eurocopa 2024 semifinales, 9 de julio 2024
Yamal (21)
Olmo (25)
Muani (8)
España se clasificó para la final de la Eurocopa 2024 después de superar a Francia en semifinales. Una nueva prueba superada por los de Luis de la Fuente en el campeonato, remontando en esta ocasión el tempranero gol de Kolo Muani para Francia en el minuto 8. Y lo hicieron con dos goles en apenas cuatro minutos, contra una selección francesa que, cabe recordar, solo había encajado un gol en los cinco partidos anteriores.
Lamine Yamal firmó el 1-1 con un espectacular disparo desde fuera del área que dibujó la curva perfecta para alejarse de la estirada del portero y meterse entre los tres palos. Pero el gol de Yamal no solo fue el del empate, sino la acción que marcó un cambio de dinámica del partido, hasta entonces dominado por Francia. Dani Olmo, con la corriente a favor de España, hizo el segundo casi en el siguiente ataque con un disparo cruzado que Jules Koundé llevó a su portería.
Francia se encontró entonces ante la necesidad de adelantar sus líneas, frente a una selección española que controló el segundo tiempo con una sólida defensa e intentos de largas posesiones —siempre con Rodri al mando— para frenar el ímpetu francés. Kylian Mbappé, que intercambió su posición durante el partido, jugando de 9 y extremo izquierdo, también fue bloqueado por una selección de España que jugará en el Olímpico de Berlín su quinta final en una Eurocopa.
Análisis de los entrenadores
"Hemos estado perfectos. En el primer tiempo había más situaciones de contragolpe. En el segundo tiempo ha sido un partido más táctico. Era lo que tocaba para jugar esta semifinal", señaló el técnico de España, Luis de la Fuente. "Intentamos ser lo más eficaces posibles. A pesar de todo, abrimos el marcador, luego, todo cambió. España dominó. Pero nosotros no estuvimos tan bien. Nos faltó verticalidad", analizó el seleccionador de Francia, Didier Deschamps.
Construcción del ataque
España se dispuso con balón en un 4-2-3-1, construyendo su ataque mediante combinaciones en campo propio. Los intercambios de posiciones en el sector derecho facilitaron la superioridad numérica y posicional al otro lado, en el carril izquierdo, siempre con Aymeric Laporte y Marc Cururella en superioridad frente a Ousmane Dembélé. De ese modo, España pudo encontrar al hombre libre en Cucurella, quien pudo avanzar con libertad hasta campo contrario (abajo).
En la banda derecha, Lamine Yamal se identificó como tercer hombre tras recibir casi siempre de Nacho. Para conseguir ese enlace, Rodri, con su desmarque de apoyo para formar línea de tres en la salida de balón, atraía la marca de N'Golo Kanté, al mismo tiempo que Fabián Ruiz arrastraba la de Aurélien Tchouaméni.
La selección francesa formó en un 4-3-3 en su fase ofensiva, optando por hacer llegar el balón al lado débil español mediante los jugadores exteriores: Dembélé en la banda derecha, con Theo Hernández y Kylian Mbappé en la izquierda tras atraer al dispositivo defensivo de España en la zona activa.
En la salida, Dembélé buscaba generar línea de pase con Dayot Upamecano, tras acercarse el extremo francés a Jules Koundé sin que Cucurella le persiguiera. Ese movimiento de Dembélé para generar línea de pase generó un 3x2 de Francia en el mediocampo, con Dembélé, Tchouaméni y Adrien Rabiot frente a Rodri y Lamine Yamal (abajo).
Ante Francia, Lamine Yamal realiazó más trabajo defensivo que en anteriores partidos, ya que fue el encargado de cerrar el espacio interior que se generaba en la basculación del bloque de España.
Una vez con balón en zona intermedia, Tchouaméni buscó principalmente la profundidad con un pase al espacio generado por el carril de Dembélé, o también con un cambio de juego hacia Theo Hernández y Mbappé, ambos libres de marca en el lado opuesto.
