premier league, 8 de octubre 2023
Martinelli (68)
Con esta victoria por 1-0, Mikel Arteta se convirtió en el primer entrenador en ocho años en guiar al Arsenal a una victoria en la Premier League contra el Manchester City. Una victoria que no es decisiva, pero sí importante para que los de Londres se convenzan de que esta temporada sí pueden ir de tú a tú hasta el final con los citizens por el título en la Premier.
Los de Pep Guardiola llegaron al Emirates Stadium sin Rodri en el centro del campo por sanción y Kevin De Bruyne lesionado. No obstante, la profundidad de plantilla de los vigentes campeones les permitió alinear un once de alto nivel. El Arsenal no pudo contar con Bukayo Saka en ataque, pero supo sobreponerse a su ausencia, superando al rival con una aguerrida actuación.
El gol del Arsenal no llegó hasta los minutos finales, después de un partido de excesivo control por parte de ambos equipos, más focalizados en neutralizar a su rival que generar ocasiones. Gabriel Martinelli logró batir a Ederson con un disparo desviado por el defensa Nathan Aké, dando así tres puntos muy importantes al Arsenal.
El análisis de los entrenadores
"Para ganarles, teníamos que perder contra ellos", afirmó Mikel Arteta. "Teníamos que perder probablemente como perdimos en el Etihad (4-1 en abril de 2023). La temporada pasada perdimos de dos maneras distintas. El equipo ha demostrado esta vez una gran madurez. Eso viene de la experiencia. A veces lo necesitas para convertirte en un equipo mejor".
"Empezamos muy bien, con dos o tres ocasiones", dijo Guardiola. "Ellos empezaron la segunda parte muy bien con el ritmo. Luego el partido se igualó y consiguieron un gol en un disparo desviado. Han ganado, y enhorabuena a ellos", añadió el técnico del City.
A continuación, nuestros expertos destacan los puntos tácticos clave de este partido entre los dos grandes aspirantes al título.
223564220418141991236242082891947Bernando Silva, sorprendente pivote
En el 4-3-3 del Manchester City, los dos extremos, Phil Foden y Julián Álvarez, se movieron a zonas interiores en torno a Erling Haaland. Kyle Walker y Josko Gvardiol, en los laterales, se desdoblaban por fuera para generar amplitud. Por su parte, los interiores Rico Lewis y Mateo Kovacic permanecieron juntos, por delante de Bernardo Silva, quien actuó sorpresivamente como pivote (abajo).
Bajo esa estructura, el City dispuso de muchos jugadores en la zona central para combinar. Sin embargo, al Arsenal —y especialmente a su doble pivote— le resultó más fácil controlar los pases centrales de su rival. Sin balón, la acumulación de jugadores en zonas interiores facilitó al City su tarea en la transición defensiva, ya que anularon casi todos los intentos de contraataque del Arsenal en la zona central, obligándoles a retroceder rápidamente .
Dentro del pasillo interior izquierdo, Foden atacó con determinación la espalda de su marcador. Esto ocurrió especialmente cuando el doble pivote del Arsenal saltaba hacia Álvarez, o en algunas ocasiones sobre Kovacic o Aké.
La movilidad de Haaland en zonas interiores supuso que Ben White y William Saliba no supieran cómo gestionar las intervenciones de Foden. Pasados unos minutos, White se dedicó entonces a seguir las carreras de Foden a su espalda, como también cuando el jugador del City buscaba recibir pases más cortos entre líneas.
Eso permitió a Gvardiol amenazar por delante de Gabriel Jesus (abajo), obligando al extremo del Arsenal a retroceder. Sin embargo, las acciones de Gvardiol en el último tercio de campo no causaron problemas al Arsenal, y al City le costó generar ocasiones de peligro.
Presión alta
El 4-3-3 del Arsenal también adaptó su posicionamiento en fase ofensiva. Oleksandr Zinchenko se movió con frecuencia hacia el interior, con los de Arteta construyendo su salida de balón con tres defensas. Siempre que Zinchenko se quedaba más abierto, Walker salía de la línea de fondo para saltar sobre el lateral del Arsenal, iniciando a menudo la presión más alta de sus compañeros delanteros.
El City presionó alto sobre un 4-1-4-1, con Lewis y Kovacic saltando desde el centro del campo (arriba) hacia los pivotes Declan Rice y Jorginho. Haaland, por su parte, se cerró por dentro para presionar a Saliba, con los extremos Álvarez y Foden cubriendo a White y Gabriel.
