¿Qué es la formación W-M?
La formación W-M fue la primera que se utilizó en el fútbol del siglo XX. Su versión más clásica consistía en cuatro líneas o unidades, con una defensa de tres jugadores y dos mediocentros. Por delante, dos centrocampistas apoyaban una línea de ataque de tres, generando así un dibujo en 3-2-2-3.
¿Dónde se origina la formación W-M?
El término W-M viene de la forma que surge cuando dibujas la línea que conecta a los tres defensores con los dos mediocentros y estos con los tres delanteros y los dos centrocampistas interiores. Así, una parece una W y la otra, una M. Una estructura que toma mayor protagonismo a partir del momento en que la Asociación de Fútbol de Inglaterra cambió la regla del fuera de juego.
Un nuevo dictamen que redujo a dos los rivales -el defensor más el portero- entre la línea de gol y el balón para que el atacante esté en posición correcta, al contrario de tres jugadores de antes. La formación W-M agregó otro defensor para tratar de contrarrestar esta nueva superioridad numérica en el ataque.
El cambio a esta formación W-M también ayudó a los equipos a lidiar con los tres atacantes interiores del sistema 2-3-5. Una estructura en forma de pirámide que fue la formación estándar a principios del siglo XX.
¿Cómo se utiliza la formación W-M en el fútbol moderno?
Los equipos ya no forman en la actualidad con la versión tradicional de la W-M, pero muchos implementan una versión moderna de esta formación en fase de posesión. Esto es más común en la formación 3-4-3, cuando los dos carrileros suben y los dos mediapuntas se descuelgan lejos del delantero y a zonas del mediocampo.
Otra versión de la W-M también se puede formar a partir de un 4-3-3 cuando la línea defensiva de cuatro pasa a ser de tres jugadores. En este caso, uno de los laterales se mueve hacia el mediocampo para formar un doble pivote. Los dos interiores luego avanzan para apoyar a los tres delanteros, generando así una formación 3-2-2-3.
La principal razón por la cual los equipos de la actualidad utilizan la W-M es para establecer una estructura que pueda proporcionar cobertura y protección adecuadas contra los contraataques rivales, sin que esto disminuya la calidad del juego, el posicionamiento o la posesión en fase de ataque.
¿Cuáles entrenadores utilizaron la formación W-M?
Herbert Chapman, Arsenal
Aunque no es necesariamente el inventor de la formación W-M, se considera que Herbert Chapman (arriba) y su Arsenal de la década de 1930 fueron los más efectivos en el uso de la primera versión del sistema. Al posicionar al mediocentro en el 2-3-5 entre los dos laterales se generó una línea de defensiva de tres, con los dos medios en posiciones interiores por delante de ellos. La pareja de interiores se retrasó ligeramente, apoyando a tres delanteros. Este equipo fue particularmente efectivo y tuvo mucho éxito con Chapman. Ganaron la Copa FA en 1930, antes de llevarse la corona de la entonces denominada First Division tanto en la temporada 1930/31 como en la 1932/33.
Pep Guardiola en el Manchester City y Bayern Múnich
Con el Bayern, Phillip Lahm se movía hacia dentro desde su posición de lateral, generando un doble pivote y una línea de tres atrás. En el City, João Cancelo y Oleksandr Zinchenko se mueven de manera similar. En el Bayern, Guardiola a veces adelantaba a ambos laterales para cumplir roles de pivote en mediocampo. El pivote único en su 4-3-3 –generalmente Toni Kroos– se descolgaba hacia la línea de fondo para incrustarse entre los centrales y formar una línea de tres (arriba).
En el City, Guardiola también ha utilizado a un mediocampista –generalmente Fernandinho– como central en una línea defensiva de cuatro, con el brasileño adelantando su posición para convertirse en un segundo pivote durante la construcción del juego (abajo). A su vez, ambos laterales permanecen en la línea de fondo para formar una zaga de tres.
Thomas Tuchel en el Chelsea
La formación inicial de Tuchel, un 3-4-3, a menudo varía a una estructura de W-M en los momentos sin balón. Esto debido a que los laterales, Reece James, César Azpilicueta, Marcos Alonso o Ben Chilwell, presionan muy arriba, a menudo incluso por delante del centrodelantero. Mason Mount, Hakim Ziyech y Kai Havertz han funcionado como interiores por delante del doble pivote (abajo). A diferencia de los equipos de Guardiola, el Chelsea de Tuchel no necesita intercambiar las posiciones para formar la línea defensiva de tres hombres de la W-M, y los tres centrales simplemente permanecen en su lugar.
Roberto Martínez en la selección de Bélgica
Martínez también utilizó una estructura 3-4-3 similar a la de Tuchel, tanto en la Copa del Mundo del 2018, como en la Eurocopa del 2020. Dos mediapuntas interiores, generalmente elegidos entre Eden Hazard, Kevin De Bruyne o Dries Mertens; apoyando a Romelu Lukaku. Los dos mediapuntas a menudo suelen presionar alto para apoyar a Lukaku cuando recibe el balón, llegando hasta último tercio de campo para habilitar líneas de pase por detrás de él. A la par, los laterales retroceden hacia el balón, adaptando ligeramente la estructura de la línea frontal en forma de W-M.
¿Cuáles son los beneficios de la formación W-M?
La versión moderna de la W-M ayuda a generar ventajas numéricas frente a dos o tres mediocampistas centrales, con un cuadrado de cuatro jugadores en el medio del campo. Más adelante, la línea de tres atacantes puede anular una línea de cuatro en el fondo, tratándose de un desarrollo que siempre genera superioridades en diferentes zonas.
Tanto desde el 4-3-3, como desde el 3-4-3, se necesitan pocos movimientos para pasar a una W-M. Así, son menos los ajustes que se deben hacer durante las transiciones defensivas. Una W-M también provee cobertura en las áreas y protección contra los contragolpes, sin afectar demasiado las estructuras ofensivas.
¿Cuáles son las desventajas de la formación W-M?
La W-M requiere que varios jugadores desarrollen diferentes roles en ambas fases del juego, a menudo en diferentes líneas o en diferentes zonas del campo. Como resultado, exige jugadores extremadamente versátiles. Habitualmente requiere de muchos pases para establecer un control total de la posesión y permitir que el resto de jugadores puedan reposicionarse. Si los pases fallan, el equipo queda vulnerable a los contraataques.
La formación también deja los costados más vulnerables a los contraataques antes de volver a ocupar la forma defensiva original.
¿Cómo cambia una W-M con y sin balón?
La idea de la W-M moderna en fase de posesión es generar triángulos y rombos de conexión entre los compañeros de equipo. Esto a su vez crea líneas de pase diagonales para avanzar. Los jugadores que están más arriba y hacia los costados, extremos o carrileros, tienen como tarea ensanchar el campo tanto como sea posible y recibir en el espacio, o separar a la defensa del rival para crear un espacio central en el que otros puedan recibir.
En el juego moderno, es común que los equipos ataquen con cinco jugadores a lo ancho del campo. La W-M provee las bases perfectas para ello, ya que los extremos y los carrileros presionan alto para unirse al delantero centro.
Llevar tantos jugadores por delante de la línea de pase también significa que muchos rivales están en una buena posición para contraatacar si se pierde el balón. Los mediocampistas ofensivos pueden unirse para poblar los espacios centrales en las transiciones defensivas, mientras que los tres delanteros a menudo presionan agresivamente.
Sin balón, los equipos ya no usan la forma W-M como solían hacerlo. En cambio, se convierten en una línea de cuatro o cinco defensas a través de los defensores que se repliegan.
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