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¿Qué es un cuadrado en mediocampo?
Un cuadrado en mediocampo está formado por cuatro jugadores —dos pivotes y dos mediapuntas— cuya posición combinada se asemeja a la de un cuadrado.
¿Cuáles son las responsabilidades de los jugadores en un cuadrado en mediocampo?
Los principales objetivos de un cuadrado en el mediocampo son dominar el balón, hacer progresar el juego y generar ocasiones para la línea delantera.
Los dos pivotes apoyan por delante de los centrales. En algunos casos, un pivote puede ser un lateral invertido que se ha desplazado al centro del campo cuando su equipo tiene el balón.
Por lo general, ambos pivotes se consideran ante todo centrocampistas. En caso necesario, pueden pasar individualmente a la línea de fondo, especialmente para permitir que un lateral se adelante (abajo).
Los pivotes reciben desde la línea de fondo, idealmente combinándose con los dos medipauntas por delante o utilizando jugadores de banda para hacer progresar la jugada. Deben ser muy conscientes del espacio, el tiempo y el pressing, ya que a menudo recibirán el balón bajo presión a su espalda.
Los dos mediapuntas también sentirán la presión desde atrás, pero ligeramente más arriba y entre líneas. Su objetivo es romper la última línea rival con balones en profundidad, pases filtrados o mediante regates y combinaciones con cualquiera de los delanteros o atacantes de banda. Se espera que los mediapuntas busquen recibir a espaldas, ataquen los centros, rematen y, en última instancia, marquen una buena parte de los goles de su equipo.
¿Cuáles son las responsabilidades de los jugadores en defensa en un cuadrado en mediocampo?
Sin el balón, los pivotes bloquean, cubren y vigilan los espacios centrales por delante de la defensa, impidiendo que los pases penetren a través del centro de la defensa. También compiten en la primera y segunda fases del juego directo, y apoyan la presión tras pérdida en zonas centrales. Los pivotes deben vigilar a los delanteros rivales, especialmente a los que se internan por el centro, pero también en las zonas hacia las bandas, ayudando a los laterales o carrileros a defender los pasillos exteriores.
Los mediapuntas contribuyen al pressing arriba, y pueden trabajar a ambos lados de un único delantero centro. Deben ser capaces de saltar sobre los centrales rivales y en los flancos, forzando el juego del oponente hacia dentro o hacia la línea de banda en función de la táctica sin balón del equipo. En un bloque más bajo, los mediapuntas vigilan el acceso al medio o directo al centro del campo.
¿Cuáles son buenos ejemplos de un cuadrado en mediocampo en diferentes formaciones?
Los clubes de la franquicia de Red Bull han utilizado a menudo un dibujo estrecho cuando atacan, más frecuentemente mediante un 4-2-2-2 (abajo). Esto suele implicar que los dos jugadores de banda se muevan hacia dentro por delante de los dos centrocampistas centrales, o que un mediocampo en rombo se reorganice en dos pivotes y dos mediapuntas para formar el cuadrado.
Un equipo como el Red Bull Salzburgo es más peligroso cuando contragolpea desde atrás, o cuando aplica una presión tras pérdida y pasa al ataque tras recuperaciones por arriba. En el cuadrado en mediocampo dentro del 4-2-2-2, los dos carrileros estrechos reciben entre líneas bajo el rol de mediapuntas. Sin embargo, partiendo como extremos se sienten cómodos conduciendo hacia delante o regateando rivales. Esto con los delanteros centrales fijando a los centrales rivales y corriendo por delante.
Tuchel en el Chelsea
Durante su etapa en el Chelsea, Thomas Tuchel utilizó un cuadrado en el centro del campo bajo el sistema 3-4-3. Allí seleccionaba una pareja entre Mateo Kovacic, Jorginho o N'Golo Kanté como pivotes más retrasados. Todos estos jugadores eran capaces de hacer progresar el balón, habilitar a los carrileros que hacían carreras en desdoblamiento, además de cubrir y proteger las zonas centrales (abajo).
