¿En qué consiste un lateral moderno?
El lateral moderno es un defensa que juega en uno de los costados en una línea defensiva de cuatro jugadores. Además de su responsabilidad en defensa, también tiene la labor de unirse al ataque y generar ocasiones de gol. Esto lo hace, sobre todo, a través de desdoblamientos por fuera o por dentro del extremo o el volante en mediocampo que juegue en ese costado. La función del lateral moderno es actuar en ambos extremos del campo, apoyando en los ataques y defendiendo casi de igual manera.
¿De dónde viene el término “lateral moderno”?
Los laterales eran originalmente los jugadores más retrasados en el sistema 2-3-5, tan común a principios del siglo 20. Una vez se fue haciendo más popular la defensa con cuatro jugadores, los laterales se desplazaron a los costados. Tradicionalmente, estos jugadores tenían una mentalidad defensiva, aunque había algunas excepciones – como en el equipo de Brasil del Mundial de 1958, con lo laterales Nílton y Djalma Santos con un rol más ofensivo-. Con el desarrollo del juego, los laterales han ganado importancia en el ataque: el término “lateral moderno” destaca toda la contribución que realiza esta posición en el fútbol de hoy en día.
¿Cuáles son sus responsabilidades en fase de posesión?
Un lateral moderno debe realizar desdoblamientos constantemente por fuera o por dentro del extremo que juegue por delante de él. Una vez en posiciones de ataque, el lateral debe saber realizar centros, recortes, pases entre líneas – o recibir ese tipo de pases – y cambios de juego.
La capacidad parar regatear y realizar largas carreras hacia adelante también es importante, mientras que la habilidad para superar a un oponente en situaciones de uno contra uno también puede ser útil.
Los laterales modernos también tienen la función de aportar amplitud en el ataque, con los extremos o delanteros abiertos normalmente en posiciones más centradas (como Mo Salah, arriba). Los laterales, a menudo, se posicionan abiertos para recibir cambios de juego, algo que también facilita que los defensas rivales liberen la marca sobre el extremo o el volante de ese costado, que tendrá más facilidad para generar peligro.
¿Cuáles son las responsabilidades del lateral moderno en fase defensiva?
Los laterales de hoy en día a menudo tienen la responsabilidad de participar en la presión alta en campo rival, especialmente en los costados. Tras realizar esta presión avanzada, el lateral normalmente tiene que evitar que se produzcan envíos a su espalda, e intentar desplazar esa amenaza a posiciones más centradas.
Además, tienen que ser jugadores muy en forma y trabajadores, con la capacidad de regresar a posiciones retrasadas rápidamente tras una pérdida de balón, para proteger los costados de los defensas centrales. Necesitan poder cubrir largas distancias y poder llegar a defender una acción cuando se produce un cambio de juego del rival.
El lateral moderno también tiene que ser ágil, rápido e inteligente en su posicionamiento defensivo, así como saber lidiar con las situaciones de uno contra uno.
¿Quiénes son los mejores laterales modernos?
Trent Alexander-Arnold
En el 4-3-3 del Liverpool de Jürgen Klopp, Alexander-Arnold aporta la capacidad de realizar grandes centros desde muchas posiciones. Es capaz de enviar balones peligrosos desde una posición en estático desde lejos de la portería rival, pero también sabe realizar desdoblamientos para después elegir un compañero al que enviar un centro. Asimismo, muestra una habilidad excepcional cuando tiene que realizar cambios de juego, al igual que es capaz de enviar pases precisos para romper líneas tanto por abajo como con pases por encima de la defensa.
Andy Robertson
Robertson supone para el Liverpool una amenaza en ataque similar que Alexander-Arnold, aunque tiende a ser más incisivo en sus carreras y supone un peligro cuando encara en situaciones de uno contra uno, destacando su capacidad de realizar un autopase para superar al defensor y así poder enviar un buen centro (arriba). Robertson quizás no es tan técnico como Alexander-Arnold, y aporta una menor variedad de pases, pero es más atlético y sabe desplegarse más rápidamente tanto con el balón como sin él.
Jordi Alba
Una pieza clave en los equipos legendarios del Barcelona y de España en la última década, los desdoblamientos de Alba son una amenaza constante en el costado izquierdo, y se beneficia de la capacidad de pase brillante de sus compañeros. A menudo recibe el balón a través de pases por encima de la defensa rival, aunque también puede recibirlo en parado, antes de realizar un centro. Ha tenido mucho éxito con pases hacia atrás para Lionel Messi, cuando el argentino justo entra en el área. Alba tiene una buena visión y capacidad para detectar las carreras de sus compañeros, así como para adaptar el centro dependiendo de la posición en que estos se encuentren.
¿Qué otros jugadores son ejemplos del lateral moderno?
• Ashley Cole en el Chelsea, en particular con Carlo Ancelotti.
• Dani Alves en el Barcelona de Pep Guardiola, Sevilla y selección de Brasil.
• Cafú en la selección de Brasil y AC Milan.
• Kyle Walker y Danny Rose en el Tottenham con Mauricio Pochettino.
• Dani Carvajal y Marcelo en el Real Madrid de Zinedine Zidane.
¿Cuáles son los beneficios de jugar con un lateral moderno?
Disponer de un lateral con mentalidad ofensiva permite al extremo o al volante de ese costado moverse hacia dentro y encarar la portería rival, así como crear superioridades en zonas centrales que pueden suponer una mayor amenaza que las generadas en los costados. Los laterales modernos también aportan una opción para atacar por fuera ante un bloque bajo del rival; su altura y amplitud puede también estirar la línea defensiva rival, generando más espacio por dentro. Este posicionamiento también provoca que el extremo rival tenga que retrasar su posición, con lo que limita su amenaza en ataque.
¿Cuáles son las desventajas de jugar con un lateral moderno?
Jugar con un lateral moderno puede provocar grandes espacios en los costados por donde el rival puede buscar contraatacar. Si el oponente consigue encontrar este espacio, es posible que los defensas centrales tengan que lidiar con un delantero rápido que les supere en velocidad.
Si un entrenador pide a un lateral que contribuya tanto en fase ofensiva como defensiva, pero el jugador no es capaz de realizar adecuadamente una de las dos tareas, el equipo puede verse perjudicado. Esta posición requiere de una inmensa capacidad física, sobre todo en cuanto a velocidad y resistencia; si el jugador elegido no es capaz de seguir el ritmo del partido, su equipo puede tener serios problemas en un extremo u otro del campo.