Análisis
Análisis táctico: PSG 2 Manchester City 0
Getty Images
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CHAMPIONS LEAGUE 2021/22 GRUPO a 28 DE SEPTIEMBRE 2021
Gueye (8)
Messi (74)
El PSG resultó vencedor ante el Manchester City en una cita que medía las fuerzas de dos grandes aspirantes a conquistar la Champions League. Pep Guardiola había señalado en la previa del partido su temor ante el tridente del equipo parisino formado por Kylian Mbappé, Neymar y Lionel Messi. Sin embargo, el autor del primer tanto no fue ninguno de ellos, sino Idrissa Gueye, quien finalizó con acierto una jugada combinativa de los locales por banda derecha.
El segundo tanto lo firmó Messi, su primer gol con la camiseta del PSG. El argentino combinó con Mbappé al borde del área para mandar el balón a la escuadra de la portería del Manchester City. El PSG disfrutó así de la primera gran noche europea de su tridente.
5025352627217103031231427162017726106/3
DISPAROS / A PUERTA
18/7
45%
POSESIÓN
55%
469/403
PASES / COMPLETADOS
533/474
8/1/0
FALTAS / AMARILLA / ROJA
12/2/0
Fase de posesión: PSG
El PSG se estructuró sobre un 4-3-3 frente a un rival que defendía con un 4-2-3-1. Sin balón, Bernardo Silva se posicionó al lado de Rodri para formar un doble pivote en el equipo visitante, mientras Kevin De Bruyne era el encargado de saltar a la presión hacia el único pivote del PSG, Marco Verratti.
Los tres delanteros locales, Kylian Mbappé, Neymar y Lionel Messi, mostraron tendencia a desplazarse hacia banda en el desarrollo de la fase combinativa para estirar las líneas del City, buscando después los espacios interiores una vez que el centro del campo del PSG había superado la presión rival.
Los laterales, Achraf Hakimi y Nuno Mendes, se lanzaron al ataque una vez que Neymar y Messi se habían desplazado hacia el interior, y la delantera del PSG se movió con mucha fluidez, intercambiando posiciones constantemente. El equipo de Mauricio Pochettino se adelantó en el marcador a través de la sociedad por banda de derecha de Mbappé, Messi y Hakimi, finalizando Idrissa Gueye con acierto un centro al área.
El compacto centro del campo del PSG mantuvo su estructura y, al hacerlo, habilitó espacios entre las líneas para que cualquiera de los jugadores de ataque se descolgara para recibir el balón. Messi buscó recibir en corto al pie, desplazándose por el perfil derecho para hacerlo. Mbappé y Messi intercambiaron sus posiciones con regularidad, y el lateral derecho Hakimi se adelantó mucho más que Mendes por la banda izquierda, mientras que Neymar mantuvo su posición de salida en alto por ese lado.
Como los dos interiores, Gueye y Ander Herrera, rara vez se alejaban de Verratti, Messi o Mbappé se dejaban caer en diagonal al espacio entre líneas para recibir. Esta firme posición en el centro del campo también proporcionó una sólida armadura contra los contraataques del City, que tuvo dificultades para penetrar por el centro tras lograr una recuperación del centro del campo, viéndose obligado a menudo a jugar hacia atrás.
Una vez que el equipo de Guardiola se vio en desventaja, empezó a dominar el balón, y el PSG tuvo pocas oportunidades de atacar. Los locales retrasaron su bloque buscando encontrar a sus atacantes con balones en las bandas. Sin embargo, estas rápidas rupturas dejaron aislados a sus tres delanteros y les costó establecer la posesión en la mitad del campo. João Cancelo, Kyle Walker y Rodri realizaron un gran trabajo para el City a la hora de limitar la recuperación del balón en las zonas centrales.
Con el PSG obligado a atacar alrededor del bloque rival, los jugadores centrales del City podían recuperar su posición. Debido a la velocidad de Walker por la banda derecha, los contraataques más efectivos del PSG se producían por la banda contraria. En las pocas ocasiones en las que el PSG conseguía salir de la presión del City y mantener el balón el tiempo suficiente como para adelantar líneas, se apoyaba después en sus tres delanteros para generar ventajas numéricas.
