premier league, 15 de diciembre 2024
Gvardiol (36)
Bruno Fernandes (88, pen)
Diallo (90)
Rúben Amorim y Pep Guardiola se medían por primera vez en el primer derbi de Mánchester, con victoria muy importante para el técnico portugués, que, sin duda, le refuerza en sus primeros días como técnico del United. En un partido entre dos equipos con apuros en lo que va de temporada, el Manchester City parecía encaminado a sumar tres puntos poco convincentes, pero, sin duda, muy bienvenidos. Entonces, Amad Diallo, del United, dio la vuelta al partido.
En el minuto 88, Matheus Nunes cometió una falta sobre el marfileño de 22 años, que transformó Bruno Fernandes. Instantes después, Diallo recibió un pase en largo, superó a Ederson en la portería del City y remató casi sin ángulo para sentenciar la victoria visitante.
Antes de ese final tan trepidante, el City se había adelantado con un cabezazo de Josko Gvardiol en la primera parte, que puso de manifiesto una vez más la debilidad del United a la hora de defender las acciones a balón parado. Pero después del 1-0 no hubo mucho más por parte de ninguno de los dos equipos, hasta que Diallo explotó para liderar la victoria de 'Los Diablos Rojos'.
Análisis de los entrenadores
“Hoy teníamos que haber ganado el partido”, dijo Pep Guardiola sobre su equipo, el City. “No se trata de un jugador u otro: soy el jefe, el entrenador, tengo que encontrar soluciones y hasta ahora no lo he hecho. Esa es la realidad”.
“Se nota que estuvimos cerca de marcar”, dijo Amorim tras el Derbi de Mánchester. “Mejoramos nuestra velocidad cuando pudimos realizar carreras y tuvimos algunas oportunidades. Controlamos muy bien a (Erling) Haaland y a los demás jugadores de ataque del City. Al final, cuando marcamos el primero, se nota en el equipo, querían más”.
El nuevo dibujo del City
Desde el 4-3-3 de partida, el Manchester City desplazó a Gvardiol al centro del campo para formar un doble pivote junto a Ilkay Gündogan. El extremo Jérémy Doku y el lateral Nunes ocuparon la banda izquierda del City, mientras que Bernardo Silva se situó en la derecha. Por su parte, Phil Foden y Kevin De Bruyne actuaron entre líneas —por detrás de Haaland—, con la ayuda de uno de los dos jugadores de la banda izquierda, Doku o Nunes, actuando el City de ese modo casi con tres mediapuntas. Kyle Walker y Días construían la salida de balón desde la última línea, dando a los locales un inicio de juego (abajo) que no se había visto antes esta temporada.
Sin embargo, los de Guardiola tuvieron dificultades para superar el bloque 5-4 del Manchester United en su fase defensiva. Desde atrás, Gündogan se unió a la siguiente línea del City, dejando a Walker y Dias junto a Gvardiol, con la presencia de Rasmus Højlund entre estos jugadores. Por delante, cuatro futbolistas del City jugaron entre las líneas, con Silva y cualquier otro jugador manteniendo la amplitud por la banda izquierda del City (abajo).
Algunas de las mejores combinaciones locales en este Derbi de Mánchester se produjeron en los espacios centrales, cuando Foden y De Bruyne atacaban en situaciones de 1x1 y contaban con el apoyo de Doku, Gvardiol y Gündogan. No obstante, al City le bastó un remate de cabeza de Gvardiol en un córner corto para marcharse al descanso con una ventaja poco convincente, y es que luego los de Guardiola no dispararon ni una sola vez a puerta en toda la segunda parte.
Uno de los inconvenientes de la nueva versión del City en su salida fue los espacios que facilitaron para los contragolpes del United. Con sólo Dias y Walker atrás, se abrían amplios espacios para que los de Amorim progresaran y combinaran, aprovechando los espacios antes de que Gvardiol pudiera replegar. Así, las carreras de los mediapuntas, Fernandes y Diallo, a ambos lados de Højlund, ayudaron a superar la defensa del City; incluso con mayor presencia desde que Fernandes se situó más arriba cuando el lesionado Mason Mount fue sustituido por Kobbie Mainoo a los 14 minutos. El apoyo adicional del lateral derecho, Noussair Mazraoui, también resultó útil en los momentos de contragolpe del United.
El United: juego por fuera
El 5-4-1 del Manchester United se transformó en un 3-4-2-1 en los momentos de ataque, con buenas opciones de juego por las bandas en la primera parte. Con el City utilizando un estrecho 4-4-2 en fase defensiva —y de modo poco convincente un 4-3-3 en pressing en campo rival—, los cambios de orientación del United encontraron a sus laterales (abajo). De ese modo, los visitantes pudieron conectar con los mediapuntas, Diallo y Fernandes. Aunque el estrecho centro del campo del City protegía el acceso directo a los mediapuntas del United y a Højlund, el juego por fuera empezó a dejar expuesto a su bloque defensivo.
Los continuos cambios de orientación ayudaron al United a progresar, y el juego de izquierda a derecha resultó ser el más eficaz, dejando al descubierto la presión de Doku. A menudo, el extremo francés se vio atraído hacia Matthijs de Ligt —o hacia un Mazraoui más profundo—, lo que obligó a Foden a realizar el balance defensivo, abandonando de ese modo su influencia en la zona central. Esto creaba espacios por dentro para que el centro del campo del United recibiera el balón en esa zona, arrastrando a Nunes de la línea de defensiva. A partir de ahí, las llegadas de Mazraoui desde atrás —o las internadas de Diallo— ayudaron a superar el bloque del City (abajo).
En la segunda parte del Derbi de Mánchester, el City defendió durante más tiempo en un bloque medio. Esto mientras el United tuvo mucho más el balón. Los de Amorim penetraban menos, pero seguían buscando cambiar la orientación del juego de izquierda a derecha. Los cambios de juego de Harry Maguire y Lisandro Martínez hicieron llegar el balón a Diallo y Mazraoui (abajo). Mientras, las permutas por la izquierda en el centro del campo ayudaron a mantener la posesión antes de hacer llegar el balón al dúo de la banda derecha. También las permutas entre Diallo y Mazraoui por su lado ayudaron a atacar la insegura banda izquierda del City.
La banda derecha del United continuó su amenaza a través de los cambios de orientación, pero también después de la recuperación de balones en el centro del campo. Las conducciones de balón de Diallo y de Mazraoui en profundidad ayudaron al United a penetrar en el campo del City, con Højlund descolgado para asegurar y combinar. Las carreras de Fernandes (abajo) o Mainoo atacaban la espalda del rival y rompían la cobertura del centro del campo del City.
Fernandes desperdició una oportunidad (arriba) de empatar en el minuto 73, en un mano a mano con Ederson que se marchó desviado. Diallo, quince minutos después, forzó el penalti que Fernandes ejecutó con acierto.
Diallo fue el jugador más efectivo del United durante toda la segunda parte. Por ello, era lógico que se convirtiera en el jugador decisivo del encuentro con el 1-2 final.
El City y Guardiola vuelven a la casilla de salida, tras su octava derrota en once partidos en todas las competiciones. Situación que contrasta con el United y Amorim, quienes salieron del Ettihad con una celebrada victoria en el Derbi de Mánchester.
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