premier league, 15 de febrero de 2023
Saka (42, pen)
De Bruyne (24)
Grealish (72)
Haaland (82)
El Manchester City le arrebató al Arsenal el liderato de la Premier League tras imponerse en el Emirates Stadium en un crucial duelo por el título. El City acudió al norte de Londres sabiendo que si no ganaba dejaría al equipo de Mikel Arteta con una ventaja considerable para remontar en la tabla. Sin embargo, los vigentes campeones demostraron que no van a ceder en la lucha por el título y se llevaron unos valiosos tres puntos.
Los visitantes se pusieron arriba en el minuto 24 tras un mal pase hacia atrás de Takehiro Tomiyasu aprovechado por Kevin de Bruyne para batir al guardameta del Arsenal Aaron Ramsdale. Sin embargo, el Arsenal igualó merecidamente antes del descanso con un penal anotado por Bukayo Saka tras una falta del guardameta del City Ederson sobre Eddie Nketiah.
El City fue mejor tras el descanso y se adelantó luego de que Gabriel perdiera el balón para que Bernardo Silva y Haaland habilitaran a Jack Grealish, autor del tanto. La estocada final la colocó Haaland para poner al City líder por diferencia de goles, habiendo jugado un partido más que el Arsenal.
El técnico del City, Pep Guardiola, admitió después que su experimento de la primera parte con Bernardo Silva como lateral izquierdo no había funcionado, y optó por cambiar las cosas en el descanso. "Probé algo nuevo (al principio) y fue horrible. En la segunda parte fuimos más como somos. Nos costó mucho controlarlo, por eso sufrimos y ellos fueron mucho mejores, pero en la segunda parte estuvimos a la altura".
Por su parte, Mikel Arteta, entrenador del Arsenal, lamentó las ocasiones perdidas y los errores defensivos de su equipo. "Es excepcionalmente difícil jugar al nivel que te exige (el City) para tener opciones de ganar", dijo. "Creo que en muchos momentos lo hicimos y las tuvimos, pero si regalas tres goles como lo hicimos y no materializas las grandes ocasiones que tuvimos, el margen de error es casi nulo", añadió Arteta.
Las claves tácticas
Arsenal
Interiores por fuera
El Arsenal comenzó con un dibujo 4-3-3, que rápidamente fue adaptado a un 3-4-3 en los primeros compases, con sus interiores, Martin Ødegaard y Granit Xhaka jugando más abiertos (abajo). Oleksandr Zinchenko pasó de ocupar el lateral izquierdo a unirse a Jorginho en el centro del campo, creando así un doble pivote, y los extremos, Bukayo Saka y Gabriel Martinelli, se desplegaron por dentro para crear una superioridad de cuatro contra tres en el centro del campo. Como resultado, el esquema defensivo 4-3-3 del Manchester City lució un poco confuso, con Bernardo Silva -utilizado de inicio como lateral izquierdo- marcando a Ødegaard en lugar de a Saka. En un comienzo de partido relativamente igualado, los momentos individuales o las acciones de calidad fueron lo único que permitió a ambos equipos conseguir avances.
Dibujo 4-3-3
El Arsenal volvió pronto a su estructura 4-3-3, que le ayudó a dominar el balón y penetrar con regularidad en el campo del City. Jorginho se situó más hacia la derecha, con Ødegaard y Xhaka ahora más en el centro. El espacio entre los tres centrocampistas y los extremos de los visitantes fue aprovechado por los incisivos pases hacia delante de los defensas del Arsenal (abajo), lo que permitió a los locales conectar con sus extremos, que luego buscaron a los interiores entre líneas, con Saka en particular teniendo más oportunidades de recibir y superar a Silva. Cuando el Arsenal trabajaba el balón de derecha a izquierda a través de Jorginho, Zinchenko se metía en posiciones peligrosas para centrar en el último tercio, con las carreras por el centro de Eddie Nketiah, Xhaka y Martinelli generando amenaza en el área contraria.
Presión alta del City
Un cambio de dibujo del equipo visitante significó entonces que Kevin De Bruyne saltara hacia adelante para unirse a Erling Haaland como pareja de primera línea cuando el City presionaba alto.
Haaland, por lo tanto, arrancaba ligeramente hacia la izquierda, animando a que el balón se dirigiera hacia la banda izquierda del Arsenal. Silva, ahora en el centro del campo, presionaba entonces a Zinchenko, y los dos delanteros del City presionaban a los centrales del Arsenal (abajo). El City solía dejar libre al interior del lado opuesto del Arsenal, normalmente Ødegaard, con Jorginho y Xhaka cubiertos, pero al Arsenal le costaba acceder a su hombre de recambio.