Los mediapuntas de los que disponía Tuchel —Mason Mount, Christian Pulisic, Hakim Ziyech y, en ocasiones, Timo Werner y Kai Havertz— eran lo suficientemente fluidos como para intercambiar posiciones con el delantero centro, correr más adelante, atacar los centros y generar ocasiones. Antonio Conte también utilizó un 3-4-3 con un mediocampo en cuadrado durante su etapa en el Chelsea.
Klopp y Guardiola
Tanto Jürgen Klopp como Pep Guardiola han utilizado un cuadrado en mediocampo, añadiendo un segundo pivote desde la línea de fondo. Guardiola a menudo ha dado instrucciones a un lateral para que se mueva hacia dentro en los momentos con balón. En el Bayern Múnich fue Philipp Lahm, mientras que en el Manchester City João Cancelo y Oleksandr Zinchenko han desempeñado este papel. El el Liverpool, Klopp ha desplazado a Trent Alexander-Arnold del lateral derecho (abajo) a la posición de centrocampista. Allí su capacidad de pase le permite encontrar mejor las carreras de los delanteros.
En la segunda mitad de la temporada 2022/23, Guardiola adaptó aún más esta idea. Trasladó a John Stones de la línea de fondo al centro del campo (abajo), junto a Rodri. Esto permitió a los mediocentros Kevin De Bruyne e Ilkay Gündogan desplazarse más arriba y atacar desde la parte superior de un cuadrado en mediocampo reconvertido.
Xavi en el Barcelona
En sus primeros momentos en el Barcelona, Xavi dio mucha importancia a tener dos extremos naturales muy abiertos en todas las situaciones de ataque. Sin embargo, su manera de interpretar el juego ofensivo se ha ido modificando a lo largo del tiempo. Y es que, si bien los carriles exteriores siguen ocupados —en la banda derecha por Ousmane Dembélé y en la izquierda por las incorporaciones de Alejandro Balde desde la posición de lateral—, es el flanco izquierdo donde el técnico azulgrana ha utilizado un cuarto centrocampista. Pedri o Gavi se alternan en esta posición dependiendo del partido y el objetivo a conseguir en el juego (abajo).
Ambos jugadores son los encargados de partir desde banda hacía dentro para generar un cuadrado en el centro del campo, como también superioridades en la zona ancha. Es decir, se trata de convertir un falso extremo en un mediapunta con capacidad para girar, dar un último pase e incluso llegar al área con asiduidad. Con esto, la idea de Xavi es tener siempre un jugador más que el rival para poder atraer por dentro y jugar por fuera.
¿Cuáles son las ventajas de jugar con un mediocampo en cuadrado?
Las superioridades del cuadrado en el mediocampo con la sociedad entre dos o tres centrocampistas habilita a los equipos a dominar esta área del campo. También la posesión de balón
Defensivamente, garantiza la presencia de muchos efectivos para ejercer la presión tras pérdida en el centro del campo. A su vez ofrece la posibilidad de rápidas recuperaciones. El cuadrado en mediocampo también ofrece una sólida defensa contra el juego directo. Esto debido a que la abundante presencia de jugadores permite competir en la primera y segunda fases. Los defensas centrales también están bien protegidos a través del cuadrado en mediocampo.
¿Cuáles son las desventajas de jugar con un cuadrado en mediocampo?
En un cuadrado en mediocampo, los pivotes y los mediapuntas suelen estar en la misma línea vertical durante la posesión. Esto puede ayudar a los adversarios a bloquear las líneas de pase hacia los mediapuntas. También puede faltar amplitud, debido al número de jugadores necesarios para formar el cuadrado en el mediocampo.
El rival puede cubrir defensivamente el centro aumentando la presencia de jugadores, defendiendo en un espacio compacto y relativamente pequeño para restringir la progresión y limitar la creación de ocasiones.
Los jugadores que cambian significativamente de función entre su posición sin balón y la de un cuadrado en mediocampo en posesión, como es el caso de los laterales invertidos, son extremadamente especializados y, por lo tanto, bastante escasos. No es de extrañar que son pocos los equipos que disponen de este tipo de jugadores, incluso al más alto nivel.
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Redacción: The Coaches' Voice