Ambos equipos ejecutaron la presión alta con grandes prestaciones, anulando de ese modo la salida de balón del rival. No obstante, el City tuvo más éxito en la primera parte en cuanto a recuperaciones peligrosas, sobre David Raya en particular.
Lewis saltó del trío de mediocampistas del City sobre el guardameta de los anfitriones (abajo), intentando bloquear el pase al jugador al que había estado marcando, normalmente Rice. Haaland, a su vez, se cerró por dentro ligeramente en busca de una cobertura adicional, mientras Foden y Álvarez mantuvieron sus funciones defensivas por fuera. Kovacic también apoyó a Lewis para ayudar al City a ganar el balón por alto. Raya tuvo suerte de no ser castigado al menos una vez en su juego con los pies.
El Arsenal presionó muy arriba con un 4-4-2, con Martin Ødegaard uniéndose a Eddie Nketiah en la primera línea de los locales. En la medida de lo posible, el Arsenal forzó el juego rival hacia su banda derecha, presionando de dentro hacia fuera. En ese balance en la presión, Rice o Jorginho saltaron sobre Silva o Kovacic (abajo).
El Arsenal intentó orientar el juego del City por fuera, con Jesus sobre Gvardiol, y White muy agresivo con Foden. Sólo una vez jugó el City de forma intencionada por encima de la presión del Arsenal en la primera parte hacia Haaland. En resumen, el Arsenal anuló gran parte de las jugadas más profundas del City.
Cambios para intentar ganar el partido
Zinchenko siguió en zonas interiores en la primera parte de la salida de balón del Arsenal y también en los momentos en que el City jugaba sobre un bloque medio establecido. Pero cuando el Arsenal avanzó hacia el último tercio con la entrada de Gabriel Martinelli, Zinchenko se adelantó para dar apoyo y centrar (abajo).
La pareja de jugadores por la banda derecha del Arsenal, formada por White y Jesus, también operó más arriba en la segunda parte. Esto obligó a Foden y Álvarez a trabajar más atrás sin el balón. Por otro lado, Rice fue vencedor en algunas acciones de transición que impidieron al City salir a la contra, y luego encontró al dúo por fuera en el lado opuesto para iniciar otro ataque.
Los cambios de Arteta posicionaron a Kai Havertz cerca de Ødegaard (abajo). Esto dio al Arsenal una salida para jugar por encima del centro del campo del City con más pases ofensivos. Jesus y Martinelli se estrecharon en los pasillos interiores, generando un cuadrado para tratar de combinar a través o por encima del City. Los laterales White y Tomiyasu (en lugar de Zinchenko) también proporcionaron apoyo en la banda.
Thomas Partey (en lugar de Jorginho), junto a Rice como doble pivote, mejoró al Arsenal. Esto fue notable en las transiciones, cuando los locales intentaron encerrar al City y generar periodos de presión alta hacia el final del partido.
El gol del Arsenal llegó tras un balón largo de Partey a Tomiyasu. El internacional japonés cabeceó hacia Havertz, que cedió para Martinelli. Finalmente, el disparo desviado del brasileño batió a Ederson.
Antes de encajar el gol, Guardiola cambió a un trío de delanteros más horizontal y abierto, con Foden y Jérémy Doku (en lugar de Álvarez) como extremos. Doku empezó por la derecha, buscando el uno contra uno ante Zinchenko, pero luego fue desplazado a la izquierda.
Al mismo tiempo que Doku, Guardiola dio entrada a John Stones y Matheus Nunes en el minuto 68, en lugar de Lewis y Kovacic. Stones actuó inicialmente como pivote, pero Nunes fue bajando desde la posición de interior para formar un doble pivote con balón (abajo).
Silva entonces intercambió su posición, interviniendo a partir de los movimientos de Stones, principalmente como interior más alto del City. Así, el portugués pudo combinar con Foden, que entró por la derecha, lo que facilitó espacio para que Walker avanzara.
El City se centró en las ventajas numéricas y combinaciones por la derecha, liberando a Doku en la izquierda para atacar en el uno contra uno. Sin embargo, a pesar de estos cambios, a los de Guardiola les siguió costando crear peligro contra la notable zaga del Arsenal.
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