Intercambios en la banda
Leandro Trossard sustituyó a Martinelli en la banda izquierda del Arsenal, y los intercambios de posiciones de los anfitriones pasaron a ser clave. Saka mantuvo la amplitud durante más tiempo por la derecha del Arsenal. Allí estaba a la espera del desdoblamiento retrasado de Takehiro Tomiyasu, y Ødegaard fue un eslabón clave entre líneas. En la izquierda del Arsenal, mientras tanto, Zinchenko se adelantaba antes, tanto incursionando por dentro para presionar a Xhaka más arriba, como desdoblándose por fuera. Especialmente cuando Trossard se movía hacia dentro (abajo). Estos intercambios ayudaron al Arsenal a sortear la presión de los visitantes y a progresar hacia delante, y creó algunas ocasiones muy buenas, pero al final el equipo londinense pagó por no haber sabido materializarlas.
Manchester City
3-4-3 cuadrado
Cuando tuvo la posesión, el Manchester City se plantó en un 3-4-3 con un mediocampo central en cuadrado. Silva, que defendía en el lateral izquierdo, se movió hacia dentro junto a Rodri para crear un doble pivote. De Bruyne e Ilkay Gündogan atacaron entonces como mediapuntas por dentro de los laterales Mahrez y Jack Grealish (abajo).
Como Zinchenko retrocedió para defender las zonas anchas -tras haber pasado al centro del campo cuando el Arsenal tenía el balón-, el City pudo explotar entonces una superioridad en el centro del campo, y obligó a Nketiah a retroceder, lo que a su vez redujo la eficacia con la que los anfitriones podían presionar.
Uno de los centrales del Arsenal -generalmente Gabriel- saltaba a veces para presionar en el centro del campo, lo que liberaba a Nketiah para presionar más arriba. Haaland se quedaba entonces mano a mano con William Saliba, y se metía en carrera por el pasillo interior derecho del City, ya que los visitantes iban directo a buscarle.
Presión alta del Arsenal
La presión alta del Arsenal obligó al City a jugar mucho más en largo de lo que hubiera deseado. Aunque un balón largo propició el primer gol, éste llegó tras un error individual de Tomiyasu, más que por un plan de juego concreto del equipo visitante. Saliba se mostró cómodo lidiando en el uno contra uno con Haaland, y Gabriel siguió saliendo al centro del campo para hacer frente a la posible superiordad del del City en ese sector del campo. Los locales plantaron cara al City hombre por hombre en todo el campo (abajo), defendiendo con agresividad e intensidad para limitar las salidas en profundidad del equipo visitante.
Cambio de esquema
El City cambió su dibujo en la segunda parte, volviendo a un 4-3-3 cuando tenía la posesión, después de que Manuel Akanji sustituyera a Mahrez. Esto les ayudó a presionar alto y también favoreció sus transiciones tras las recuperaciones en el tercio medio del campo. El City utilizó a los dos interiores en los pasillos por dentro. La posición de De Bruyne, junto con los movimientos más avanzados de Haaland, ayudaron a desestabilizar a la defensa central del Arsenal. Además, Grealish y Silva brindaban apoyo adicional en el ataque. Grealish adelantó a los visitantes tras otra impresionante transición desde el centro del campo por parte del equipo visitante.
La batalla en el centro del campo
Un punto clave de la contienda en la segunda parte fue la eficacia con la que los tres centrocampistas del Manchester City se enfrentaron al contragolpe del Arsenal en las zonas centrales. Cada vez que De Bruyne, Rodri y Gündogan conseguían eludir la presión del Arsenal y llevar el balón al último tercio, el City pasaba a ser una auténtica amenaza. Si uno de los extremos del Arsenal se recuperaba para unirse a este esfuerzo de presión tras pérdida, a menudo recuperaban el balón al generar superioridades en el centro del campo del City.
Esto limitaba temporalmente el suministro a las internadas de Haaland. Pero la calidad del Manchester City se ponía de manifiesto en los momentos en que sus interiores rompían la presión (abajo). Constantemente encontraban el espacio entre los centrales y los laterales del Arsenal para alimentar a Haaland. El noruego demostró su calidad en el área al final del partido para poner el resultado fuera de toda duda.
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