Premier League, 17 de octubre 2020
Keane (19)
Calvert-Lewin (81)
Mané (3)
Mo Salah (72)
Reparto de puntos entre Everton y Liverpool en un partido que tuvo todos los elementos para convertirlo en uno de los mejores derbis de Merseyside de los últimos tiempos. Los Reds, en una salida fulgurante, se adelantaron muy pronto en el marcador por medio de Sadio Mané. Minutos después llegó la peor noticia del partido para los visitantes, con la grave lesión de Virgil Van Dijk, trabado en su rodilla derecha por una entrada de Jordan Pickford. El defensa del Liverpool estará de baja de larga duración por rotura del ligamento cruzado.
El partido continuó con el Everton remontando hasta en dos ocasiones los goles de su rival. Primero Michael Keane ante el mencionado gol de Sané, y en la recta final Daniel Calvert-Lewin para neutralizar el tanto de Mo Salah.
El Liverpool llegó a marcar un tercer gol en el minuto 93, pero la acción fue anulada por un controvertido fuera de juego de Jordan Henderson después de la revisión del VAR. El empate mantiene al Everton líder en la Premier League con 13 puntos en cinco jornadas, tres más que el Liverpool, tercero en la clasificación.
12 / 6
DISPAROS / A PUERTA
20 / 9
45 %
Posesión
55 %
400 / 311
Pases / Completados
543 / 460
15 / 3 / 1
Faltas / Amarilla / Roja
8 / 2 / 0
El Everton formó en 4-3-3 (abajo) en fase ofensiva con Allan, Abdoulaye Doucouré y André Gomes en el medio del campo, mientras James Rodríguez, Richarlison y Dominic Calvert-Lewin fueron los tres atacantes.
Un sistema ofensivo que buscó superar también el 4-3-3 del Liverpool en defensa (abajo), alineando Jürgen Klopp a Trent Alexander-Arnold, Joel Matip, Virgil Van Dijk y Andy Robertson en la zaga. Una estructura completada en el medio del campo por Fabinho, pivote defensivo, y los interiores Thiago Alcántara y Jordan Henderson.
Atrapar al Everton:
Fueron los tres jugadores de ataque, Mo Salah, Roberto Firmino y Sadio Mané, los encargados de iniciar la presión del Liverpool, enfocada en impedir la construcción de juego de su rival. Mané y Salah presionaban la salida por fuera de los centrales Mina y Keane, para obligar al Everton a centralizar su juego. En esta misma secuencia defensiva, Firmino se encargaba de la vigilancia de Allan y los tres centrocampistas Reds se mantenían muy juntos, reduciendo así el espacio del equipo de Carlo Ancelotti para jugar por zonas interiores. Una estructura de presión que buscaba atrapar al Everton y facilitar así la recuperación de balón (abajo).
A pesar de eso, el equipo local confiaba en que sus centrocampistas, Allan, Doucouré y Gomes, fueran capaces de recibir bajo presión dentro de la estructura defensiva del Liverpool y maniobrar con el balón para poder llegar a los laterales libres de marcas. Un aspecto clave del equipo de Ancelotti para mantener a sus laterales liberados fue el trabajo de Richarlison y James, quienes mantenían ocupados a los laterales del Liverpool, evitando así que éstos fueran a la presión sobre sus homólogos del Everton (abajo).
En el primer tiempo, el Everton buscó de manera general pases en largo desde la defensa para las carreras de Dominic Calvert-Lewin (abajo) atacando el espacio, o a Richarlison, buscando el brasileño el primer contacto en el juego aéreo para pelear después el resto de jugadores por la segunda jugada.
Atacar y protegerse:
Inicialmente, los laterales del Everton mostraron una actitud más cautelosa, optando por mantener la línea defensiva con Keane y Mina para evitar el peligro del Liverpool en las transiciones. Fueron los centrocampistas los encargados de dar apoyo a los delanteros en ataque, generando así mejores condiciones de juego para ganar la segunda jugada. Con el paso de los minutos, Digne y Ben Godfrey (entró en sustitución de Coleman) pasaron a adoptar posiciones avanzadas más a menudo, siendo Doucouré y Allan los que retrasaron su posición para evitar el peligro del Liverpool en los contragolpes.
El cambio de posición de James:
Hubo una diferencia en la manera de operar de los dos extremos del Everton en ataque. Si bien ambos buscaban recibir al pie, Richarlison a menudo atacaba el espacio para intentar asociarse después con los jugadores más cercanos, mientras que James Rodríguez intentaba moverse hacia adentro orientado a su perfil izquierdo (su pierna dominante) para cambiar el juego en el espacio entre Alexander-Arnold y Matip u optar por un pase por encima de la defensa para Digne, buscando después el jugador francés el centro al área. Esta acción del internacional colombiano generó dos buenas ocasiones de gol para los locales: un cabezazo de Richarlison al larguero y un centro por abajo de Digne a Calvert-Lewin, quien no conectó el disparo con acierto.
