MARTÍN ZUBIMENDI
Real Sociedad, 2019-Presente
Martín Zubimendi estuvo cerca de firmar por el Liverpool en el verano de 2024, pero finalmente decidió quedarse en la Real Sociedad. Aun así, los rumores de que podría dejar San Sebastián en un futuro próximo no han cesado. Queda por ver si se trata solo de una ilusión de sus posibles pretendientes, entre los que también figura el Arsenal de Mikel Arteta y el Manchester City, este último con la intención de cubrir la baja de larga duración de Rodri en el mediocampo. Precisamente, Zubimendi sustituyó a Rodri en el descanso de la final de la Eurocopa 2024 en el partido entre España e Inglaterra, con victoria 2-1 para el combinado español.
Nacido en San Sebastián, Zubimendi ha sido parte de la Real Sociedad desde que entró en su cantera con 12 años. Tras seguir su desarrollo con los equipos filiales, debutó en La Liga en 2019, con 20 años. Un año después ganó su primer gran trofeo, la Copa del Rey, antes de colgarse la medalla de plata olímpica con la selección de España en 2021. Desde entonces, su juego no ha dejado de crecer, de ahí el interés de algunos de los mejores equipos de la Premier League o también del Barcelona en la Liga española.
A continuación, nuestros entrenadores con licencia UEFA analizan los aspectos técnicos y estilo de juego de Zubimendi que le han convertido en un jugador tan codiciado.
Análisis técnico
Martín Zubimendi es un centrocampista diestro que ha jugado en la posición de pivote en el mediocampo durante la mayor parte de su carrera profesional, tras desempeñarse brevemente como interior en su primera temporada en la elite. Con balón, es un jugador capaz de controlar el tempo y el ritmo en las salidas desde atrás, donde se siente cómodo recibiendo bajo la presión rival. La clave de su éxito en el pase ha sido la constancia y los pequeños reajustes en sus movimientos, buscando siempre ángulos, movimientos de apoyo y carreras sutiles que le ayuden a mantener la posesión. Esos pases, cuando es posible, también le permiten superar la primera línea de presión o el bloque defensivo del rival.
Sus movimientos le permiten alejarse de los adversarios, ganando de ese modo tiempo y espacio para recibir el balón. Como ocurre con los mejores pivotes, a menudo parece disponer de más tiempo que nadie sobre el terreno de juego. Esa es la clave para jugar en esta posición concreta, desde la que puede mantener la posesión con la línea de fondo, o penetrar hacia los jugadores situados entre líneas (abajo).
El nivel de precisión en los pases cortos de Zubimendi es muy destacado. Suele encontrar a sus compañeros con pases en un ángulo óptimo, con una fuerza ideal en el envío y siempre orientado hacia el perfil correcto. Esto ayuda a sus compañeros a controlar mejor la posesión, al mismo tiempo que muestra la variedad de sus pases, incluido el juego con progresión.
La calidad de Zubimendi en los duelos individuales también es digna de resaltarse. Es agresivo, asertivo y se compromete plenamente a dejar su espacio, o al hombre, para competir por la posesión. Es muy oportuno en sus saltos desde la línea de fondo para ejercer el pressing en el centro del campo, apoyando la presión tras pérdida. Al mismo tiempo, cubre inteligentemente las líneas de pase para limitar las oportunidades del rival de jugar hacia delante, en lugar de correr ciegamente hacia el balón.
Cuando se posiciona más profundo, protege bien los espacios centrales, una baza importante para un pivote único. En el juego aéreo se desenvuelve a un nivel notable y, cuando abandona los espacios por delante de la defensa central, puede ser agresivo en el tackling (abajo).
Zubimendi también está evolucionando en su rango de pase. Ya posee la capacidad técnica para realizar envíos largos precisos, aunque a veces estos deberían ser más variados. Idealmente, un pivote único debe ser capaz de encontrar con precisión a todos los jugadores de la línea delantera, además de cualquier corredor de apoyo desde el fondo. La Real Sociedad no ha recurrido a pases más largos con regularidad desde que Zubimendi es titular, pero su posicionamiento no siempre permite el pase más largo alejado de la presión rival. Debido a sus constantes reajustes y a su habilidad para conectar con compañeros cercanos, su capacidad para cambiar la orientación del juego, abrir el campo o atacar los espacios a la espalda de una zaga alta se ha visto limitada.