En una de esas situaciones, Messi dobló la ventaja del PSG con un extraordinario remate en una acción aislada en el segundo tiempo. El PSG logró alejar el balón de la presión central del City y Messi condujo hacia adelante para combinar con Mbappé y finalizar después.
Fase de posesión: Manchester City
El Manchester City, bajo un 4-3-3 en los momentos con balón, buscó superar el 4-3-3 en defensa del PSG. Con la primera línea local muy estrecha en su fase defensiva, los visitantes avanzaron por bandas, encontrando con frecuencia a los extremos, Jack Grealish y Riyad Mahrez. A menudo, esto se debía a que los centrales del City se desentendían del lateral para jugar directamente con la línea de ataque. Los dos interiores -Kevin De Bruyne por la izquierda y Bernardo Silva por la derecha- se lanzaban por los pasillos interiores mientras los laterales del PSG se alejaban de los centrales para presionar a los laterales del City. Aunque esto generaba espacios en la zaga del PSG temporalmente, la estructura y el posicionamiento de los tres centrales locales dificultaban el acceso a esos espacios. Además, gestionaron con acierto las segundas jugadas.
Cuando el PSG se replegaba en un bloque inferior, el City seguía construyendo su juego de ataque por bandas, pero las carreras de apoyo provenían de los laterales, Walker y Cancelo, quienes variaban si se solapaban o no. En respuesta, el centrocampista central más cercano del PSG se desplazó más por fuera para apoyar al lateral en ese lado del campo. Esto acabó creando más espacio para De Bruyne y Silva, ya que el City encontró una ventaja numérica en el centro del campo.
Desde el espacio que empezaba a encontrar, De Bruyne lanzó un excelente centro que Sterling cabeceó al larguero, antes de que Silva perdiera una gran oportunidad bajo los palos. El City continuó amenazando desde las bandas, sin embargo le faltó acierto cuando creo nuevas ocasiones.
El PSG continuó empujando a su interior más cercano para presionar el juego de posición del City, y De Bruyne y Silva realizaron carreras en profundidad hacia adelante. Grealish y Silva también intercambiaban su posición en la banda izquierda del City ejecutando carreras a la espalda de la defensa rival, con De Bruyne operando entonces en el lado derecho. Esto se ajustaba mejor a su capacidad para buscar el centro, sintiéndose más cómodo haciendo carreras más allá del delantero centro, Raheem Sterling, por la derecha. De Bruyne también se colocó en una buena posición de disparo por la derecha en varias ocasiones, pero no pudo batir a Gianluigi Donnarumma.
Al final, los visitantes, a pesar de dominar la posesión del balón y generar varias ocasiones claras mediante movimientos bien coreografiados, fueron incapaces de superar el bloque bajo del PSG.
Entrenadores:
"Estoy contento porque el equipo supo dominar las fases del juego donde estaba bajo presión. Supimos sufrir cuando el Manchester City nos dominaba, y el equipo hacía el trabajo en conjunto", analizó Mauricio Pochettino. "La verdad es que no suelo gritar mucho los goles, pero este sí lo celebré. Es que estaba tan acostumbrado a verlo marcar a Leo como rival, que ahora tenerlo de mi lado es especial y debía festejar", añadió sobre el tanto de Messi.
"Tienen jugadores de calidad, intentamos que Neymar y Messi entrasen poco en contacto con la pelota y que Mbappé no tuviera espacios a la espalda de nuestra defensa, pero al final perdimos 2-0. En los últimos diez minutos estuvimos más desesperados y tuvimos menos control", señaló Guardiola. "Sabemos que es imposible controlar a Messi durante 90 minutos. Está claro que venía de una lesión, por eso necesitaba un poco de ritmo. Pero sabemos bastante bien que cuando puede correr y conducir con la pelota es imparable", destacó el entrenador del Manchester City.
Redacción: Héctor Riazuelo
