempre en una posición retrasada y abierta para habilitar líneas de pases claras.
El Sevilla buscaba constantemente cambiar el punto de ataque a través de sus jugadores centrales, minimizando las distancias de pase y asegurando largos períodos de posesión.
En los momentos sin balón, el Real Madrid se replegó sobre un 4-5-1, dejando a Benzema como la salida de ataque más avanzada, y a los extremos, Fede Valverde y Vinícius, a la misma altura que los jugadores de mediocampo (abajo). Benzema se desplazaba a través de la línea para crear una salida hacia adelante, en lugar de permanecer en una zona central. Si intentaba recuperar el balón rápidamente, especialmente en campo rival, el Real Madrid desplegaba una presión alta, con el objetivo de ganar el balón antes de que el Sevilla se organizara eficazmente.
Dos vías de ataque:
El delantero centro del Sevilla, Alejandro Gómez, buscaba caer en zonas centrales para recibir el balón directamente de los laterales o de los jugadores del centro del campo, provocando el movimiento hacia delante de Suso y Ocampos. En los primeros minutos del segundo tiempo, el Sevilla pasó períodos prolongados del juego fuera de la posesión y demostró altos niveles de concentración y autodisciplina en fase defensiva. Cuando recuperaba el balón, el equipo de Lopetegui optó por lanzarse en ataque a través de transiciones (abajo), generalmente por fuera y antes de que el Real Madrid pudiera reorganizarse, algo que no llegaron a conseguir debido al esfuerzo de los jugadores de Zidane en el repliegue defensivo.
El Sevilla buscó cambiar la orientación del juego para atacar el espacio generado en el otro perfil en el desarrollo de su juego. Los centrocampistas centrales, Fernando y Jordán, combinaban por dentro y en distancias cortas en el lado izquierdo del campo, atrayendo el balance defensivo del Real Madrid hacia ese costado para encontrar el momento oportuno de buscar el cambio de juego a la derecha, donde Navas y Suso intentaban atacar el espacio que se había generado.
Con la posesión limitada en los últimos minutos y buscando proteger la ventaja en el marcador después de su segundo gol, el Sevilla ofreció poca amenaza de ataque. Todos los jugadores formaron por detrás de la línea de pase, una situación que provocó que el equipo de Lopetegui tuviera muy pocas opciones de avanzar después de recuperación como para generar alguna opción de ataque.
"Arrancamos con un partido difícil, después del gol fue un poco diferente. Nosotros estuvimos mucho mejor en la segunda parte y nos merecimos una victoria con el partido que hicimos", analizó Zidane. El entrenador del Real Madrid también valoró el penalti de Militão: "No me ha convencido lo que me han dicho (en relación al árbitro). Hoy sí que estoy enfadado. Me tendrán que explicar las reglas de las manos o algo porque si hay mano, también hay una antes de ellos".
"La mentalidad de los chicos ha sido importante. Estoy muy triste por ellos. Después del año que llevamos pues terminar ganando aquí hubiese sido muy importante", señaló Lopetegui. "Tengo la opinión de que es un penalti claro porque la han pitado. La realidad es que no te puedo asegurar en qué circunstancias son penaltis las manos. A nosotros nos pasó la semana pasada y no se nos pitó", explicó sobre el penalti.