Cuando ha ajustado sus movimientos lejos del balón, desplazándose ligeramente hacia atrás, las oportunidades de hacer subir al balón han aumentado notablemente. Esto le permite realizar pases más cortos y más largos (abajo), y sin duda tiene la capacidad técnica para aumentar su rango de pase. Es posible que tenga que perfeccionar sus movimientos para que este elemento de su juego aparezca con más frecuencia.
Único pivote
Durante la mayor parte de su carrera, Martín Zubimendi se ha desempeñado como pivote único. Entre las temporadas 2020/21 y 2023/24, su entrenador en la Real Sociedad, Imanol Alguacil, utilizó a menudo un 4-3-3 o un 4-4-2 en rombo. Como resultado, Zubimendi se desplegaba en la base del centro del campo, con al menos dos interiores por delante. Como estos interiores solían estar situados bastante arriba, Zubimendi tenía que buscar los ángulos de pases por fuera, jugar de primeras o utilizar un juego más directo para superar la presión rival. Jugadores como Mikel Merino, David Silva y Brais Méndez han actuado entre líneas, recibiendo pases rápidos de Zubimendi para instigar el juego de ataque.
Zubimendi también ha demostrado su capacidad para saltarse los interiores y buscar la línea de ataque. Esto permite combinaciones más arriba y ataques más penetrantes a través de conexiones con el delantero centro (abajo), o con un extremo invertido. Zubimendi disponía naturalmente de más opciones de pase central en un 4-4-2 en rombo. La presencia de un delantero centro adicional y de un mediapunta le permitía hacer progresar el balón por el centro, rompiendo líneas.
Su papel en esa estructura en rombo, sin embargo, hacía más hincapié en los duelos y la defensa, especialmente al estar los dos laterales adelantados. Su rendimiento defensivo aumentaba drásticamente cuando había una cobertura mínima en las transiciones defensivas o cuando la Real Sociedad defendía durante periodos prolongados. Entre las temporadas 2020/21 y 2023/24, Zubimendi se situó entre los tres mejores del equipo en duelos defensivos. En la temporada 2022/23, con la Real sobre un 4-4-2 en rombo, ocupó el primer puesto en duelos defensivos.
Doble pivote
Martín Zubimendi ha tenido ocasionalmente un compañero en el pivote, sobre todo en la campaña 2021/22, cuando jugó a menudo junto a Mikel Merino. Cuando la Real Sociedad ha utilizado un dibujo 4-2-3-1, Zubimendi ha conectado con la pareja de delantero y mediapunta, como parte de una estructura de un cuadrado central. Allí, los extremos corrían por delante y atacaban más arriba, con los laterales dando apoyo por dentro (abajo).
Esto ha permitido a Zubimendi correr más hacia delante sin balón, especialmente cuando su compañero de pivote se replegaba más, o cuando estaba situado demasiado lejos para impactar el balón. Zubimendi se ha mostrado dispuesto a avanzar después de soltar el balón, para ofrecerse en la ejecución de paredes. Este movimiento hacia delante también le ha ayudado a alejar a los defensas de su compañero receptor. Así les permit atacar en el 1 contra 1, una ventaja especial para los extremos.
Sin el balón en un 4-2-3-1, Zubimendi ha tenido licencia para ser más agresivo en su presssing y en los duelos. Con un compañero a su lado en el mediocampo capaz de cubrirle, ha podido implicarse más fácilmente en una presión más alta. Sin embargo, siguió protegiendo bien los espacios centrales. Era, a menudo, el que presionaba hacia atrás y cubría a sus centrales, en cualquier fase del juego.
El Liverpool intentó su fichaje, pero sin suerte. De cara al próximo mercado de invierno, ¿podrá ser capaz otro equipo de la Premier League de conseguirlo? De lo que no hay duda, independientemente de su futuro, es que Martín Zubimendi es actualmente uno de los pivotes mejor valorados en Europa.
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Redacción: The Coaches' Voice