Aprovechar los espacios
El marcaje al hombre que realizó Kanté sobre Rodri provocó espacios relevantes entre Tchouaméni y Rabiot en la zona central, provocando así espacios libres al costado de uno de ellos. La selección española incidió sobre esos espacios para combinar y llegar a la frontal del área con el balón controlado. Todo con la participación de Álvaro Morata, encargado de fijar a Upamecano y William Saliba.
En la jugada del 2-1, Yamal realizó un desmarque interior en diagonal, obligando con su movimiento a Rabiot a saltar de su posición, como también a Tchouaméni en su ayuda. Eso generó un espacio interior, con Olmo ganando la espalda de Tchouaméni. A partir de esa ventaja se desencadenaron acciones de ataque en ventaja para España, finalizando la acción en el área de Francia con el disparo cruzado del mediapunta español (abajo).
En Francia, los extremos optaron principalmente por llegar a zona de finalización por los carriles exteriores, intentado generar situaciones de 1x1 con su oponente directo. Sin embargo, tanto Dembélé como Mbappé no pudieron conseguir su objetivo, debido al buen repliegue del equipo español.
Ante la imposibilidad de los extremos galos de superar a los laterales de España, Cucurella y Navas, respectivamente, Dembélé y Mbappé optaron por los centros laterales en la primera mitad, conscientes de las dificultades de la defensa española en este tipo de situaciones. De ese modo llegó el gol de Francia. Mbappé fijó a Navas al borde del área, facilitándole al extremo tiempo y espacio para centrar sobre el intervalo que había generado entre Laporte y Cucurella. Kolo Muani aprovechó ese espacio para rematar a gol (abajo).
Línea del mediocampo
Didier Deschamps organizó a Francia en un 4-5-1 en fase defensiva, retrasando la posición de los extremos hasta situarse a la misma altura que Rabiot, Tchouaméni y Kanté. Una disposición que también facilitaba a Francia tener espacio de ataque para correr en caso de robo de balón.
Sin embargo, el repliegue defensivo planteado por el seleccionador francés mostró desajustes, resultando estos claves para no poder controlar los ataques de España. Generalmente, las distancias entre los cinco medios de Francia fue amplia, a la vez que la línea del mediocampo se encontraba desestabilizada por el desajuste que generaba Kanté en su salto sobre Rodri. Ese espacio generado no fue compensado por Dembélé ni Mbappe, ambos con la duda de si ir por dentro para tapar el espacio o salir por fuera para frenar el avance de los laterales de España (abajo).
Esa indefinición de los extremos de Francia fue clave para los intereses del combinado de Luis de la Fuente.
Espacios en la zona de creación
El planteamiento en ataque de De la Fuente facilitó los movimientos a los jugadores encargados de dar orden y criterio con balón, sobre todo, a Rodri.
La intención —casi obsesión— de Francia por frenar la participación del mediocentro español en zona en ataque, facilitó que Nacho fuera el responsable de aprovechar ese espacio para asociarse con Ruiz (abajo). De ese modo, España superó la primera línea defensiva de Francia sin demasiados problemas. Luego evolucionó en campo rival aprovechando los posteriores desajustes en la zaga de Francia.
Francia: sin soluciones y orden en ataque
En la segunda mitad, Deschamps dio entrada a Bradley Barcola, Antoinne Griezmann y Eduardo Camavinga, reorganizándose Francia en ataque en un 4-4-2. Griezmann y Mbappé jugaron en la punta. España, por su parte, reorganizó su defensa con la salida de Navas. Nacho pasó al lateral derecho y Dani Vivian entró como central, en ayudas a Nacho para retener a Barcola.
Cuando el extremo llegaba a línea de fondo y producía el desajuste, se generaba un espacio libre en la frontal de España. Pero los dos puntas de Francia no se organizaron de la manera correcta y realizaron el mismo desmarque de apoyo. Así, en las llegadas al área perdían toda opción de remate al no escalonarse y ofrecer una línea de pase segura sobre el espacio libre generado (abajo).
De ese modo, el ataque francés quedó diluido en la segunda parte —también con la entrada de Olivier Giroud en los últimos minutos para un juego más directo— y sin opciones claras de gol ante una España que firmó su pase a la final.
Puedes ver los análisis tácticos de los partidos más importantes en The Coaches' Voice Análisis/Partidos