Después de que Doucouré fuera reemplazado por Iwobi, James actuó más por zonas interiores para estar más tiempo en contacto con el balón. A través de este ajuste posicional, el colombiano encontró un pase para Digne por banda, con un centro del jugador francés finalizado en gol Calvert-Lewin. Una acción que tal vez hubiera terminado de otra forma de haber estado Van Dijk sobre el césped. Será interesante saber cómo Klopp repondrá la defensa Red con la lesión de su mejor defensa central.
Donde no evidenció problema alguno el Liverpool fue en ataque, jugando bajo su clásico 4-3-3. Fabinho, Henderson y Thiago en el medio del campo, con Salah, Firmino y Mané en la línea de ataque (arriba). El Everton, al igual que su rival, mantuvo su estructura en ambas fases, jugando también en 4-3-3 (abajo) en defensa, con Seamus Coleman, Yerry Mina, Michael Keane y Lucas Digne en la zaga de cuatro. Un trabajo defensivo al que se sumaron Allan, Doucouré y Gomes en el medio del campo y Rodríguez, Richarlison y Calvert-Lewin en el trabajo de presión en primera línea.
Un patrón de ataque:
El Liverpool buscó construir el juego desde atrás siempre que fuera posible, mostrando un patrón de ataque repetitivo en los primeros minutos de partido para generar dos claras oportunidades, incluido el primer gol. Esto pasaba por la combinación entre Salah y Firmino (desplazándose el brasileño hacia el balón), para buscar después el egipcio el cambio de juego al otro lado. Mané entonces buscaba aprovechar el espacio dejado por el movimiento de arrastre de Firmino, atacando esa zona para recibir el pase de Robertson desde la banda (abajo). Una situación que se hizo más evidente en el perfil izquierdo del Liverpool después del éxito inicial en la derecha, relacionándose en este lado Robertson, Mané y Firmino.
Otras vías de ataque:
El Liverpool continuó tratando de usar este patrón de ataque en el primer tiempo, pero tuvo menos éxito con el paso de los minutos, teniendo que optar por otras vías. Una de ellas era buscar de manera repetitiva generar un duelo individual de Salah con Digne, a menudo jugando directamente hacia el egipcio, quien trataba de evadir la atención de su marcador y avanzar en el juego.
El Liverpool tenía constantemente cinco jugadores en ataque, además de apoyo y seguridad por detrás del balón. Los cinco jugadores habituales arriba fueron Alexander-Arnold, Salah, Firmino, Mané y Robertson, también con un papel más ofensivo de Henderson. El centrocamposta inglés tendía a realizar más carreras de ataque que Alexander-Arnold, siendo protagonista de destacadas acciones de gol, entre ellas el del minuto 93. Un tanto anulado después de la revisión del VAR por un polémico fuera de juego.
Tener cinco jugadores en la primera línea y mantener a Fabinho y Thiago por detrás del balón en el centro llevó a los de Klopp a tener oportunidades de centro desde las bandas y una buena estructura para ganar las segundas jugadas. Precisamente el posicionamiento para esas segundas jugadas también condujo a varias oportunidades de gol para los visitantes, con Henderson, Fabinho y Thiago buscando el disparo desde media distancia después de los rechaces de la defensa del Everton. Salah adelantó al Liverpool 2-1 a través de esta idea.
Cerrar el juego interior:
El Everton varió entre el 4-3-3 y 4-4-2 en fase defensiva con Richarlison, Rodríguez y Gomes uniéndose a Calvert-Lewin en la primera línea de presión en algunos momentos del partido. La presión con dos jugadores en primer línea fue diseñada para forzar al Liverpool a llevar el balón a las bandas, consiguiendo los locales mantenerse compactos en por dentro.
El posicionamiento de los jugadores locales en defensa fue generalmente efectivo, bloqueando de manera general el acceso del Liverpool por zonas interiores a través de ganar los duelos individuales o bloqueos. Un trabajo en defensa que acabó dando el empate al equipo de Ancelotti.
"Aparte del resultado, la actuación fue muy buena. Estoy muy satisfecho", señaló Ancelotti, quien, sin embargo, no pareció quedar contento del todo con el apartado defensivo de su equipo. "Tenemos que defender mejor en determinadas situaciones. Aunque contra el Liverpool es siempre un partido muy difícil en lo defensivo y lo ofensivo". El técnico del Everton, por otro lado, destacó especialmente el tanto del empate: "Fue un gol fantástico por el trabajo en equipo, todo lo habíamos preparado muy bien en el último entrenamiento".
No terminó contento Klopp con la actuación del árbitro en el partido, especialmente por la acción del gol anulado a Henderson. "La temporada pasada el hombro no era fuera de juego. Desde entonces he tenido diez entrevistas y siempre me han dicho que no es fuera de juego eso". "Fue el mejor derbi fuera de casa que jugamos desde que estoy en el Liverpool: un fútbol de primera y goles encajados debido a la fortaleza del Everton en situaciones específicas. En la jugada a balón parado (el 1-1) marcaron cuando Van Dijk no estaba en el campo, así que tenemos que arreglar eso".